Capítulo 344: De Vuelta (4)

De Vuelta (4)

 

¡Swoooosh–!

 

Después de que una gigantesca ola de calor atravesara el lugar, una fresca brisa primaveral templó rápidamente la calidez.

 

Más precisamente, fue porque retiré mi Qi antes de que el calor pudiera extenderse más.

 

Crackle… crack.

 

Escuché el leve chisporroteo de las llamas que aún persistían.

 

Algunas llamas seguían ardiendo en el suelo.

 

Calmé mi Qi y revisé mi cuerpo.

 

Todavía me quedaba un poco más de la mitad.

 

A diferencia del pasado, cuando usar un Arte Secreto habría agotado completamente mi Qi, aún me quedaba más de la mitad a pesar de haber utilizado la Esfera Llameante encima del Cielo Rojo.

 

Esto demostraba cuánto se había expandido mi recipiente tras alcanzar el Reino Fusión, permitiéndome canalizar mi Qi con mayor eficiencia.

 

Miré a mi alrededor.

 

Todavía había una Formación negra en el cielo.

 

El pequeño agujero que había hecho con Cielo Rojo ya estaba sellado.

 

¿Qué clase de poder es ese?

 

Me concentré y observé, pero no logré encontrar una respuesta.

 

Qué extraño.

 

No parecía exactamente una Formación, pero tampoco parecía una habilidad marcial.

 

¿Podría ser el poder de un tesoro?

 

Era posible.

 

Desvié la mirada.

 

Crack.

 

El edificio de la Academia del Dragón Celestial estaba al borde del colapso.

 

Ahora, era difícil siquiera llamarlo un edificio, ya que la mitad de él había salido volando.

 

Estaba en ruinas debido a la explosión de mi Esfera Llameante.

 

…

 

El sudor frío resbaló por mi rostro al considerar las consecuencias.

 

¿No me pedirán que pague una compensación, verdad?

 

Rustle.

 

Avancé, pisando las ramas carbonizadas esparcidas en el suelo.

 

La zona donde había impactado la explosión estaba llena de polvo y escombros.

 

Moví mi mano, convocando una ráfaga de viento.

 

¡Swoosh–!

 

El polvo se despejó, revelando un enorme cráter con rastros de llamas.

 

Me acerqué.

 

En el centro del cráter, una figura negra se estremecía ligeramente. Era el artista marcial del Reino Fusión con quien acababa de pelear.

 

Bien, no está muerto.

 

Afortunadamente, no estaba muerto.

 

No había tenido la intención de matarlo con ese último ataque.

 

Sin embargo, había cometido un ligero error de cálculo al no poder controlar completamente mi fuerza, ya que aún no estaba acostumbrado a mi nuevo nivel.

 

Hubiera sido problemático si hubiera muerto.

 

Después de todo, aún no había extraído ninguna información de él.

 

"Ugh… Cough… Kugh…"

 

El anciano tosió sangre.

 

Parecía que logró esquivar lo suficiente como para proteger sus áreas vitales, pero a pesar de su aura defensiva, aún estaba en muy mal estado por la explosión.

 

"…Tú… bastardo…"

 

El anciano, con la mitad de su rostro derretido, me miró con una intención asesina.

 

No es que el anciano fuera débil.

 

Era un artista marcial formidable.

 

Obviamente, nadie en el nivel del Reino Fusión era débil.

 

Él fue el responsable del estado crítico de la Espada de Qinghai, y supe que era una amenaza seria en el momento en que lo vi.

 

Así como hay diferencias de poder dentro de un mismo reino, esto era especialmente cierto en el Reino Fusión.

 

El anciano y yo teníamos una enorme diferencia en poder.

 

A pesar de eso, pude someterlo porque…

 

El Qi Demoníaco también afecta a los artistas marciales del Reino Fusión.

 

Mi Qi Demoníaco había logrado infiltrarse en el cuerpo del anciano.

 

…Aunque yo tampoco estaba en perfecto estado.

 

Cuando peleé contra el asesino del Clan Hwangbo, él no llevaba mucho tiempo en el Reino Fusión, así que no fue difícil infiltrar su cuerpo con mi Qi Demoníaco.

