Entrenamiento Práctico (4)
Después
del entrenamiento matutino, los estudiantes se reunieron en el pasillo que
conducía a sus habitaciones.
Todos
miraban hacia arriba mientras hablaban entre ellos.
Su
atención estaba dirigida al enorme tablero de madera colgado en lo alto.
En
ese tablero estaban listados los nombres de todos los estudiantes por una sola
razón.
Mostraba
sus calificaciones de entrenamiento y desempeño de los últimos dos meses.
–Hermano
Chu, ¿Te fue bien?
–Estoy
perdido… Mi nombre está más cerca del fondo que de la cima. Mi padre me va a golpear.
–A
mí también… Probablemente me echen de la casa cuando regrese.
Una
mezcla de alegría y desesperación llenaba el ambiente entre los estudiantes.
Algunos
se hundieron en la desesperación, mientras otros suspiraron aliviados al ver
sus nombres cerca de la parte superior.
Aunque
enfrentarían esto de nuevo en el futuro, era la primera vez que experimentaban
tanta presión.
Después
de todo, seguían siendo Jóvenes Prodigios con poca experiencia en las Llanuras
Centrales.
Para
aquellos provenientes de sectas o clanes prestigiosos, probablemente era la
primera vez que eran clasificados.
Esto
podría servirles como un llamado de atención a la realidad.
Habían
sido elegidos por su talento, pero siempre habían genios más grandes que ellos.
Step.
El
pasillo se quedó en silencio al sonido de un solo paso.
–¡Oigan,
oigan!
Todos
los estudiantes desviaron rápidamente la mirada del tablero.
Todas
las miradas se dirigieron hacia la figura que se acercaba.
Step.
Con
cada paso que daba, la multitud de estudiantes se apartaba instintivamente,
abriéndole camino.
"Gracias."
El
joven sonrió cálidamente, agradeciendo a la multitud.
"…¡La
Espada Meteoro!"
El
hombre que cortaba a través de la multitud era una figura bien conocida en la Academia
del Dragón Celestial.
No
solo era increíblemente apuesto, sino también excepcionalmente talentoso.
No
era otro que Jang Seonyeon, la Espada Meteoro, e hijo del actual Líder de la
Alianza Murim.
En
solo dos meses, la mayoría de los artistas marciales especializados en espada
se habían acercado a él.
Esto
era un testimonio del respeto que sentían por su talento y carácter.
Un
estudiante, probablemente un espadachín, se dirigió con cautela a la Espada
Meteoro.
"F-Felicidades,
Maestro Jang."
Jang
Seonyeon miró al estudiante, cuya voz temblaba de nerviosismo.
El
estudiante retrocedió ligeramente, pero Jang Seonyeon le sonrió amablemente,
reconociéndolo.
"Gracias."
Ante
eso, todos lo miraron con admiración.
Todos
felicitaron a Jang Seonyeon, cuyo nombre estaba en la parte superior del
tablero, marcado con el número "dos".
Esto
indicaba que había obtenido el segundo lugar entre cientos de estudiantes, un
logro impresionante.
Se
rumoraba que destacaba tanto en las clases teóricas como en el entrenamiento
práctico, y nadie cuestionaba sus logros.
Casi
todos estaban de acuerdo en que la Espada Meteoro merecía más que su alta
clasificación.
Esto
también reflejaba lo buena que era la imagen de Jang Seonyeon.
Era
sabido que este año la Academia estaba llena de monstruos, algo que no solo los
estudiantes, sino todos en las Llanuras Centrales, sabían.
Entre
ellos estaban descendientes de los Cuatro Clanes Nobles, así como herederos de
sectas y clanes apenas por debajo de ellos.
Obtener
el segundo lugar en un campo de prodigios, incluidos los Seis Dragones y las
Tres Fénix, era un logro notable, y merecía los elogios.
Crack.
Sin
embargo, Jang Seonyeon apretó los dientes mientras las felicitaciones llovían
desde todos lados.
Luchaba
por suprimir la ira que crecía dentro de él.
…Me
siento enfermo.
Las
voces de los estudiantes no eran más que ruido en sus oídos.
Su
frustración amenazaba con hacerlo enfermar físicamente.
Solo
quiero que todos se callen.
A
pesar de sus pensamientos, Jang Seonyeon no dejó que su expresión lo delatara.
No
podía permitir que esta pequeña molestia deshiciera todo lo que había logrado.
Bloqueando
el ruido, Jang Seonyeon comenzó a escanear los nombres en el tablero.
