Ojo Celestial (3)
[Es
demasiado arriesgado.]
El
Anciano Shin advirtió en contra de mi plan.
Pero
el Abad Principal de Shaolin me había extendido una invitación para unirme, y
el Demonio de Sangre también me instaba a visitarlo.
Aprenderé
todo una vez que vaya.
[¿Así
que vas a entrar en territorio enemigo? Entiendes lo peligroso que es eso mejor
que yo.]
El
Demonio de Sangre ya estaba al tanto de mi existencia y mostraba interés en mí.
No
estoy diciendo que lo haré de inmediato. Solo lo estoy considerando como una
opción.
Tal
como señaló el Anciano Shin, reconocí el peligro de tal acto.
Sin
embargo, el Anciano Shin probablemente también reconocía que era una opción
viable.
Es
difícil buscar solo caminos fáciles cuando te enfrentas a obstáculos
formidables.
Durante
nuestra conversación, un punto de acuerdo con el Abad Principal fue que
debíamos prepararnos para el desastre inminente.
No
estaba seguro si el Abad Principal se refería al desastre relacionado con el
Demonio Celestial, pero fuera lo que fuera, no podría superarlo solo.
Especialmente
si había más incógnitas que certezas.
No
te preocupes, valoro mi cuerpo más que el de cualquiera.
[Ah,
¿Es por eso que te lanzas por todos lados tan imprudentemente?]
Creo
que soy bastante cuidadoso con mi cuerpo, diría yo...
¿Quizás
no?
[Tsk…]
El
Anciano Shin chasqueó la lengua ante mis palabras. Esto significaba que
simplemente no iba a molestarse en hablar más.
A
pesar de mi comentario casual, tenía que sopesar seriamente la decisión de
unirme a Meteoro.
Lo
decidiré después de investigar más sobre ellos.
No
estaba seguro si podría descubrir más respuestas profundizando en el asunto.
Además,
probablemente sería difícil si Shaolin y la Secta de los Mendigos estaban bajo
el control de la Alianza Murim.
Mencionó
que mi padre lo sabía, ¿Verdad?
Eso
fue lo que dijo el Abad Principal, así que tenía que preguntar a mi padre.
Por
lo tanto, lo primero que necesitaba hacer era salir de Shaolin.
Ya
estaba planeando regresar de todos modos, y dado que ya terminé aquí...
"Oh."
Mientras
caminaba para salir de Shaolin, no pude evitar exclamar.
Namgung
Bi-ah, quien me acompañaba, me miró, preguntándose qué pasaba.
Luego
tomé las manos de Namgung Bi-ah e infundí calor en ellas.
"…?"
Namgung
Bi-ah me miró, preguntándose qué estaba haciendo, pero rápidamente la
tranquilicé.
"Espera
un poco, no tendrás frío con tanto calor."
"¿Hmm…?"
"Volveré
en un momento, así que quédate aquí, ¿De acuerdo?"
Namgung
Bi-ah asintió ligeramente ante mis palabras.
Probablemente
estaba desconcertada por esto, pero eligió no cuestionarme.
[¿A
dónde vas?]
Solo
surgió algo.
[¿En
Shaolin…? ¿Ahora de todos los momentos?]
Sí.
Pateé
el suelo y salté alto en el aire, dejando a Namgung Bi-ah allí sorprendida.
Todo
mientras hacía mi mejor esfuerzo por ocultar mi presencia.
****************
En
la habitación ahora ocupada solo por dos hombres, el Bastón Poderoso finalmente
rompió el silencio.
"Abad
Principal."
Se
dirigió al Abad Principal, quien había estado bebiendo té en silencio.
"¿Puedo
preguntar por qué le revelaste tanto a ese niño?"
"¿Una
razón, eh?"
Hehe-
El
anciano se rió secamente.
Solo
una pequeña cantidad de personas en la Alianza Murim y Shaolin sabían del
desastre inminente.
También
era algo que solo el Abad Principal podía compartir con otros.
Porque
no había nada bueno en que el mundo entero supiera sobre esto.
Después
de un momento de silencio, el Abad Principal finalmente respondió al Bastón
Poderoso.
"Simplemente
sentí que era necesario."
"…Abad
Principal…"
"¿Viste
también la reacción de ese niño?"
El
Bastón Poderoso comenzó a pensar en el Dragón Verdadero después de las palabras
del Abad Principal.
A
pesar de los rumores negativos que lo rodeaban, el niño mostró respeto y un
comportamiento adecuado.
"…¿Cuando
reaccionó de manera interrogante?"