 

Sin embargo, esta vez fue diferente.

 

Fue un combate cerrado.

 

No solo tuve que ser sigiloso con mi Qi Demoníaco en medio de la pelea, sino que tampoco fue fácil irrumpir en el cuerpo del anciano debido a su nivel.

 

De hecho, podría no haberlo logrado en absoluto si no hubiera superado mi propio muro.

 

Esto significaba una cosa.

 

Mi Qi Demoníaco se ha fortalecido desde que alcancé el Reino Fusión.

 

El Qi Demoníaco dentro de mi cuerpo se volvió más fuerte después de superar mi muro.

 

¿Pero realmente es algo bueno?

 

No, no es completamente positivo.

 

Afortunadamente, pude lograr la victoria gracias a ello, pero me afectó porque, en lugar de ganar gracias a mi propio crecimiento, en gran parte logré la victoria gracias a la ayuda del Qi Demoníaco.

 

Por lo tanto, no pude evitar sentirme incómodo con eso.

 

Además, mi cuerpo sentía el retroceso de haber usado el Qi Demoníaco.

 

No hay dolor, pero hay una sensación persistente de toxicidad.

 

Mi Qi aún no se había mezclado con el Qi Demoníaco, pero podría ocurrir fácilmente si bajaba la guardia.

 

No sabía si era debido a haber alcanzado el Reino Fusión, pero mi Qi Demoníaco se sentía mucho más tóxico que antes.

 

¿Qué pasa con la tasa de purificación de mi Arte de la Llama Destructiva?

 

Tendría que comprobarlo más tarde.

 

Por ahora, me acerqué al anciano.

 

"¿Qué eres?"

 

"Cough…"

 

Lo tomé por el cabello y miré su rostro.

 

No tenía respeto por los derrotados, especialmente por uno de la Facción No Ortodoxa.

 

Aunque, para empezar, nunca consideré completamente humanos ni a la Facción Ortodoxa ni a la No Ortodoxa.

 

"¿Por qué viniste aquí?"

 

"…Tú… bastardo…"

 

Noté una larga cicatriz en el cuello del anciano.

 

¿Fue un corte de espada? A juzgar por lo profunda que era, parecía haber sido una herida extremadamente grave.

 

¿Y por qué un artista marcial de su nivel emboscaría la Academia del Dragón Celestial?

 

"¿No vas a hablar?"

 

El cuerpo del anciano tembló ante mi pregunta.

 

¿Era de ira o de miedo?

 

Para mí, no parecía miedo.

 

Eso no era bueno.

 

Significaba que tendría que hacerlo hablar a través de la tortura.

 

Seguramente no vino solo para esta emboscada; necesitaba entender la situación.

 

No estaba en una posición en la que pudiera desperdiciar tiempo.

 

Sinceramente, no me importaba lo que les pasara a la mayoría de los estudiantes de la Academia…

 

…Pero sí a mi gente.

 

No podía permitir que mi gente corriera peligro.

 

Mi razón principal para entrenar sin descanso en el Abismo, para alcanzar este nivel superior, era por ellos.

 

Era tanto por mí como por ellos.

 

Dada la caótica situación, necesitaba saber qué estaba pasando con los demás.

 

Fruncí el ceño ante el pensamiento.

 

Tener a tantas personas que proteger no es lo ideal.

 

A diferencia de los planes que había hecho al inicio de mi regresión, ahora tenía más personas a quienes proteger.

 

Lo veía como algo bueno, ya que era una vida diferente a la de mi pasado, pero no podía evitar sentirme abrumado por el futuro.

 

No tenía mucho tiempo.

 

¿Debería torturarlo?

 

Justo cuando estaba considerando qué hacer…

 

"…He…he."

 

El anciano de repente soltó una risa.

 

"¿Por qué te ríes?"

 

¿Había perdido la cabeza al borde de la muerte?

 

Eso no era bueno. Necesitaba sacarle información antes de que muriera.

 

"…Esos son unos ojos aterradores."

