Capítulo 59: La Caída Del Dragón De La Flor De Ciruelo (2)

La Caída Del Dragón De La Flor De Ciruelo (2)

 

'Genio'.

 

Las personas que representaban esa métrica se habían vuelto bastante comunes a medida que entrábamos en la Generación de las Estrellas Fugaces.

 

La palabra en sí misma era autoexplicativo.

 

Un genio era un individuo mucho mejor y más talentoso que sus compañeros en todos los aspectos.

 

Eran las personas que podían simplemente agarrar una espada y romper rápidamente barrera tras barrera que se interponía en su camino hacia la excelencia marcial.

 

No había una generación en la que no existiera un genio.

 

Por ejemplo, los Tres Venerables eran los tres genios de su tiempo.

 

Los Siete Hierros y los Tres Puños eran los diez maestros del mundo que no se quedaban cortos de ser llamados genios ellos mismos.

 

No importaba cuán arduamente un genio intentara esconder su talento, éste siempre encontraba la manera de brillar.

 

Incluso si no querían ostentar su talento, el mundo inmediatamente reconocía su don solo con observar sus movimientos.

 

Esto era un hecho, inmutable sin importar cuánto tiempo pasara.

 

Y ahora, estaban los Cinco Dragones y Tres Fénix.

 

Estos jóvenes prodigios eran las estrellas de esta generación; todos ellos eran individuos dignos de ser aclamados como 'genios'.

 

Impecables desde el nacimiento.

 

Por supuesto, eso no significaba que no pusieran esfuerzo en mejorar.

 

Simplemente significaba que sus esfuerzos rendían mucho más que los de una persona promedio.

 

Podía ver claramente ese hecho en el Dragón de la Espada que estaba frente a mí, los rasgos de un genio.

 

Era el 'Espadachín de las Flores de Ciruelo' más joven y, al mismo tiempo, el mayor prodigio de la Secta del Monte Hua. No podía siquiera empezar a imaginar cuánto peso tenían esos dos títulos.

 

Solo las personas que eran naturalmente talentosas al extremo y que además habían alcanzado cierto nivel se encontraban calificadas para el título de Espadachín de las Flores de Ciruelo.

 

Eso era lo que significaba ser capaz de usar el Qi de ciruelo, y poder hacer florecer ciruelos con tu espada.

 

Eso era lo que significaba despertar el arte del Monte Hua.

 

Y Yung Pung, quien no tenía ni 20 años aún —y que seguía siendo un estudiante de tercera generación— ya había llegado a ese punto, lo que demostraba cuán monstruoso era su talento natural.

 

Y sin embargo, ese mismo Yung Pung,

 

-¡Pow!

 

Estaba siendo empujado hacia atrás por un chico mucho más joven que él.

 

"¡Ughhhh!"

 

Shinhyun simplemente no podía creer lo que estaba viendo con sus propios ojos.

 

El calor que emanaba el chico hacía que fuera difícil respirar, y observaba con ojos desorbitados cómo las flores de ciruelo de Yung Pung eran engullidas e incineradas por el fuego ardiente que el chico manifestaba.

 

Esto no era solo una cuestión de usar el Qi de manera eficiente y en la mejor forma posible, o de posicionar su cuerpo de cierta manera.

 

No, era simplemente una diferencia de poder absoluto.

 

...¿Cómo es que un niño tan pequeño es tan poderoso?

 

Gu Yangcheon del clan Gu.

 

No era alguien conocido en el mundo aún; ni siquiera tenía un título.

 

Shinhyun sabía sobre el Clan Gu.

 

Era el clan del maestro artista marcial, el Guerrero Tigre, y también era el hogar de la Fénix de la Espada, quien ostentaba el título de la mayor prodigio del mundo en esta generación.

 

Y también era el clan de su hermana marcial.

 

Así que Shinhyun ya sabía un poco sobre el clan.

 

No esperaba menos del chico, considerando que compartía la misma sangre que el Guerrero Tigre y la Fénix de la Espada.

 

Bueno, podría haber sido solo un chico que no cumplió con las expectativas de su padre, pero Shinhyun no había pensado de esa manera cuando vio por primera vez a Gu Yangcheon.

 

...Pero aún así, que sea tan fuerte es inesperado.

 

Las artes de fuego eran extremadamente difíciles de controlar.

 

Era una habilidad marcial tan destructiva que a menudo el propio usuario del arte no era capaz de soportar su poder explosivo.

 

Debido a lo salvaje que se volvía el Qi, también tomaba un gran pago en el cuerpo del usuario.

 

Y aunque el arte era más destructivo y poderoso en comparación con otras artes gracias a su explosividad, también era igualmente difícil de dominar y hacía que alcanzar rangos superiores en el arte fuera una tarea ardua, ya que lentamente destruía el cuerpo del artista marcial.

