Capítulo 114: Espada Celestial Azul, Namgung Jin (2)

Espada Celestial Azul, Namgung Jin (2)

 

No sabrías por lo que tuve que pasar el día que desapareciste.

 

Probablemente nunca lo sabrías, ya que nunca te hablaría de ello.

 

¿Sabías? No me gusta la luna.

 

Que la luna esté en el cielo significa que la noche ha llegado...

 

Y detesto la noche.

 

Cada vez que la luna está en el cielo, me quedo quieto y miro hacia arriba.

 

Ahora tengo un poco de curiosidad, ¿Qué significaba la luna para ti para que ni siquiera pretendieras escucharme cuando te llamaba?

 

Siempre me pregunté con qué soñabas mientras mirabas la luna. A pesar de que ambos tuvimos una vida de mierda.

 

Pero a pesar de esta triste vida, siempre buscabas algo.

 

A diferencia de mí.

 

Es solo que... Las veces que te pregunté por qué amabas tanto la luna y cerrabas los ojos en respuesta quedaron en el pasado, y esa realización me entristece.

 

Solo un poco.

 

Un poco lo suficientemente pequeño como para no ser perceptible por fuera, así de pequeño.

 

¿Por qué hiciste eso?

 

Todavía me lo preguntaba. Después de la muerte, no verías tu amada luna, ni podrías blandir la espada que tanto amabas.

 

Ni siquiera obtendrías esa venganza que siempre deseaste.

 

A pesar de saber todo eso, ¿Por qué lo hiciste?

 

Probablemente no me darías la respuesta, incluso si nos volviéramos a encontrar. Ya podía saberlo con tu maldita personalidad.

 

Me preguntaste en tu último momento si la luna estaba en el cielo.

 

No lo estaba. Ya había bajado y desaparecido.

 

-Goteo.

 

Derramé vino sobre mi espada.

 

Este era el vino que solías beber de vez en cuando. Esto debería ser suficiente.

 

[Pero no voy a decir que lo lograré por ti.]

 

Nunca llegué a escuchar cuál era tu sueño, ni para qué vivías.

 

Así que no podré lograr las cosas que querías hacer.

 

Ni siquiera habrías hablado de ello aunque no hubieras muerto.

 

Porque sé que eso simplemente no es posible.

 

Bebí el resto del vino que quedaba en la botella y la dejé a un lado.

 

Este montón de pensamientos inútiles fue suficiente para mí.

 

Había cadáveres de artistas marciales de la Alianza Murim a mi alrededor. Todos parecían haber sido despedazados por las llamas.

 

Levanté la cabeza y miré hacia el cielo.

 

[La luna aún no ha salido.]

 

Una luna llena brillaba intensamente en el cielo...

 

Pero esa no era la luna que estaba buscando.

 

****************

 

Lo primero que se siente al alcanzar el Reino Pico no es otra cosa que una sensación de desarmonía con el propio cuerpo.

 

Era porque el Reino Pico era un punto donde uno experimenta el mayor cambio en su cuerpo.

 

El Reino Pico era un punto donde el cuerpo gradualmente se volvía uno con su Qi.

 

Para decirlo de manera simple, el Qi gradualmente permeaba en el cuerpo.

 

El agarre de uno sería poderoso incluso sin usar activamente el Qi, y la visión amplia se volvería natural a pesar de haber tenido que usar Qi para mejorar la visión antes.

 

Algunos llamarían a esto sobrehumano, y otros lo llamarían el punto de trascender más allá de lo humano.

 

Cualquiera que fuera el caso realmente no importaba. Hablando por experiencia, esto era solo el punto de partida del camino que necesitaba recorrer.

 

-¡Blaze-!

 

Las llamas con las que me cubría no eran demasiado vastas. Era porque las había condensado dentro de mi cuerpo.

 

Mirando la situación con mi visión ampliada y mejorada, podía ver todo claramente. Instintivamente sabía que el hombre que estaba viendo era más fuerte que yo.

 

¿Y qué?

 

Intentemos ser racionales aquí y pensar si lanzarse así es lo lógico.

 

Juzgando por cómo trató a Namgung Bi-ah a pesar de que era una descendiente directa del clan, significaba que él no estaba en una posición baja.

 

¿Tengo alguna excusa para atacarlo? ¿El hecho de que sea su prometido es realmente suficiente razón para atacarlo? ¿Mis acciones están realmente justificadas?

 

-Press.

 

La fuerza se concentró en mis pies. Incluso tratando de pensar racionalmente, mi cuerpo seguía moviéndose.

 

Si es una excusa lo que necesito...