 

"¿Qué?"

 

"Esos ojos dicen que estás pensando en la mejor manera de matarme… He visto a innumerables bastardos con ojos como los tuyos. Todos de la Facción No Ortodoxa."

 

"¿Y?"

 

¿Me estaba insultando por mis ojos?

 

"Yo mismo enterré a todos esos mocosos en la tierra con mis propias manos… y mírame ahora."

 

"¿Qué intentas decir? ¿Me estás pidiendo que te perdone la vida por lástima?"

 

¿Se había vuelto senil?

 

Estaba diciendo tonterías inútiles.

 

Blaze.

 

Envolví mi mano en llamas.

 

Las llamas tenían un color e intensidad diferentes a cuando estaba en el Reino Pico.

 

El anciano habló con voz apagada, con los ojos fijos en las llamas.

 

"Tú… ¿Realmente eres un hijo de la Facción Ortodoxa?"

 

"Por supuesto. No hay nadie más diligente que yo en la Facción Ortodoxa."

 

Estoy limpiando la escoria de la Facción No Ortodoxa, así que, naturalmente, soy Ortodoxo.

 

Tras pensarlo por un momento, tomé mi decisión.

 

Lo mataré.

 

Decidí matarlo sin tortura.

 

No solo me faltaba tiempo, sino que tampoco parecía tener información útil para mí.

 

Era mejor deshacerme de él ahora que perder el tiempo prolongándolo.

 

Además, sentía un Qi especialmente afilado que punzaba mi cabeza entre todo el Qi que percibía con mis sentidos.

 

Extendí mi mano.

 

"Yo, el Dragón Negro, no muero a manos de Wi Hyogun, sino de un niño."

 

¿Dragón Negro…?

 

Casi me detuve al escuchar sus palabras, pero no frené mi mano.

 

En cambio, avancé más rápido.

 

Mi mano se acercó al rostro del anciano.

 

No, se detuvo justo antes de hacer contacto.

 

"No puedo permitir eso."

 

Rumble.

 

"…!"

 

Sentí un cambio.

 

Rápidamente retiré mi mano y me alejé.

 

Reuní mi Qi, preparándome por completo.

 

Mi Dantian se estremeció ante el extraño Qi que emanaba de él.

 

[…rr…rrr…]

 

"¿Tú…?"

 

Mis ojos se abrieron de par en par ante el gruñido que le siguió.

 

La bestia que había estado dormida durante tanto tiempo, tanto en el mundo real como en el falso, de repente había despertado.

 

[Grr…]

 

Su gruñido era áspero.

 

Estaba claro que la bestia estaba mostrando los colmillos ante algo.

 

…¿Es por eso?

 

Probablemente se dirigía al anciano que se hacía llamar el Dragón Negro.

 

"¿Dragón Negro dijiste?"

 

El nombre me sonaba familiar, pero no lograba ubicarlo con precisión.

 

Estoy seguro de que habría reconocido quién era, ya que tenía un título famoso, y también me pregunté cómo era posible que no supiera quién era ese anciano. Pero este no era el momento para pensar en eso.

 

"¿Qué es eso?"

 

Algo estaba cambiando en el cuerpo del anciano.

 

"Ku… ughh…"

 

Desde la cicatriz en su cuello, algo comenzó a filtrarse.

 

Solo observar su movimiento retorcido me daba náuseas.

 

Si tuviera que describirlo, diría que parecía un gusano gigante.

 

¡Blaaze–!

 

Reuní llamas en mi mano.

 

No podía permitirme dejar que esto continuara; era claramente peligroso.

 

Mi Qi se drenó de mi Dantian en un instante.

 

Mientras me preparaba para atacar, observé la transformación del anciano.

 

¿Qué es esa cosa… es un Demonio?

 

No parecía un Demonio, nunca había visto algo así antes.

 

¿Un Demonio naciendo de un humano?

 

No sabía qué estaba pasando, pero definitivamente no era nada bueno.

 

Comprimí las llamas en mi mano.

 

Me estaba preparando para usar la Esfera Llameante nuevamente.