 

Pero, ¿Qué pasa con el chico frente a él?

 

El sudor frío corría por la barbilla de Shinhyun.

 

Ya era lo suficientemente impresionante que pudiera producir tanto Qi que presionara toda el área circundante, pero cuando uno consideraba el hecho de que había logrado no dañar nada mientras usaba un arte tan destructivo…

 

Eso solo significaba que tenía un control perfecto sobre sus Artes de la Llama.

 

Yung Pung hacía su mayor esfuerzo para evitar las llamas que lo envolvían, pero no era fácil para él porque Gu Yangcheon no le daba espacio para evadir su embestida.

 

Una de las cosas más importantes en un duelo era la distancia entre los dos luchadores.

 

Y aplicaba especialmente en esta pelea, ya que era una lucha donde un luchador empuñaba una espada mientras que el otro usaba sus puños.

 

Era un choque entre dos principios;

 

El usuario de puños buscaba reducir la distancia tanto como fuera posible,

 

Mientras que el espadachín buscaba ganar tanta distancia como fuera posible.

 

Y Gu Yangcheon nunca permitió que Yung Pung ganara esa distancia.

 

Sabía perfectamente cómo enfrentarse a un espadachín.

 

Yung Pung apretó los dientes y concentró el flujo de su Qi en sus pies y, de repente, se lanzó hacia adelante.

 

Él, quien había estado retrocediendo constantemente frente a Gu Yangcheon, ahora, en cambio, estaba cargando hacia él.

 

Incluso cuando se movía con urgencia, la espada de Yung Pung retenía su elegancia.

 

Sus golpes eran precisos y pesados, al mismo tiempo que rápidos y certeros.

 

La Secta del Monte Hua tenía movimientos muy complicados en sus artes de espada, por lo que se necesitaban al menos unos pocos años para aprender esos movimientos.

 

Pero Yung Pung había podido dominar esos movimientos no mucho después de verlos por primera vez.

 

Ese había sido el día en que todos reconocieron que Yung Pung era el mayor prodigio de la Secta del Monte Hua.

 

La punta de su espada era ligera y afilada y, con cada movimiento que Yung Pung hacía, una flor de ciruelo aparecía en el suelo que pisaba.

 

El Dominio de las Flores de Ciruelo.

 

Había cierto nivel que los artistas marciales del Monte Hua tenían que alcanzar para poder manifestar flores de ciruelo con cada movimiento que realizaban.

 

También era el estándar requerido para convertirse en un Espadachín de las Flores de Ciruelo, y era el símbolo de convertirse en un verdadero artista marcial de la Secta del Monte Hua.

 

Shinhyun asintió con la cabeza tras la aparición del dominio.

 

Podría haber parecido que estaba siendo empujado hacia atrás por las llamas de Gu Yangcheon, pero Yung Pung estaba encontrando su camino de regreso a la pelea y comenzaba a contraatacar.

 

Sus golpes de espada formaban muchas imágenes de flores de ciruelo.

 

Las flores de ciruelo ahora estaban presionando las llamas furiosas que una vez empujaban a Yung Pung.

 

La Técnica de Espada de las Veinticuatro Estocadas de la Flor de Ciruelo.

 

El arte de espada por excelencia de la Secta del Monte Hua estaba siendo bellamente desplegado a través de la mano de Yung Pung.

 

Sus movimientos eran elegantes, el Qi que sostenía su espada era afilado, y el florecimiento de las flores de ciruelo seguía a sus golpes de espada.

 

Como era de esperar.

 

Para ganar contra el Dragón de la Espada es—

 

"¡¡Uoughh!!"

 

¿¡Eh...!?

 

Los ojos de Shinhyun se abrieron de par en par.

 

Fue debido al grito que se escapó de la boca de Yung Pung.

 

De repente, pensó que vio el puño de Gu Yangcheon hundiéndose en las costillas de Yung Pung.

 

Shinhyun se esforzó más por mejorar su visión concentrando más de su Qi en sus ojos, pero las llamas bloqueaban su visión y le dificultaban ver claramente a través de ellas.

 

Esto, a su vez, significaba que Shinhyun, un estudiante de segunda generación de la Secta del Monte Hua, estaba luchando por ver a través de las llamas que había hecho un mero chico en su juventud.

 

...¿Qué tan denso tiene que ser su Qi para que sea así?

 

Al principio, pensó que las llamas estaban siendo presionadas por las flores de ciruelo en pleno florecimiento producidas por Yung Pung, pero Shinhyun se dio cuenta rápidamente de que su suposición había sido incorrecta.

 

No era que las llamas fueran presionadas por las flores de ciruelo en pleno florecimiento, sino que, en cambio, las llamas furiosas que se desataban por todas partes estaban siendo reducidas a propósito.

