Capítulo 204: Montañas Nebulosas (2)

Montañas Nebulosas (2)

 

Solté un suspiro mientras miraba a Namgung Bi-ah, que estaba parada detrás de mí, evitando el contacto visual.

 

A pesar de saber el camino correcto, su insistencia en tomar una ruta diferente me había causado un dolor de cabeza.

 

Y para colmo, la ruta que ella sugería estaba en la dirección opuesta.

 

Si realmente hubiera escuchado a Namgung Bi-ah y la hubiera seguido, probablemente habría terminado en una montaña al azar, en medio de la nada.

 

"En serio, te dije que esto es un asunto urgente."

 

"…Lo siento."

 

"Si vas a seguir causando problemas, entonces regresa a casa y espera."

 

Señalé en dirección al Clan Gu, pero Namgung Bi-ah sacudió la cabeza.

 

"…No quiero."

 

Murmuró, con un raro ceño en su rostro.

 

Ante tal apariencia, solté un suspiro y hablé.

 

"Te lo dije. No serás de mucha ayuda incluso si vas."

 

Esas palabras pudieron haber sido frías, pero también eran necesarias.

 

"…"

 

Ante mis palabras, Namgung Bi-ah desenvainó su espada en silencio, como si estuviera a punto de luchar conmigo.

 

Sintiendo el Qi de Rayo pasando cerca de mi mejilla, bajé la cabeza.

 

¿Cómo había terminado en esta situación? Vaya broma.

 

Lo único que podía decir era…

 

…A la mierda conmigo.

 

Esto era simplemente mi karma.

 

****************

 

Incluso después de dos días corriendo por las Montañas Nebulosas bajo la fría lluvia de primavera, seguí adelante, confiando en mi conocimiento del camino.

 

¿Cuántas montañas más tengo que cruzar?

 

No las había contado, pero probablemente quedaban al menos cinco más.

 

Este lugar era demasiado vasto; realmente no debería ser tan absurdamente grande.

 

¿La canica… aún no está lista?

 

Eché un vistazo a la Canica de la Fascinación Celestial, pero su luz aún no se había recuperado completamente desde que lo usé ayer.

 

Si alguien se preguntaba por qué revisaba la luz de la canica, era porque había aprendido algunas cosas sobre ello después de investigar.

 

La Canica de la Fascinación Celestial solo podía usarse una vez al día, y una vez utilizado, duraba poco tiempo.

 

Su color determinaba si podía usarlo de nuevo o no.

 

Tenía que esperar hasta que brillara de nuevo en color naranja.

 

Después de verificar, guardé la canica y miré al cielo.

 

Hah, no será fácil acampar con toda esta lluvia.

 

Había salido con prisa y no había traído nada que me ayudara en mi viaje.

 

De hecho, ni siquiera había traído un Talismán Demoníaco, que señalaba si una Puerta de Demonios se había abierto cerca de mí.

 

Yo solo era responsable de cualquier peligro que pudiera surgir.

 

Ya había encontrado algunos demonios que intentaron emboscarme, pero no importaba, ya que solo eran Demonios de Grado Verde.

 

Bueno, incluso ellos eran difíciles de manejar para mí el año pasado.

 

La Puerta Verde era el grado más bajo entre todas las Puertas de Demonios.

 

Y a diferencia del año pasado, cuando tuve que usar mucha de mi fuerza para enfrentarlos, ahora estaba en un nivel en el que podía simplemente invocar llamas a mi alrededor y reducirlos a cenizas.

 

Claro, sería un poco más difícil si aparecieran demonios por encima del Grado Verde.

 

Pero los Demonios de Grado Azul casi nunca aparecían.

 

A partir de ese punto, básicamente se les consideraba un desastre natural.

 

Con mi nivel actual, probablemente podría encargarme de los Grados Azules por mi cuenta, pero…

 

Una Puerta Roja sigue estando más allá de mi nivel.

 

Bueno, aparte de la Verdadera Puerta de Demonios, no había aparecido una Puerta Roja en varios siglos, así que debería estar bien.

 

Incluso cuando apareció una Puerta Roja de Demonios en el futuro, solo sucedió después de que el Demonio Celestial apareció en el mundo.

 

Necesito aumentar mi velocidad.