Apenas
reconoció alguno de los nombres listados en la parte inferior.
Después
de todo, no perdía su tiempo recordando los nombres de quienes consideraba
inferiores.
…El
Dragón del Agua y el Dragón de la Espada clasificaron bajo.
Notó
que dos de los Dragones y una de las Fénix habían obtenido una clasificación
sorprendentemente baja.
Se
decía que el Dragón del Agua se saltaba las clases para echar siestas, mientras
que el Dragón de la Espada tenía problemas en las materias académicas.
Esas
razones explicaban sus malas clasificaciones.
Era
evidente que no les importaban particularmente sus posiciones en la Academia
del Dragón Celestial.
Con
ese pensamiento, Jang Seonyeon chasqueó la lengua con molestia.
Me
siento un poco mejor ahora.
Genios
sin ambición.
Le
alegraba un poco.
Sin
embargo, no podía aprobarlo del todo—parecía que vivían sus vidas
despreocupadamente.
No
lograba explicar del todo su emoción.
Pero
es mejor así.
Esa
fue su conclusión.
Sí,
era mejor así.
Si
se hubieran tomado las cosas en serio y se hubieran convertido en sus rivales,
solo le habrían causado más problemas.
Jang
Seonyeon mantuvo los ojos en el tablero, su rostro aún llevando la máscara de
una sonrisa.
La
Fénix del Veneno… como esperaba.
Como
esperaba, la más débil de las Fénix, la Fénix del Veneno, no había logrado un
puesto alto.
Había
oído que pasaba tiempo con la hija del Clan Peng, pero no le preocupaba.
La
Fénix del Veneno era demasiado débil para que Jang Seonyeon perdiera el tiempo
pensando en ella.
Por
esa razón, no le interesaba en absoluto.
La
Fénix de Nieve…
La
Fénix de Nieve, con una destreza marcial similar a la de la Fénix del Veneno,
clasificó más alto de lo que Jang Seonyeon había anticipado.
Había
destacado en las clases teóricas, obteniendo uno de los puntajes más altos en
esa categoría.
Impresionante.
Sabía
que la Fénix de Nieve era más talentosa en otros campos que en artes marciales,
pero no esperaba que lograra un puesto tan alto.
Por
supuesto, ninguno de ellos había obtenido el primer lugar.
A
medida que se acercaba a la cima del tablero, comenzó a ver nombres familiares.
Uno
de ellos,
La
Bailarina de la Espada, fue inesperado.
Era
Namgung Bi-ah.
…Ugh.
Jang
Seonyeon luchó por suprimir la ira al ver su nombre.
El
recuerdo de su encuentro durante el examen de ingreso aún le dolía.
Todavía
no estaba contento con su derrota.
Recordó
la abrumadora presencia que ella exudía, manejando sin esfuerzo un intenso Qi
de Rayo con su mano.
No
esperaba que le fuera bien en las clases teóricas.
Había
obtenido un puntaje más bajo en clases teóricas comparado con la Fénix de Nieve
o él mismo, pero parecía que su fuerza marcial salvó su puntuación.
No
le agradaba en absoluto.
Ya
fuera por el hecho de que había perdido contra alguien a quien había derrotado
antes,
–Eres
aburrido.
O
las palabras que ella le había dicho, nada de eso le agradaba.
Sacudió
la cabeza, desechando esos pensamientos.
…¿Qué
hay de ella?
Luego
empezó a buscar el nombre que más deseaba ver.
Era
el nombre que más le importaba.
Ya
sabía dónde estaría, así que no tuvo que buscar mucho.
Tercera.
Wi Seol-Ah.
Su
nombre estaba directamente debajo del suyo.
Parece
que trabajó duro.
Era
una tonta sin intelecto antes, pero Wi Seol-Ah trabajó en sus defectos y obtuvo
una buena puntuación en las clases teóricas también.
Después
de todo… Es la descendiente del Emperador de la Espada.
Su
talento en artes marciales era monstruoso, y nunca olvidaba nada de lo que
aprendía.
Su
belleza también era increíble.
Los
pensamientos de Jang Seonyeon siguieron girando.
Así
que la haré mía.
Se
juró a sí mismo que no dejaría que Wi Seol-Ah se le escapara.
Recordó
la promesa que había hecho con ella.
Si
obtenía el primer lugar al final, ella sería suya.
Por
esa razón, no tenía intención de permitir que lo superara, sin importar el
costo.
…Aunque
hay un problema.
Crack.