 

Las llamas definitivamente cubrían menos área ahora, pero el poder detrás de ellas se había vuelto mucho más denso que antes.

 

Las flores de ciruelo en pleno florecimiento comenzaban a quemarse lentamente.

 

Luego, de repente, algo voló desde la cúpula de llamas ardientes.

 

Era la espada de madera que Yung Pung había estado usando en esta pelea.

 

-¡Pow!

 

"¡Ugh!"

 

No mucho después, el mismo Yung Pung fue enviado volando fuera de las llamas, el sonido de una explosión acompañando su vuelo.

 

Después de rodar por el suelo y detenerse algún tiempo después, Yung Pung gimió en voz baja y luchó por mover su cuerpo.

 

-¡Woosh!

 

Las llamas que cubrían el área se encogieron lentamente hasta que lo que quedaba de ellas, ahora había rodeado la figura visible de Gu Yangcheon.

 

Como había estado en el calor durante tanto tiempo, se podía ver claramente cómo su cuerpo emanaba vapor.

 

Las flores que estaban a punto de florecer a su alrededor estaban siendo rápidamente engullidas e incineradas por las llamas destructivas.

 

Mostraba que la flor que acaba de florecer de un árbol era impotente cuando se enfrentaba al poder de las llamas.

 

Las flores de ciruelo de Yung Pung ni siquiera tuvieron la oportunidad de florecer mientras se quemaban lentamente hasta convertirse en cenizas.

 

Frente al Yung Pung que gimoteaba mientras miraba la figura ardiente de Gu Yangcheon, se podía ver una visible mezcla de innumerables emociones, que iban desde el miedo y la confusión hasta incluso la duda.

 

"Tsk."

 

El chasquido de una lengua rompió el silencio que había envuelto el entorno.

 

Yung Pung, quien estaba mirando a Gu Yangcheon con ojos temblorosos, no pudo soportarlo más y apartó la cabeza.

 

Shinhyun no sabía por qué Yung Pung estaba actuando de esa manera, por lo que no tuvo más remedio que dirigir su mirada hacia Gu Yangcheon para entender la razón detrás de las acciones de su hermano menor.

 

Y entonces, pudo comprender la razón por la que Yung Pung había evitado mirar a Gu Yangcheon.

 

En los ojos de Gu Yangcheon mientras miraba hacia abajo a Yung Pung,

 

Estaban presentes las emociones de absoluta decepción que eran visibles para todos.

 

****************

 

Había muchas cosas que uno podía enumerar cuando se trataba de las fortalezas de un individuo talentoso,

 

Pero, era inevitable que también tuvieran debilidades.

 

Incluso si eran talentosos, necesitarían algo más que solo talento o eventualmente se encontrarían con una barrera que no podrían superar en algún momento de sus vidas.

 

Y debido a que las barreras anteriores habían sido tan fáciles de superar para ellos, cuando se enfrentaban a una barrera real que no podían superar fácilmente como las demás, eventualmente optarían por simplemente rendirse.

 

Yung Pung era un genio; no había duda de ese hecho.

 

Estaba más seguro de ese hecho que nadie, ya que había visto las alturas que podía alcanzar en mi vida anterior.

 

Pero finalmente no pudo superar la barrera.

 

Cuando se trataba de talento natural, estaba al mismo nivel que Gu Huibi o quizás incluso la superaba en ese aspecto.

 

Y aún ahora, incluso en esta vida, eso seguía siendo así.

 

No cualquiera era capaz de convertirse en un Espadachín de las Flores de Ciruelo. Era un nivel, un estándar, que solo se podía alcanzar pasando por interminables entrenamientos y revelaciones.

 

Eso significaba que él era, al menos, un artista marcial de primer nivel.

 

Era un artista marcial de primer nivel antes de llegar a los 20 años.

 

Así que era comprensible por qué estaba tan seguro de sí mismo.

 

[Es más gracioso porque esto viene de ti.]

 

Yo era una excepción en este aspecto, ya que tuve la ayuda de milagros que también incluían la misteriosa regresión en sí misma.

 

No es que alguien más, incluyendo al Anciano Shin, supiera sobre eso.

 

De todos modos, los genios eran muy soberbios, y era un hecho inevitable.

 

Gu Jeolyub, Namgung Cheonjun e incluso Gu Huibi.

 

Todos ellos eran diferentes en comparación con los seres humanos promedio, eran mejores que ellos en más o menos todos los aspectos, y ese sentido de superioridad que recibían por ese hecho fácilmente los hacía orgullosos.

 

Pero esto también servía como uno de los mayores venenos para ellos.

 

Yung Pung, como persona, no era malo.