 

Todavía me quedaba mucho camino por recorrer.

 

Y más que nada, el tiempo se agotaba.

 

Gu Huibi probablemente estaba sentada en la cárcel sin hacer nada hace un momento, pero algo podría haberle sucedido en las horas que no estuve vigilando.

 

Además, este era el Palacio Negro, así que tenía que estar aún más alerta.

 

Después de todo, esos bastardos estaban ciertamente relacionados con el Culto Demoníaco.

 

No tenía tiempo que perder.

 

Mientras mis pensamientos corrían, desperté mi Qi Interno y aumenté mi velocidad.

 

Salté por el aire, moviéndome mucho más rápido que antes.

 

[¿Te queda suficiente Qi?]

 

Preguntó el Anciano Shin.

 

Todavía estoy bien, al menos por ahora.

 

Había absorbido tantas cosas que probablemente no había ningún artista marcial en el mismo reino que tuviera más Qi que yo.

 

De hecho, probablemente había muy pocos incluso en reinos superiores al mío.

 

[Aun así, deberías dejar algo de reserva por si surge una emergencia.]

 

No te preocupes, ¿Crees que no lo sé?

 

[¡Oh! ¿Es por eso que vacías tu dantian cada vez que te metes en una pelea?]

 

 

[Terminarás muerto si sigues haciendo eso.]

 

Ya lo sabía, pero también sabía que si abría la boca, me regañaría diciendo que era un idiota por hacer tal cosa aun sabiendo.

 

Así que me quedé callado.

 

…Espero que nos encontremos con algún pueblo.

 

[Mira cómo cambias el tema… tsk tsk.]

 

No se equivocaba, pero también era cierto que necesitaba un pueblo.

 

No podía permitirme seguir cazando bestias o demonios para llenar mi estómago.

 

Aunque mi cuerpo había alcanzado el Reino Pico y, por lo tanto, podía pasar algunos días sin comer, seguía siendo mejor comer algo.

 

Y más que nada…

 

Necesito conseguir un Talismán Demoníaco.

 

El Talismán, creado por la Secta Wudang, señalaba si una Puerta de Demonios estaba a punto de abrirse.

 

Era un objeto esencial para llevar en cualquier viaje hoy en día, ya sea largo o corto.

 

No solo permitía al usuario prepararse para la puerta, sino que también le permitía escapar del peligro.

 

Por lo tanto, era un objeto esencial para cualquiera que viajara.

 

Aunque, esa no es la razón por la que lo necesito.

 

En realidad, quería encontrar algunas Puertas de Demonios.

 

Debo absorber más.

 

Necesitaba acumular aún más Qi Demoníaco.

 

En el pasado, intenté rechazarlo y evitarlo porque era el poder del Demonio Celestial, pero ahora, no estaba en posición de hacerlo.

 

Lo necesitaba para calmar las diferentes energías que colisionaban dentro de mi cuerpo. Y dado que había decidido no rechazar más el Qi Demoníaco, la cantidad que tenía era demasiado poca para usar mi fuerza adecuadamente.

 

[Sólo ten cuidado de no romper el recipiente que es tu cuerpo.]

 

Sí.

 

Aunque el Anciano Shin me enseñó cómo comprimir mi Qi y usarlo de manera efectiva, mis artes marciales aún consumían una cantidad inmensa de Qi.

 

Por lo tanto, sin el uso de la Absorción Demoníaca, no podía prepararme para las calamidades que pronto vendrían.

 

Además, ni siquiera era capaz de enfrentar al Palacio Negro tal como estaba ahora.

 

No creo que mi fuerza aumente mucho solo por absorber algunos demonios.

 

Había absorbido tanta energía hasta ahora que absorber una Piedra Demoníaca de un Demonio de Grado Verde apenas cambiaría algo.

 

Aun así, era mejor que nada.

 

Incluso después de correr bajo la lluvia durante mucho tiempo, todavía no había encontrado un pueblo.

 

Había innumerables montañas, y pocas personas se aventuraban por aquí.

 

Numerosos demonios deambulaban libremente también, lo que dificultaba la vida de las personas.

 

Al final, parecía que no podría encontrar nada.

 

Necesito aumentar mi fuerza, aunque sea un poco.

 

Tsk.

 

Parecía que tendría que cazar y comer algunos demonios.