A
pesar de lo bien que parecían ir las cosas, Jang Seonyeon apretó el puño al ver
el problema que tenía delante.
Era
el mismo problema que lo había estado carcomiendo, el que había perseguido su
mente durante años.
Jang
Seonyeon alzó la vista y miró el nombre que estaba escrito sobre el suyo.
"…Ha."
Luchó
por contener sus emociones al mirar ese nombre.
¿Por
qué? ¿Cómo podía estar el nombre de ese bastardo en la lista?
Tan
solo el verlo hizo que enviara una ola de oscuridad a través de sus emociones.
–El
primer lugar esta vez probablemente será…
–Probablemente
la Espada Meteoro…
–¿Y
qué hay del entrenamiento práctico…?
Cállense.
Las
voces a su alrededor parecían volverse más fuertes, como si estuvieran
decididas a hacerlo sentir peor.
Quería
arrancarles la boca a todos.
¿Eso
no los haría quedarse callados?
No
puedo hacer eso, aunque quisiera…
Sin
embargo, no podía permitirse hacer algo así.
Tenía
que proteger la imagen que había construido cuidadosamente y resistir, solo un
poco más, por el bien de su futuro.
Mientras
Jang Seonyeon ajustaba secretamente su expresión con ese pensamiento,
"¿Qué
es todo este alboroto?"
Una
voz afilada cortó entre la multitud.
Step.
A
diferencia de los pasos tranquilos y medidos de Jang Seonyeon, esos pasos eran
toscos, cargados de la irritación de alguien arrastrado allí contra su
voluntad.
"…¡Eek!"
Un
estudiante retrocedió en shock al verlo.
Su
reacción fue un claro contraste con la que tuvo al ver a Jang Seonyeon
anteriormente.
Ante
esa reacción, la persona que acababa de llegar frunció el ceño.
"¿Qué
le pasa a ese bastardo? Woocheol, ¿Está pasando algo hoy?"
"Escuché
que se estaba anunciando algo, ¿No será esa la razón por la que todos están
reunidos aquí?"
"¿Anunciando
algo?"
Un
hombre de constitución imponente explicó al joven más bajo frente a él.
Pe
Woocheol.
Incluso
Jang Seonyeon lo recordaba.
Luego,
otro joven apuesto habló con una sonrisa.
"Pareciera
que hicieron una clasificación."
Era
el Dragón del Agua.
El
Dragón del Agua, quien había rechazado el acercamiento de Jang Seonyeon con una
expresión perezosa, ahora mostraba una actitud completamente diferente.
"Qué
tontería. Necesitan calmarse."
El
joven respondió secamente al Dragón del Agua y continuó avanzando hacia el
tablero.
Los
estudiantes se apartaron de inmediato mientras el joven de aspecto feroz se
acercaba.
Gulp.
Algunos
incluso tragaron saliva con nerviosismo.
…Bastardo.
Jang
Seonyeon frunció el ceño en el momento en que puso los ojos sobre él.
El
joven también lo notó y respondió con una sonrisa.
Ignorando
lo molesta que era esa sonrisa, Jang Seonyeon apretó los dientes de nuevo,
sabiendo perfectamente que estaba destinada a burlarse de él.
"Cuánto
tiempo, ¿Eh?"
"…Es
un gusto verte, Maestro Gu."
Jang
Seonyeon forzó el saludo, cada palabra fue dolorosa de pronunciar.
"Tu
cara se retuerce cada vez que me miras."
"No
estoy seguro de lo que estás hablando."
"Ya
veo, sigue fingiendo entonces."
A
estas alturas, los dientes de Jang Seonyeon estaban casi desgastados de tanto
apretarlos.
Ese
maldito nunca fallaba en sacarlo de sus casillas.
Quizás
era la forma en que sus insultos siempre eran tan descarados.
"Oh,
hermano."
"¿Qué?"
"Quedaste
en primer lugar."
"¿En
serio?"
Pero
más que eso, él era el mayor obstáculo en su camino.
Primer
lugar,
Gu
Yangcheon.
Había
reclamado el rango más alto entre todos los estudiantes de la Academia.
Obtuvo
la mayor puntuación en los exámenes de ingreso y era el estudiante más infame
de la Academia del Dragón Celestial, aunque por todas las razones equivocadas.
…Dragón
Verdadero.
Era
la única persona a quien Jang Seonyeon más deseaba eliminar.
¿Por
qué?
Jang
Seonyeon comenzó a preguntarse.
Ya
sabía que era talentoso en las artes marciales.