 

Había sangre. Vi el enrojecimiento en su mejilla que estaba hinchada.

 

Eso fue suficiente excusa.

 

¿Qué era ella para mí para estar tan enojado?

 

No es el momento de pensar en eso.

 

-¡Slam!

 

El calor llenó inmediatamente mi dantian. Una tormenta que se asemejaba a mis emociones desatadas arrasó dentro de mi cuerpo, pero pude soportarlo.

 

Si tenía que buscar por qué estaba tan enojado, era bastante simple.

 

Pensé que ya no había lugar para las emociones dentro de mí. Después de mi regresión, sin embargo, experimenté muchas emociones, llenando mi corazón aún más. Si no había espacio antes, ahora esas emociones amenazaban con estallar.

 

Mi cuerpo, mejorado con Qi, llegó a mi objetivo antes que el viento.

 

El hombre me notó y comenzó a moverse después de que yo ya estaba detrás de él, pero yo fui más rápido.

 

Usé llamas para bloquear su visión, y lancé mi puño mejorado con Qi.

 

No tuve tiempo de pensar dónde debería apuntar. A pesar de que su postura estaba desordenada debido a que tuvo que moverse tan repentinamente, todavía tenía suficiente fuerza para soportar mi ataque.

 

-¡Slam!

 

Junto con mi puño, el Qi explotó y un sonido explosivo reverberó en toda el área. El calor permanecía en el aire, pero tuve que apretar los dientes.

 

No funcionó.

 

Estuvo a solo un centímetro.

 

Mi puño, que fue lanzado justo frente a su nariz, había sido bloqueado por la mano del hombre.

 

-¡Swoosh!

 

Junto con una ola de Qi que fue liberada por el hombre, mi calor fue empujado y dispersado. Mi mejilla se sentía hormigueante.

 

La ola de Qi tenía un poco de Qi de Rayo en ella.

 

"¿Quién eres?"

 

Habló en un tono serio. La mano que bloqueó mi puño había sido demasiado rápida. Habría sido incluso más rápido si hubiera sido una pelea adecuada.

 

Era fuerte. Era un artista marcial tan fuerte que ni siquiera podía decir cuál era su nivel.

 

Había una cosa de la que estaba seguro, sin embargo. Podía dar un golpe.

 

No sé de dónde vino esa creencia, pero sabía que podía hacerlo.

 

"¡Ha!"

 

Cuando hice circular el Qi en mi cuerpo nuevamente, el hombre soltó una risa, pensando que mi reacción era ridícula.

 

"Aún pareces estar de buen ánimo. Eso es encomiable, pero..."

 

La sensación de hormigueo que provenía del cuerpo del hombre tomó forma y comenzó a presionarme. Era una sensación familiar.

 

Era una sensación que había sentido innumerables veces de Namgung Bi-ah en mi vida pasada, y estaba en un nivel completamente diferente en comparación con la actual Namgung Bi-ah.

 

"Deberías entrenar mejor tus ojos y leer a tu oponente."

 

La mano del hombre comenzó a alcanzarme. Solo al mirar el denso Qi de Rayo en su interior, podía decir cuán poderoso era.

 

Cuando su mano llegó justo frente a mis ojos, el hombre de repente detuvo su movimiento.

 

"¿Qué estás haciendo?"

 

El hombre habló en un tono ligeramente irritado. No estaba hablando conmigo. Namgung Bi-ah, que estaba en el suelo antes, estaba reteniendo al hombre.

 

"Por favor... detente."

 

"¿Primero huyes, y ahora incluso me desobedeces?"

 

"..."

 

A pesar de que el hombre hablaba ferozmente, los brazos de Namgung Bi-ah, que lo envolvían por la cintura, solo se apretaron más.

 

El hombre chasqueó la lengua con insatisfacción.

 

Sus ojos, que estaban sobre Namgung Bi-ah, se dirigieron a mí.

 

"¿Cuál es tu nombre?"

 

El Qi del hombre seguía presionando mi cuerpo, pero aún era soportable.

 

Porque había sentido una presión mucho más densa y evolucionada que esta innumerables veces en mi vida pasada.

 

Lo miré a los ojos y respondí: "Soy Gu Yangcheon, Señor Namgung."

 

Los ojos del hombre se iluminaron al escuchar mi nombre.

 

"Ya veo, escuché que eras más fuerte que los chicos de tu edad. Así que eres el hijo del Señor del Clan Gu."

 

"Sí."

 

"Parece que sabías quién era, entonces ¿Por qué hiciste tal cosa?"

 

Su disposición era fría, lo cual era común para su clan, y sus ojos estaban llenos de arrogancia.