 

A pesar de mi expresión amarga, honestamente no me importaba mucho.

 

Al menos tengo esa opción. En mi vida pasada, fue mucho peor.

 

Sabía lo bendecido que era encontrarme con un demonio comestible en mi vida pasada.

 

Así que algo como esto no me afectaba en absoluto.

 

Después de correr mucho más tiempo, finalmente crucé una montaña.

 

Incluso después de cruzar toda una montaña, la lluvia seguía cayendo.

 

La única diferencia era que el sol se había puesto, y la noche había llegado.

 

Sin embargo, continué, usando una inmensa cantidad de Qi.

 

Después de saltar sobre un árbol, aterricé en el suelo y tomé un respiro.

 

Uff…

 

Todavía me quedaba una buena cantidad de Qi y fuerza, pero me encontré con un problema diferente.

 

¿Quién es?

 

Sentí la presencia de que me habían seguido desde que cayó el sol.

 

Era apenas perceptible cuando no tenía mis sentidos agudizados, pero después de afilarlos y ampliarlos, pude sentirla claramente.

 

Alguien venía hacia mí.

 

Y lo hacía a gran velocidad.

 

No es… un demonio.

 

No tendría movimientos tan flexibles si fuera un demonio.

 

Los demonios no eran diferentes a las bestias.

 

Entonces, ¿Quién es?

 

Si no era un demonio, entonces tenía que ser una persona.

 

Aún estaban lejos, así que era difícil para mí saber quién era.

 

¿Quizás es uno de los tipos del Palacio Negro?

 

Si no, tal vez eran los que me emboscaron.

 

El Primer Anciano podría haber muerto, pero aún era posible que el plan no hubiera terminado.

 

Squeeze.

 

Gradualmente, desperté mi Qi de Combate.

 

Aunque existía la opción de perderlo alejándome aún más, decidí que era mejor deshacerme de él lo antes posible.

 

Comprimí mi Qi Interno en mi puño, con la intención de atacar cuando la presencia se acercara lo suficiente para que pudiera descubrir quién era.

 

Justo cuando la figura misteriosa estaba a punto de entrar en mi territorio, el bastardo aceleró repentinamente a una velocidad rápida.

 

¡¿Que…?!

 

Su velocidad se duplicó en un instante; era como si supiera dónde estaba.

 

Estaba en un nivel más alto del que había esperado.

 

Inmediatamente adopté mi postura de combate.

 

No solo oculto su presencia para que no pudiera descubrir quién era, sino que el que venía hacia mí a tal velocidad, definitivamente era un artista marcial del Reino Pico.

 

No podía permitirme bajar la guardia.

 

¡Blaze-!

 

El calor se formó bajo la lluvia.

 

Mi cabello se volvió rojo, y adopté una postura en la que podía invocar llamas en cualquier momento.

 

A pesar de sus movimientos flexibles, su trayectoria era prácticamente una línea recta.

 

Ni siquiera se molesto en ocultar su presencia, y cargo descaradamente hacia mi dirección.

 

Sin embargo, no pude ni pensar antes de que ya hubiera llegado al frente a mí, haciendo que disparara mis llamas hacia la presencia por instinto.

 

Zap.

 

"…?"

 

Es decir, si no fuera por un familiar Qi de Rayo pasando cerca de mis ojos.

 

Step.

 

Contrario a su velocidad, su aterrizaje fue suave.

 

Con ojos sorprendidos, miré a la figura que había aparecido frente a mí.

 

Quizás porque había sido empapada por la lluvia, su ropa se pegaba a su cuerpo, mostrando su figura.

 

Su cabello blanco azulado mojado, quizás brillando más debido a la lluvia, de alguna manera era atractivo.

 

Poco después, sus ojos azul gema se encontraron con los míos.

 

"…Tú."

 

"Hola."

 

Namgung Bi-ah, quien estaba frente a mí, debería estar en el Clan Gu en este momento.

 

La miré incrédulo.

 

No era porque me sorprendiera su apariencia.

 

Aunque, por supuesto, eso también era impactante.

 

Pero había algo mucho más importante.

 

"¿Superaste tu muro?"

 

El Qi que sentí de Namgung Bi-ah era definitivamente el de una artista marcial del Reino Pico.