 

Era respetuoso y tenía algo de sentido común que estaba ausente en la mayoría de los genios.

 

Dejaba que sus emociones lo dominaran debido a su juventud, pero eso podría corregirse a medida que envejeciera.

 

Sin embargo, incluso ese Yung Pung estaba lleno de sí mismo debido a su talento.

 

Y por eso, eventualmente enfrentó un muro que no pudo superar... y finalmente decidió rendirse.

 

Eso fue lo que sucedió en mi vida anterior.

 

"¿Qué estás haciendo?"

 

A mi pregunta tajante, el hombro de Yung Pung tembló subconscientemente.

 

"¿Por qué no recoges tu espada de nuevo?"

 

Vi su espada de madera que yacía plana en el suelo.

 

Podía haber hecho florecer ciruelos con su espada,

 

Pero solo era un florecimiento hueco sin densidad en su interior.

 

Eso significaba que no hacía mucho que había aprendido el arte.

 

[...Qué monstruo.]

 

Probablemente esa fue la mayor razón por la que Yung Pung fue derrotado en este momento.

 

[Dices eso como si fuera fácil. ¿Crees que es posible usar una espada tan débil para atravesar una abertura y atacar?]

 

Ciertamente no era fácil, ya que requería que no tuviera nerviosismo ni miedo para que fuera posible en primer lugar.

 

Esto era más una cuestión de experiencia que de talento.

 

Experiencia que solo se podría obtener cuando se estaba en medio de un campo de batalla que requería que atravesaras muchos oponentes y ataques que incesantemente se te venían encima.

 

Lentamente caminé hacia Yung Pung.

 

Los ojos de Yung Pung todavía albergaban dudas sobre el resultado del duelo.

 

¿Por qué todos los genios mostraban esos mismos ojos cuando los vencía en un duelo?

 

"Insististe en que realmente querías un duelo, así que tenía altas expectativas... pero estoy decepcionado, Maestro Yung Pung."

 

...Altas expectativas mi trasero.

 

Sentí que iba a vomitar por mis mentiras absurdas.

 

La forma de superar el orgullo propio es en realidad bastante simple.

 

Si no podían superarlo ellos mismos, alguien más tendría que destruirlo por ellos.

 

Una vez que se dieran cuenta de que siempre habría alguien más que reinaría sobre su talento, naturalmente aprenderían la lección.

 

Por supuesto, durante el proceso, caerían en la desesperación, y tendrían que decidir si regodearse en ella, ignorarla, seguir viviendo con ese mismo sentido de orgullo... o apretar los dientes y levantarse de nuevo.

 

Hubiera preferido que Namgung Bi-ah peleara con él en lugar de mí.

 

Pero como se puso a hacer berrinche...

 

[Es cierto que no tenías que pelear con él tú mismo.]

 

¿Por qué dices esto ahora cuando querías que lo hiciera todo el tiempo?

 

[Tú fuiste quien se ofreció por la culpa que sientes hacia el Monte Hua. Todavía me pregunto por qué te sientes así.]

 

Me dijiste que no ibas a preguntar sobre eso, ¿verdad?

 

[...Realmente eres un pedazo de mierda en descomposición, ¿Sabes?]

 

Namgung Cheonjun era alguien que continuó viviendo con su arrogancia.

 

Pero Yung Pung seguramente era diferente.

 

Incluso si había crecido siendo llamado un genio toda su vida en el Monte Hua, aún no estaba muy mimado.

 

Yung Pung, que había estado en el suelo, luchó por ponerse de pie.

 

Recogió la espada de madera a su lado.

 

Entonces, el cojeante Yung Pung lentamente posicionó sus manos.

 

Era una señal de derrota.

 

"Perdí..."

 

A diferencia de los demás, no puso excusas por su derrota.

 

Simplemente admitió su derrota con una voz débil y lastimera.

 

Este chico realmente era tan limpio como una hoja.

 

Me pregunté si debía decir algo más, pero pensé que le costaría hablar más, así que le mostré el mismo gesto y me di la vuelta.

 

Esto es suficiente.

 

[Quizás es por tu apariencia, pero eso te queda bien.]

 

Te das cuenta de que estás hablando mierda, ¿Verdad, Anciano Shin?

 

[Por supuesto que sí, mocoso. ¿Pensaste que te estaba elogiando?]

 

. . .

 

No sabía cómo Yung Pung tomaría esto, pero me sentí bastante aliviado ya que había pasado un tiempo desde que había peleado con alguien.

 

Ellos limpiarían el desastre, así que solo iba a ir a dormir... o eso pensé.

 

Namgung Bi-ah bloqueó mi camino, y después de mirarme por un rato, habló en voz alta.

 

"Ahora hazlo conmigo."

 

...¿Hacer qué, lunática?

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