 

El Rey de la Espada de esta generación, el Señor del Clan Namgung...

 

Espada Celestial Azul, Namgung Jin.

 

Era el padre de Namgung Bi-ah.

 

No había nadie que no supiera quién era. No había nadie más que pudiera replicar este Qi y esos ojos suyos.

 

No sabía por qué Namgung Jin había venido hasta aquí cuando debería estar en el palacio de Anhui, pero no quería perder y bajar la cabeza ante su mirada arrogante.

 

"Acabas de intentar dañar al Señor del Clan Namgung. ¿Sabes lo grave que es ese delito?"

 

"¿Cómo podría quedarme quieto y no hacer nada cuando vi que abofeteaste a mi prometida?"

 

"¿Qué dijiste?"

 

"Solo me di cuenta de quién eras después de haberte atacado. Antes de eso, todo lo que vi fue a un intruso atacando a uno de nuestros invitados."

 

Recuperé las llamas que cubrían mi cuerpo y liberé el calor que había estado reteniendo. Una ola de calor se extendió instantáneamente en el aire.

 

El cabello de Namgung Jin se agitó debido a la onda.

 

Namgung Jin me miraba con el ceño fruncido.

 

"Qué sofístico de tu parte."

 

"Solo hice lo que debía hacer como miembro del Clan Gu."

 

Esto era, de hecho, sofistería, como dijo Namgung Jin. Pero no dije esas palabras porque pensara que convencerían al hombre frente a mí.

 

Tampoco podía maldecir al Señor del Clan Namgung, aunque se tratara de mí.

 

Por lo tanto, tenía que molestarlo de esta manera.

 

Namgung Jin también retiró su Qi. Los guardias que habían desenvainado sus espadas debido al ataque repentino guardaron sus armas después de que Namgung Jin les señalara con la mano.

 

Cuando la sensación de hormigueo desapareció, sentí que podía respirar más fácilmente.

 

Namgung Jin entonces me habló.

 

"Ya no tengo intención de seguir con tu sofistería. Le haré saber al Señor Gu sobre esto."

 

Namgung Jin no dijo mucho a pesar de haber sido atacado. Tenía una expresión molesta, pero no dijo nada.

 

¿Por qué?

 

Pensé que se enfadaría más.

 

¿Hay algo que lo esté deteniendo?

 

Si no lo hubiera, no me dejaría ir tan fácilmente.

 

Namgung Jin escondió su expresión molesta y pasó a un tema diferente. Era sobre Namgung Cheonjun, a quien había conocido hace algún tiempo.

 

"Escuché que le diste una lección a mi hijo. Pensé que había bajado la guardia ya que era un niño triste que confiaba demasiado en su talento, pero ahora que nos hemos conocido en persona, parece que estaba equivocado."

 

"¿Cómo podría llamarse una lección, Señor? No estoy al nivel de poder enseñarle algo al gran Dragón del Rayo, Señor Namgung. Una mejor manera de decirlo es que le di una paliza porque me estaba provocando."

 

-Crack.

 

Al escucharme hablar con un tono sarcástico, vi que se formaba una arruga entre las cejas del formidable hombre.

 

Dragón del Rayo, ¿eh?... En ese entonces estaba en un nivel patético y casi no poseía Qi, pero ahora sería diferente.

 

Por supuesto, Namgung Cheonjun también podría haberse vuelto más fuerte, pero ¿Realmente sería así?

 

Namgung Jin definitivamente sabía que mis palabras estaban cargadas de espinas.

 

"Puedo ver que tienes talento, pero te falta modestia. Esa parte realmente se parece a tu padre."

 

"Gracias, Señor. ¡Y, si me permite decirlo, también noté algunos de sus rasgos en su hijo!"

 

"¡Tú…!"

 

Finalmente estalló, y el rostro de Namgung Jin se puso rojo. No desenfundó su espada, pero su Qi de antes comenzó a cargarse de nuevo.

 

Sin embargo, nunca lo liberó. Tanto Namgung Jin como yo, así como todos en el área, sentimos la presencia que se acercaba por detrás.

 

"El Señor Gu…" dijo Namgung Jin después de arreglar su expresión. El hombre que se acercaba con pasos tranquilos era Gu Cheolun, mi padre.

 

Padre no miró a Namgung Jin, y solo echó un vistazo a Namgung Bi-ah. Luego, sus ojos se fijaron en mí. Tan pronto como su mirada se posó en mí, no pude evitar estremecerme.