 

Además, parecía que no hacía mucho que había resquebrajado su muro, ya que un poco de su Qi se filtraba desde su dantian medio.

 

Esto era característico de un artista marcial que acababa de superar su muro.

 

"Sí."

 

Namgung Bi-ah asintió a mis palabras.

 

"…Lo hice."

 

Respondió con una cara inexpresiva, pero algo así era imposible.

 

¿Cómo había logrado hacerlo?

 

Pensé que seguro sería Yung Pung o Muyeon primero.

 

Bueno, había pasado bastante tiempo desde que vi a Yung Pung, el mayor prodigio del Monte Hua y el Dragón de la Espada, así que no conocía su estado actual.

 

Pero esperaba que al menos Muyeon superara su muro antes que Namgung Bi-ah.

 

Muyeon estaba al borde de superar su muro; de hecho, extremadamente cerca, por lo que obviamente esperaba que lo hiciera primero.

 

"…¿Qué pasó? ¿Cómo superaste tu muro tan repentinamente?"

 

Namgung Bi-ah no había estado tan cerca del muro como Muyeon.

 

Definitivamente se estaba acercando gracias a la iluminación que había obtenido, pero al menos esperaba que le tomara un año superar su muro…

 

¿Pero lo superó de repente?

 

¿Había recibido otra iluminación?

 

Porque no creo que le hayan dado Qi adicional.

 

Namgung Bi-ah inclinó la cabeza ante mi pregunta.

 

"Simplemente… pasó."

 

"…"

 

Solo escuchar su respuesta me dio dolor de cabeza.

 

Si fuera tan fácil, otros no lucharían tanto, tonta.

 

Respondí ocultando mis pensamientos.

 

"…Ya veo, felicidades."

 

"Eung."

 

Reconociendo su inmenso talento una vez más, la felicité.

 

Y después de lidiar con ese asunto, tenía que enfrentarme a otro.

 

"¿Cómo llegaste aquí?"

 

"…"

 

Namgung Bi-ah se quedó en silencio. Para ese momento, sentí que sabía cuál era su expresión actual.

 

Está enojada.

 

Sus ojos se habían entrecerrado un poco, podía sentir una emoción seria emanando de su mirada.

 

"…¿Viniste buscándome?"

 

Ella asintió.

 

Por supuesto que lo hizo, ya que no había otra razón para que estuviera aquí.

 

Pero, ¿Cómo?

 

"¿Cómo supiste dónde estaba?"

 

"Simplemente lo supe."

 

Fue una respuesta absurda.

 

No solo estaba el factor de la distancia, sino que tampoco había forma de que hubiera conocido la dirección correcta con su extraordinario sentido de la orientación.

 

Revisé mi cuerpo, por si acaso había escondido algo en mí como lo hizo Gu Huibi, pero no encontré nada.

 

Pero de repente…

 

Zap.

 

Sentí una sensación de Qi, lo que me hizo mirar hacia Namgung Bi-ah.

 

Qi de Rayo cubría su espada.

 

No era el Qi de Rayo translúcido que había visto antes; era un Qi de Rayo perfeccionado, claramente visible.

 

Era otra pieza de evidencia que confirmaba que había alcanzado un nuevo reino.

 

Dejando salir el denso y único aura del Clan Namgung, Namgung Bi-ah me habló.

 

"Llévame contigo."

 

¿Por qué había venido solo…?

 

¿Y por qué la había dejado…?

 

Dejando de lado la razón detrás de esas preguntas, lo único que hizo fue pedirme que la llevara conmigo.

 

No, esto no era una petición, sino más bien una orden de su parte.

 

Mientras pasaba por ese estado confuso, le pregunté.

 

"…¿Sabes siquiera a dónde voy ahora?"

 

"No… y honestamente… no me importa."

 

"¿Cómo que no te importa? Es peligroso, deberías-"

 

Thud-

 

Antes de que pudiera terminar, Namgung Bi-ah despertó su Qi, como si estuviera lista para luchar conmigo.

 

"Llévame contigo."

 

Sus palabras fueron las mismas de antes, pero esta vez, su espada me estaba apuntando.

 

"Si no lo haces, no te dejaré ir."

 

Podía ver lo seria que estaba. Si no la llevaba conmigo ahora, podría de verdad blandir su espada.