"Estoy
hablando de cuando escuchó sobre el desastre."
La
barba del Bastón Poderoso tembló ligeramente después de escuchar al Abad
Principal.
Se
preguntaba de qué hablaba su Abad Principal.
Sin
embargo, no pudo evitar jadear después de escuchar lo que dijo su Abad
Principal.
"Estaba
tranquilo al respecto. De hecho, parecía más sorprendido cuando escuchó sobre Meteoro."
"Sí."
"…!"
"Se
sintió como si ya supiera sobre el desastre inminente."
Ssss-
Ligero
humo comenzó a emanar de la boca del Ojo Celestial.
Este
humo se formaba con Qi, lo que mostraba que la vida del Abad Principal se
estaba desvaneciendo gradualmente.
"¿No
encontraste especial la luz en sus ojos? A pesar de ser solo un niño."
Era
diferente en comparación con la hermosa niña sentada a su lado.
Esa
niña parecía no tener ningún interés en el mundo desde el principio.
A
diferencia de sus parientes con el apellido Namgung...
Ella
se asemejaba a una perla blanca y pura.
Su
atención estaba dirigida únicamente al niño a su lado, y hasta el Bastón Poderoso,
que pasó su vida como monje, lo notó.
¿Cómo
podía hacer eso teniendo al Abad Principal de Shaolin frente a ella?
La
luz en los ojos del niño.
Era
algo a lo que el Bastón Poderoso no había prestado mucha atención.
Era
un joven prodigio que mostró talento en el torneo de este año, y el Bastón
Poderoso estaba impresionado por su cuerpo bien entrenado a su edad…
"Rezo
para que el chico decida unirse a nosotros."
"…Me
cuesta entender."
El
mundo visto a través del Ojo Celestial del Abad Principal de Shaolin estaba más
allá del entendimiento del Bastón Poderoso.
Después
de todo, no era visible a sus ojos.
Aunque
el desastre fue mencionado por el Ojo Celestial, no sabía cuán grande era este
desastre inminente para que su Abad Principal persistiera a pesar de su cuerpo
agotado.
El
mismo Abad Principal dijo que el desastre llegaría al mundo, pero que él no
estaría presente cuando ocurriera.
Precisamente
por eso tenían que prepararse mucho para esto.
El
Bastón Poderoso no pudo decir nada mientras observaba a su Abad Principal rezar
por el futuro, a pesar de que su propia vida se desvanecía.
"Probablemente
hubo una razón para que él me confiara esta responsabilidad. Por lo tanto, debo
aceptarla."
El
Abad Principal dijo que su Ojo Celestial era su responsabilidad. Y el Bastón
Poderoso reconoció que había un significado en esto.
"Bastón
Poderoso."
"Sí,
Abad Principal."
"Debo
ir a visitar la Alianza."
"Fuiste
la última vez, deberías descansar esta vez."
El
Bastón Poderoso dijo esas palabras debido a la salud de su Abad Principal, pero
ya sabía que su Abad Principal no le haría caso.
"No
hay mucho tiempo, así que debería apresurarme."
¿Quería
decir que no había mucho tiempo hasta que el mundo enfrentara el desastre
inminente?
¿O
quería decir que su propia vida se estaba agotando?
El
Bastón Poderoso no se atrevió a hacer esta pregunta.
"…Contactaré
a la Alianza."
"Te
lo agradezco."
El
Bastón Poderoso salió de la habitación, y el Ojo Celestial, que quedó solo en
la habitación, permaneció sentado en calma con los ojos cerrados.
Los
ruidos y la brisa invernal que entraban por la ventana rompieron el silencio,
pero el Ojo Celestial permaneció ajeno a ellos, su mente consumida por
pensamientos del niño que había conocido antes.
Hace
calor. Mucho calor.
Simplemente
cerrar los ojos no impedía la visión del Ojo Celestial.
De
hecho, la agudizaba.
Cerrar
los ojos le permitía percibir más, planteando preguntas sobre muchas cosas,
pero esta era especialmente única.
Pero
todo está negro por dentro.
Hacía
un calor interminable, pero también estaba lleno de oscuridad.
Parecía
un paisaje contradictorio, pero de alguna manera peculiar, los elementos se
armonizaban.
Debido
a eso, el Ojo Celestial sentía que sus ojos le decían que debía mantener su
mirada en ese chico.
El
Abad Principal se preguntó en su mente qué era lo que debía vigilar, pero
concluyó que todo en el mundo tenía un significado.
"…Todo
esto es la voluntad del cielo."