 

Después de un corto suspiro, dijo: "Recuerdo que te dije que descansaras y vinieras a mi habitación esta noche, y aún así causas problemas tan temprano en la mañana."

 

"…"

 

Evité su mirada cuando lo escuché hablar en un tono tan serio. No estaba equivocado, de hecho, había causado problemas.

 

Padre entonces se acercó más al otro señor y lo saludó con respeto.

 

"Parece que mi hijo te ha causado problemas."

 

"Señor Gu."

 

"Todavía es un niño inmaduro. Por favor, calma tu ira, ya que lo regañaré adecuadamente más tarde."

 

"No importa lo inmaduro que sea, necesito llevar esto ante la ley-"

 

"También discúlpate con él, ahora mismo."

 

"Lo siento."

 

Bajé la cabeza y me disculpé como mi padre me dijo que lo hiciera. Debido a que mi padre lo interrumpió, y mi disculpa no le permitió continuar, Namgung Jin frunció el ceño aún más.

 

"Parece que no has cambiado en absoluto, Señor Gu."

 

"También me alegra que parezcas estar en buena salud, Señor Namgung."

 

"Tal padre, tal hijo… Sigh."

 

Parecía que su ira le llegaba hasta el cuello, pero no dijo más.

 

Por más que lo mirara, no parecía el tipo que retendría su ira, entonces ¿Por qué actuaba de esta manera? ¿Realmente tenía alguna debilidad o algo así?

 

"Espero que se tomen medidas correctivas por esto."

 

"Sí."

 

Padre entonces miró a Namgung Bi-ah. Vio su mejilla hinchada y la sangre en la comisura de su boca, pero su expresión no cambió.

 

Al notar a mi padre, Namgung Jin preguntó: "¿Vas a comentar sobre cómo disciplino a mi hija?"

 

"No tengo intención de hacerlo. Solo pensé que sería bueno curarla lo antes posible. Se avecinan grandes eventos."

 

"Me encargaré yo mismo de eso."

 

"Claro."

 

Padre entonces me miró nuevamente. Sus ojos parecían un poco extraños, aunque, no parecía correcto decir eso.

 

"Sígueme."

 

Contrario a su expresión, su voz era profunda y calmada. Aún así no me moví, y miré a Namgung Bi-ah.

 

Al ver mi preocupación, Padre dijo: "No te preocupes por esa niña. Estará mejor pronto, ya llamé a los médicos para que la atienda. Solo sígueme."

 

"Entendido."

 

¿Cuándo? Parecía que había venido aquí de inmediato, entonces, ¿Cuándo tuvo tiempo de llamar a los médicos?

 

¿O ya sabía que esto sucedería?

 

Para probar las palabras de mi padre, los médicos del Clan Gu ya estaban llegando. Escuché a Namgung Jin chasquear la lengua detrás de nosotros.

 

Viendo que la situación se resolvía, seguí a mi padre.

 

****************

 

Realmente es igual a su padre.

 

Ese era el pensamiento del Señor del Clan Namgung, Espada Celestial Azul Namgung Jin. No solo se parecían físicamente, sino que su irritante manera de hablar con los demás era idéntica.

 

Y luego estaba también su talento.

 

Al igual que el Fénix de la Espada, parece tener una inmensa suerte cuando se trata de sus hijos.

 

Namgung Jin pensó en Gu Yangcheon. Puede haber sido un ataque sorpresa, pero aún así no lo notó hasta que el joven ya estaba detrás de él, listo para golpearlo.

 

¿Es porque Gu Yangcheon era rápido? Puede que fuera rápido, pero no está en un reino donde pudiera atreverse a compararse con la velocidad del Clan Namgung.

 

Namgung Jin miró la mano que había bloqueado el puño de Gu Yangcheon.

 

Su mano estaba ligeramente roja. Además, aunque era leve, su mano temblaba. Su propio hijo, Namgung Cheonjun, ni siquiera podía tocar su ropa.

 

No sería posible a menos que el niño lo hubiera envenenado durante una comida.

 

¿Pero qué pasa con ese niño?

 

Estaba en manos de Namgung Jin, directamente bajo la presión de su Qi, pero este joven estaba decidido a luchar.

 

¿Era porque aún era joven y no sabía mucho del mundo, o era porque no sabía cuándo retroceder porque era igual a su padre?

 

A los ojos de Namgung Jin, ninguna de esas evaluaciones parecía ser cierta.

 

Los ojos de Gu Yangcheon le decían que él podía luchar.

 

¿Cómo se atreve un joven prodigio que es más joven que mi hijo siquiera a tener tal noción, un hijo del Clan Gu nada menos?

 

-Crack.