 

El Qi de Rayo que había alcanzado el Reino Pico dominaba gradualmente el bosque.

 

Namgung Bi-ah, aparentemente, no tenía ninguna intención de moverse ni un centímetro.

 

Además, no me quedaba tiempo de sobra, así que tuve que tomar una decisión de inmediato.

 

****************

 

Y así fue como llegamos a esta situación.

 

Mientras miraba a Namgung Bi-ah parada detrás de mí, distraída, me arrepentía de mi decisión en ese momento.

 

Sigh. Debería haberla sobrepasado y dejado atrás.

 

Namgung Bi-ah, que había alcanzado un nivel superior, definitivamente sería alguien que me causaría problemas, pero no estaba en un nivel en el que no pudiera superarla si luchaba en serio.

 

Solo me tomaría algo de tiempo.

 

Pero incluso si lo hubiera hecho, no podía simplemente dejarla en medio de un bosque por la noche.

 

Y aun así, solo volvería a perseguirme. Así que, al final, no tuve más remedio que escucharla.

 

"…No puedo ver… nada."

 

Ajena a mis pensamientos, Namgung Bi-ah solo parecía fascinada por toda la niebla que nos rodeaba.

 

A pesar de haber alcanzado el Reino Pico, su personalidad no parecía haber cambiado en absoluto.

 

"No te alejes. Podríamos no encontrarnos de nuevo."

 

Este era un área peligrosa.

 

La Alianza prohibía la entrada ya que, de hecho, personas se habían perdido y desaparecido aquí.

 

La niebla que rodeaba el lugar no era normal.

 

Por lo tanto, no era posible explorar el área mejorando los sentidos.

 

Ante mi advertencia, Namgung Bi-ah se detuvo por un momento…

 

Sniff sniff.

 

Luego, comenzó a olfatear por todas partes.

 

"…¿Qué estás haciendo?"

 

Después de repetirlo unas cuantas veces, asintió.

 

¿Qué le pasa?

 

"…No te perderé."

 

"¿Cómo puedes estar tan segura?"

 

"Por tu olor."

 

Sacudí la cabeza ante su respuesta.

 

¿Se creía un perro o algo así? Encontrarme por mi olor…

 

Volviendo un poco atrás, tomé el brazo de Namgung Bi-ah.

 

Después de todo, no podía permitirme perderla ni por un segundo.

 

Namgung Bi-ah, con su impecable sentido de la orientación, de ninguna manera sería capaz de encontrarme en esta niebla.

 

Sigh. Mis prioridades están equivocadas, esto no es en lo que debería estar prestando atención.

 

La incertidumbre llenaba mi mente.

 

Había llegado hasta aquí, pero dudaba si sería capaz de encontrar el Palacio Negro con toda esta niebla.

 

Hmm. Aunque la niebla proporciona protección, dudo que no hayan tomado otras medidas y simplemente hayan dejado su palacio visible.

 

Era muy probable que hubieran lanzado algunas formaciones adicionales, así que no sería fácil encontrarlo.

 

"¿Qué debería hacer…?"

 

Si la Canica de la Fascinación Celestial me estaba mostrando la ubicación correcta, entonces definitivamente estaba en algún lugar de esta montaña.

 

Sin embargo, aunque la montaña no era tan grande, era difícil buscar algo en esta cortina de niebla.

 

Si tan solo pudiera deshacerme de esto…

 

Con el ceño fruncido, miré a mi alrededor durante mucho tiempo, mi mano sosteniendo el brazo de Namgung Bi-ah.

 

Ring-

 

De repente, sentí una vibración en mi cintura.

 

Provenía del bolsillo del amuleto que contenía la Canica de la Fascinación Celestial.

 

Saqué la canica, esperando que estuviera lista para usarse.

 

"…!"

 

Pero la canica de repente brilló intensamente en mi mano y disparó un rayo de luz hacia una cierta dirección, apuntando hacia algún lugar a través de la niebla.

 

Mientras miraba la luz naranja, me puse a pensar.

 

"¿Esto es…?"

 

¿Quizás me estaba señalando la ubicación de Gu Huibi?

 

Antes de que pudiera siquiera terminar de pensar la pregunta…

 

Mis pies ya estaban siguiendo la luz.


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