El
Ojo Celestial rezó con los ojos cerrados para que un solo significado se
extendiera en una era prolongada de paz mundial...
Y
para que su vida fuera útil en lograr esa paz.
****************
Sweep.
Sweep.
Alguien
estaba barriendo el suelo con un cepillo más pequeño de lo normal.
Era
un niño monje que parecía tener apenas diez años.
Era
Heeyoung, el monje más joven en Shaolin.
"Dije
que estoy perfectamente bien con volver a trabajar…"
Heeyoung
hablaba en voz baja mientras barría el patio.
Era
porque los demás no dejaban que Heeyoung volviera a sus deberes después del
incidente de ese día.
Les
dije que estaba bien…
Por
alguna razón, Heeyoung había perdido todos los recuerdos de los últimos diez
días. Se sintió desconcertado al despertar en la sala médica, mirando al techo.
Le
revisaron la condición física, pero no había problemas mayores con su cuerpo y
el médico sugirió que la pérdida de memoria probablemente se debía al exceso de
trabajo.
Como
resultado, Heeyoung, quien trabajaba diligentemente para mantener la reputación
de Shaolin, fue obligado a tomar un descanso.
Incluso
se le prohibió entrenar artes marciales hasta que su cuerpo se recuperara por
completo, pero Heeyoung no pudo decir nada ya que fueron sus superiores quienes
le dijeron eso.
Los
superiores deben estar trabajando duro ahora mismo…
Heeyoung
se sintió decepcionado. Al unirse a Shaolin más tarde que otros, creía que
necesitaba esforzarse más.
"Pero
en serio, ¿Por qué no puedo recordar nada?"
Heeyoung
no podía entenderlo.
El
médico atribuyó su pérdida de memoria al exceso de trabajo, pero Heeyoung no
creía haberse esforzado tanto.
Despertar
por primera vez fue lo más desafiante en realidad.
Después
de todo, se sentía incómodo moviendo su cuerpo que no había movido en días.
Según
mis superiores, trabajé igual que siempre.
Heeyoung
no podía evitar sentirse frustrado porque no recordaba nada.
Actualmente,
solo se le permitía barrer el suelo.
¿Cómo
podré lograrlo a este ritmo...?
Muchos
elogiaban a Heeyoung por tener talento, pero él no lo comprendía del todo.
Quería
convertirse en el centro de Shaolin.
Aunque
era un pensamiento bastante ambicioso para su pequeño cuerpo.
Sweep,
sweep.
No
creo que pueda lograr nada en mi estado actual…
Heeyoung
continuó barriendo el suelo después de soltar un suspiro. Estaba frustrado por
dentro, pero se mantenía comprometido con su trabajo.
Le
habían enseñado que no solo su propio cuerpo debía estar limpio, sino también
el entorno que lo rodeaba.
Tap.
"¿Hmm?"
Algo
se atascó en el cepillo mientras barría el suelo.
Sintió
una sensación distinta entre el montón de hojas que se había amontonado.
Apartando
las hojas, Heeyoung pensó que quizás una pequeña roca se había quedado atascada
en el montón.
Para
su sorpresa, debajo de las hojas, descubrió un objeto misterioso.
"Esto
es…"
No
era una roca lo que había quedado atrapado en el cepillo de Heeyoung.
Era
un libro delgado.
Heeyoung
recogió cuidadosamente el libro y lo abrió para revisar de qué se trataba.
"…¿Huh?"
Los
ojos de Heeyoung se agrandaron al mirar el contenido del libro, luego miró a su
alrededor para ver si alguien lo había dejado accidentalmente.
Sin
embargo, no había nadie a la vista.
****************
Aproximadamente
30 minutos después de que Gu Yangcheon le dijera a Namgung Bi-ah que esperara,
justo cuando el calor que le había dado estaba a punto de desaparecer, Gu
Yangcheon regresó.
"…¿Por
qué estás así?"
Preguntó
Gu Yangcheon a Namgung Bi-ah.
Era
comprensible porque Namgung Bi-ah estaba sentada en el suelo, acurrucada.
No
había forma de que sus piernas dolieran solo por haber estado de pie 30
minutos.
"¿Dónde…
fuiste…?"
Namgung
Bi-ah se levantó lentamente y le preguntó a Gu Yangcheon al verlo regresar.
"Solo
surgió algo."
Habló
de manera casual, aunque se detectaba un leve cansancio en su tono.
Fueron
solo 30 minutos. Y dado el nivel marcial de Gu Yangcheon, no era fácil que se
cansara.