¿Cómo
podría olvidar la humillación que sufrió durante el Torneo de Dragones y Fénix?
Era
un monstruo, después de todo.
Jang
Seonyeon no tuvo más remedio que admitirlo.
El
Dragón Verdadero era un monstruo.
Podía
admitir eso.
¿Pero
también es inteligente?
Era
increíble.
Jang
Seonyeon nunca pensó que Gu Yangcheon haría el esfuerzo, pero aun así superó
incluso a la Fénix de la Nieve.
…¿Cómo
es eso posible?
¿Cómo
podía ser? Tal vez había hecho un trato con los instructores a escondidas...
"Oye."
"…!"
"Debes
estar muy frustrado, ¿No?"
Las
palabras de Gu Yangcheon sacaron a Jang Seonyeon de sus pensamientos, y
rápidamente enmascaró su expresión.
Gu
Yangcheon le dedicó una sonrisa burlona.
"Esfuérzate
más la próxima vez. Aunque no estoy seguro de si habrá una próxima vez."
"…Maestro
Gu."
"Es
porque no comes lo suficiente. Trabaja en tu apetito."
Gu
Yangcheon continuó burlándose y molestando a Jang Seonyeon.
Lo
que lo hacía peor era que Gu Yangcheon ni siquiera parecía importarle su clasificación.
A
Jang Seonyeon no le gustaba.
¿Estás
diciendo que era obvio?
¿Estaba
insinuando que ser el primer lugar era un hecho?
A
Jang Seonyeon no le agradaba.
Hizo
todo lo posible para construir su imagen y mantenerla, pero Gu Yangcheon hacía
todo lo que quería, sin importarle lo que los demás pensaran de él.
…
Los
puños de Jang Seonyeon se apretaron mientras una emoción surgía dentro de él.
Era
envidia.
La
Espada Meteoro, sintiendo envidia por un bastardo como él.
No
podía admitirlo.
Tengo
que deshacerme de él.
Realmente
necesitaba borrarlo del mapa.
Tenía
que asegurarse de que Gu Yangcheon dejara de existir antes de que fuera
demasiado tarde, antes de que el muro entre ellos se volviera insuperable.
La
mirada de Jang Seonyeon se dirigió a un miembro del grupo de Gu Yangcheon.
Era
la persona que se escondía con miedo detrás de Pe Woocheol.
Cheol
Jiseon.
Él
era la clave más importante para Jang Seonyeon, y una persona muy útil para sus
futuros planes también.
Gracias
a él, Jang Seonyeon fue capaz de soportar todos los insultos.
Muy
pronto, la sonrisa en el rostro de Gu Yangcheon se convertiría en
desesperación.
"Felicitaciones,
Maestro Gu."
Sabiendo
esto, Jang Seonyeon mantuvo su sonrisa.
"Como
era de esperarse, eres impresionante."
El
rostro de Gu Yangcheon se torció de disgusto ante las felicitaciones de Jang
Seonyeon.
"Realmente
eres un bastardo desagradable… Yo no podría sonreír por la ira, pero tú de
alguna manera lo logras."
"Hahaha,
¿Por qué me enojaría contigo cuando mereces mis elogios?"
"Podría
perder el apetito si me quedo aquí más tiempo. Vámonos."
Gu
Yangcheon se dio la vuelta como si ya no estuviera interesado.
Su
grupo lo siguió de inmediato, sin dudarlo.
Parecía
que no era solo Gu Yangcheon.
Nadie
en su grupo parecía importarle su clasificación.
Jang
Seonyeon tenía que seguir trabajando duro.
Si
bajaba la guardia aunque fuera un momento, su intención asesina podría
delatarse.
Mantuvo
la sonrisa pegada en su rostro mientras veía alejarse a Gu Yangcheon.
Entonces,
hizo un voto en silencio.
Solo
espera.
Te
haré caer de rodillas.
******************
Me
rasqué la espalda mientras me dirigía hacia la cafetería.
Qué
molesto.
El
constante pinchazo de intención asesina me hacía cosquillas en la espalda.
Supongo
que tener sentidos más agudos no era del todo algo bueno.
Hacía
imposible no sentir la irritante intención asesina de Jang Seonyeon.
Ha.
Ver
la cara de Jang Seonyeon ya era suficientemente malo, pero esa desagradable
aura suya lo hacía insoportable.
Quizás
realmente habría perdido el apetito si me hubiera quedado ahí más tiempo.
Nada
arruina mi apetito más rápido que mirar la cara de ese bastardo.