 

No se había enfadado demasiado por el hecho de que Gu Yangcheon hubiera golpeado a su hijo.

 

Su hijo era simplemente débil, simple y llanamente. Namgung Jin entendía ese principio mejor que nadie.

 

Pero la situación de ahora era diferente.

 

Normalmente, no habría dejado pasar esto apretando los dientes de esta manera. Podría haber convertido esto en algo mucho más grande si así lo hubiera intentado.

 

Si no fuera por el Clan Gu.

 

No lo habría hecho si no estuviera en esta tierra ominosa. Namgung Jin luego pensó en Gu Cheolun, con quien acababa de encontrarse.

 

Parecía que le estaba mostrando respeto, pero sus ojos no lo hacían. Siempre era así. Ya lo sabía en parte desde que se convirtió en el Señor de su clan y escuchó sobre el Clan Gu por su abuelo, pero experimentarlo de primera mano seguía sin parecerle correcto.

 

Esos ojos suyos que siempre parecían mirar a los demás con desdén. Namgung Jin entonces abrió la boca.

 

"Terminaré el castigo ahí."

 

"…"

 

Namgung Bi-ah bajó la cabeza después de escuchar las duras palabras de Namgung Jin.

 

"Originalmente te habría llevado de vuelta al clan y te habría castigado por ello, pero ahora no es un buen momento."

 

"Lo entiendo."

 

"Arréglenla después del tratamiento, háganla lo más hermosa posible."

 

Los sirvientes a su alrededor gritaron en acuerdo al escuchar la orden de su maestro.

 

No me gusta.

 

Las cejas fruncidas de Namgung Jin no tenían intención de volver a su estado normal.

 

Así de mucho lo disgustaba esto.

 

Hoy era el día en que se había programado el compromiso con el Clan Gu. Eso solo hacía que la situación le desagradara aún más.

 

El hecho de que el propio Señor del Clan Namgung tuviera que venir hasta el Clan Gu…

 

El hecho de que esta hija suya, realmente talentosa, dejara el clan para seguir a un niño del Clan Gu…

 

El hecho de que los ancianos y su abuelo fueran quienes tomaron la decisión de casar a su hija…

 

Y… el hecho de que el Dragón de esta generación sería, sin duda, este hijo del Clan Gu.

 

Quiero deshacerme de todo.

 

El último pensamiento especialmente lo enfureció, pero Namgung Jin reprimió esos pensamientos.

 

No podía permitírselo.

 

Al menos no ahora.

 

****************

 

La habitación del Señor a la que volví en solo un día. Era una habitación a la que siempre iba cada vez que causaba problemas, así que me sentía un poco nervioso.

 

[Intentaste golpear a un Señor de Clan, ¿Estás en tus cabales?]

 

Te quedaste callado y lo observaste como si fuera un gran entretenimiento antes, ¿Por qué me regañas ahora?

 

[Ya habías cargado contra él para cuando decidí detenerte.]

 

Eso era una mentira.

 

Hubo bastante tiempo en el que simplemente estuve parado allí, fluyendo mi Qi y tomando la decisión.

 

A lo largo de todo eso, el Anciano Shin no dijo ni una palabra.

 

Incluso podía decir que estaba entretenido por todo el asunto.

 

[Ahem.]

 

Ves, estás tosiendo falsamente, ¡Lo sabía!

 

[Aun así, ¿Por qué actuaste después de darte cuenta de contra quién estabas?]

 

Solo me di cuenta de que era el Señor del Clan Namgung después de haber visto su rostro, pero instintivamente sabía que era más fuerte que yo mucho antes de eso.

 

De hecho, fue imprudente de mi parte actuar de esta manera.

 

Padre estaba sentado quieto y tenía los ojos cerrados. Gracias a eso, no sabía qué tipo de castigo recibiría, así que estaba ansioso, pensando en cientos de cosas que podrían usarse para castigarme.

 

Algo similar había sucedido en mi vida pasada, y fui enviado al ejército de espadachines de Gu Huibi. Estuve sirviendo bajo el mando de Gu Huibi durante más de medio año, y solo pensar en eso me hacía sudar frío.

 

Preferiría hacer un entrenamiento cerrado durante medio año en lugar de tener que vivir nuevamente a pasar por eso.

 

Finalmente, Padre abrió los ojos y me miró. Tragué saliva, preguntándome qué me diría…

 

"Buen trabajo."

 

[¿Eh?]

 

"¿P-Perdón?"

 

No pude evitar fruncir el ceño, confundido por las palabras de mi padre.

 

Esperaba muchas cosas diferentes… pero esa no era una de ellas.

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