Esto
significaba que se había movido de manera imprudente, gastando gran parte de su
Qi, o que se había desplazado con cautela debido al uso excesivo de Qi.
Namgung
Bi-ah se preguntaba qué tenía que hacer Gu Yangcheon en Shaolin que justificara
tal actividad.
"…"
Sin
embargo, prefirió no decir nada.
En
su lugar, se acercó cuidadosamente a Gu Yangcheon y extendió su mano hacia su
cabello.
En
medio de su cabello negro, con un leve aura rojiza, recogió algo.
"Hoja…"
"Oh, debió engancharse en mi cabello
mientras regresaba."
Gu
Yangcheon rápidamente tomó la hoja de la mano de Namgung Bi-ah y la tiró a un lado.
Mientras
lo hacía, murmuró: ¿Cuándo se me pegó esto? Nadie más la vio, ¿verdad?
"Tengo
hambre. Vamos."
Dicho
esto, Gu Yangcheon tomó la mano de Namgung Bi-ah.
Dado
que probablemente los demás ya estaban en la casa de huéspedes, tenían una razón
para apresurarse.
Pull-
"¿Hmm?"
Al
intentar moverse rápidamente, Gu Yangcheon encontró a Namgung Bi-ah congelada
en su lugar, sin moverse, como una roca.
"¿Qué
pasa?"
"…Despacio."
"¿Qué?"
"…Vamos…
despacio."
Gu
Yangcheon frunció el ceño, desconcertado por el comportamiento inusual de
Namgung Bi-ah.
En
respuesta, Namgung Bi-ah envolvió delicadamente su brazo alrededor del de él.
"…Vamos
despacio… ya que estamos solo los dos…"
"…"
Gu
Yangcheon guardó silencio, sorprendido por las palabras cuidadosas y algo
tímidas de Namgung Bi-ah.
En
ese momento, Namgung Bi-ah notó un leve rubor en las orejas de Gu Yangcheon.
Después
de verlo, Namgung Bi-ah sonrió ligeramente.
Quería
caminar aún más despacio que eso, pero sabía que Gu Yangcheon, con su
personalidad, no lo permitiría.
Namgung
Bi-ah sabía que no era la única persona por la que él se preocupaba.
Pero,
aun así, quería ser un poco egoísta.
Después
de todo, sentía que este era un buen momento para hacerlo.
"¿Estás
bien?"
Cuando
Namgung Bi-ah lo miró a los ojos y le preguntó, Gu Yangcheon soltó un suspiro.
"…Tú,
¿Dónde aprendiste esto?"
Namgung
Bi-ah se detuvo un momento después de escuchar a Gu Yangcheon.
Luego
respondió con una voz baja.
"…Soyeol…"
Parecía
que al final no podía mentir.
Gu
Yangcheon sonrió ante su reacción.
"Sigues
aprendiendo cosas raras de ella. ¿Qué eres, una niña?"
"…"
"Vamos."
Después
de terminar su frase, comenzó a moverse.
Sin
embargo, Namgung Bi-ah notó que Gu Yangcheon no le dijo que no a su petición.
No
solo no soltó el brazo que ella abrazaba, sino que también su ritmo de caminata
era notablemente más lento de lo habitual.
Namgung
Bi-ah sintió algo dentro de ella cada vez que lo veía así.
Aunque
el calor que Gu Yangcheon le había dado ya debía haber desaparecido.
"Oh,
creo que nos iremos mañana. No tienes nada más que hacer aquí, ¿Verdad?"
Namgung
Bi-ah asintió ante las palabras de Gu Yangcheon.
Hanam
no despertaba ningún interés en ella.
Solo
había venido porque ese era el destino de Gu Yangcheon.
…Cheonjun…
De
repente, pensamientos sobre su hermano menor cruzaron la mente de Namgung
Bi-ah.
No
lo había visto desde el torneo, así que se preguntaba qué le había pasado.
Después
de su pelea contra Gu Yangcheon y ser trasladado a una sala médica, ella lo
había observado desde lejos.
Después
de todo, era su hermano menor.
Pero
rápidamente descartó esos pensamientos.
…Él
debería… estar bien.
Su
preocupación por su hermano terminó ahí.
Ya
que su mente estaba ocupada con pensamientos de una espada y el rostro de
cierta persona.
Y
esa persona habló.
"…¿Podemos
ir un poco más rápido? Tengo hambre."
"…"
"Está
bien, no me mires así…"
Como habló sin tacto, Namgung Bi-ah abrazó su brazo con más fuerza como castigo.
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