Mientras
seguía caminando, Pe Woocheol habló.
"Hermano,
eres increíble como siempre… ¡Primer lugar!"
"Ya
lo dijiste tres veces."
Mi
nombre estaba en la cima, pero él parecía más feliz por eso que yo.
"¿Dónde
estaba el tuyo escrito?"
Pe
Woocheol hizo una pausa, pensando en mi pregunta.
"…Creo
que estaba escrito más o menos en el medio, pero no estoy seguro. No le presté
mucha atención."
"Deberías
haberte enfocado más en tu nombre que en el mío, idiota…"
No
esperaba que obtuviera una puntuación alta; siempre parecía medio muerto
durante las clases. Como era de esperarse, quedó en el medio.
¿Pero
primer lugar, eh?
Realmente
no me sentía tan orgulloso ya que lo esperaba.
Sin
embargo, me preocupaba la posibilidad de que los instructores me descontaran
puntos por lo grosero que fui con ellos.
Afortunadamente,
parecía que ninguno de los instructores guardaba rencores.
O
tal vez, sí me descontaron algunos puntos, pero aun así terminé en el primer
lugar.
Ya
lo dije antes, pero sabía más sobre Demonios que nadie.
Había
encontrado innumerables Demonios durante mi tiempo sirviendo al Demonio
Celestial y consumido interminables Piedras Demoníacas para obtener Qi.
Obviamente,
debía saber mucho.
"Deja
de halagarme y vayamos a comer. Tengo hambre."
"Escuché
que hoy hay carne."
"¿Por
qué estás feliz? Sabes que se supone que eres un taoísta, ¿Verdad?"
"¿Qué
es un taoísta? ¿Es algo que se come?"
"…Olvídalo.
Sólo cómetelo todo, ¿Quieres?"
A
estas alturas, ya estaba acostumbrado a las constantes tonterías del Dragón del
Agua.
A
pesar de estar en un piso diferente, siempre estaba rondando en mi grupo.
Realmente
parece que va a seguirme todos los días.
Además,
Ignorando
al Dragón del Agua, dirigí mi mirada hacia Cheol Jiseon, quien caminaba detrás
de nosotros en silencio.
–¿Vas
a seguir actuando así?
"…!"
Cheol
Jiseon se estremeció cuando me dirigí a él telepáticamente.
Esa
expresión amarga que llevaba había sido evidente desde antes.
–Te
dije que está bien.
Sabía
exactamente lo que tenía en mente.
Por
eso, tenía que darle un empujón.
–No
te preocupes por eso, y haz lo que el bastardo de Jang te diga que hagas.
"¡Um…!"
"¿Hmm?"
Cheol
Jiseon comenzó a hablar en voz alta sin darse cuenta, pero cerró la boca
rápidamente y miró hacia otro lado.
"Lo
siento… Me mordí la lengua por accidente."
"¿Estás
bien?"
"S-Sí."
Al
ver eso, suspiré.
¿Qué
pasa si falla en su misión?
–Oye,
amigo, ¿Lo Sabes, no…?
Cheol
Jiseon negó con la cabeza, sin entender a qué me refería.
Parecía
que no sabía de qué estaba hablando.
–Si
no haces lo que te digo, voy a matarte.
"…!"
–Dijiste
que querías vivir.
El
rostro de Cheol Jiseon se puso pálido ante mi amenaza, cargada con intención
asesina.
No
quería llevarlo hasta este punto, pero si fallaba, sería un gran problema.
-Así
que, hagamos un buen trabajo, ¿Sí?
Cheol
Jiseon asintió mientras yo hablaba con una sonrisa.
Por
la expresión de Jang Seonyeon, parecía que estaba planeando exactamente lo que
había previsto. Ahora todo dependía de qué tan bien siguiera Cheol Jiseon sus
instrucciones.
Podía
saberlo por la forma en que Jang Seonyeon me miró antes, y por el pinchazo de
su intención asesina.
No
faltaba mucho.
Incluso
hice un plan de respaldo, por si acaso.
Todo
lo que tenía que hacer era esperar.
Todos
estaban desempeñando su papel, tal como lo había planeado.
Solo
esperaba que no surgiera nada inesperado.
Y
así, pasaron unos días.
"Su
entrenamiento práctico comienza ahora."
El día que ese bastardo y yo habíamos estado esperando finalmente llegó.
¡Sí te gusto el capítulo por favor comparte esta página para que más personas puedan ver nuestros proyectos! ¡Te lo agradecería un montón!
Comentarios
Publicar un comentario