 

Decidí incinerarlo por completo.

 

Poco a poco, tomaba forma, con una apariencia absolutamente repulsiva.

 

Además, la sensación que emanaba era tóxica y oscura.

 

Se sentía diferente del Qi Demoníaco que tenían los Demonios.

 

¡Blaze–!

 

Completé la Esfera Llameante, listo para atacar.

 

Justo cuando estaba a punto de lanzar mi ataque,

 

[¡Grr!]

 

¡Swish–!

 

"¿Qué?"

 

Con un repentino gruñido desde dentro de mí, todo el Qi desapareció de mi mano.

 

"Maldita sea."

 

La bestia controló mi cuerpo y soltó mi Qi.

 

¿También podía hacer eso?

 

¿La bestia podía controlar mi Qi?

 

Dejando eso de lado, necesitaba saber por qué la bestia estaba interfiriendo de repente.

 

"¿Por qué eliges interferir después de haber estado dormida tanto tiempo…?"

 

Justo cuando estaba a punto de exigir respuestas,

 

¡Screeeech–!

 

Con un chillido penetrante, algo ominoso comenzó a brotar del anciano.

 

Se movía con una velocidad alarmante.

 

Intenté invocar mi Qi para protegerme,

 

…¿Eh?

 

Pero no podía canalizar mi Qi en absoluto, como si algo lo hubiera bloqueado. ¿Me había quedado sin energía? No, eso era imposible.

 

Había tenido más de la mitad de mi Qi hace solo unos momentos.

 

El gusano se lanzó hacia mí, sin darme tiempo para reaccionar.

 

Esto no era bueno.

 

Justo cuando consideraba intentar usar otro Qi,

 

¡Slash–!

 

El gusano fue cortado en dos al instante, cayendo al suelo frente a mí.

 

Luego, se derritió y desapareció.

 

Parecía como si la tierra lo estuviera absorbiendo.

 

"¿Qué demonios…?"

 

En medio de mi confusión, sentí algo en el centro del cráter.

 

Cuando dirigí mi mirada hacia donde estaba el monstruo,

 

Había alguien ahí.

 

Alguien a quien nunca había visto antes estaba clavando una espada en el monstruo.

 

Parecía que esta persona era quien me había salvado del ataque del monstruo.

 

Pero no había detectado su presencia.

 

Incluso sin poder controlar mi Qi, mis sentidos seguían siendo agudos para detectar mi entorno.

 

Esto sugería que la persona era un artista marcial excepcionalmente hábil, dado que no había notado su acercamiento.

 

Tenía el cabello blanco, igual que su atuendo.

 

¡S-Screeeech–!

 

El monstruo dejó escapar un chillido penetrante, retorciéndose por la espada incrustada en su cuerpo.

 

¿De dónde venía ese chillido?

 

La figura, que parecía ser un hombre, movió su mano en respuesta al grito.

 

¡Swish–!

 

Luego, blandió su espada y cortó al monstruo en dos con facilidad.

 

Observé atónito; incluso estando enfocado, no pude seguir completamente sus movimientos.

 

El hombre de cabello blanco se acercó al monstruo ahora indefenso y extendió su mano hacia su cuerpo.

 

Se movió sin dudar, sin preocuparse por la superficie aceitosa y resbaladiza de la criatura.

 

Entonces…

 

"…¿Huh?"

 

No vi al hombre en sí, sino a su sombra moverse.

 

Su sombra se desprendió de él y comenzó a enrollarse alrededor del monstruo.

 

–Scree… rrgh…

 

La enorme criatura quedó completamente envuelta por la sombra.

 

Se retorció brevemente, intentando escapar, pero pronto quedó inmóvil.

 

Solo pude observar en un silencio atónito, incapaz de comprender lo que estaba sucediendo.

 

¿Qué estaba pasando?

 

Al sentir mi mirada, el hombre de cabello blanco se giró hacia mí.

 

Sus ojos eran tan blancos como su cabello y su ropa.

 

Incluso su piel era pálida.

 

Me hizo preguntarme si era realmente humano.

 

Debido a su apariencia misteriosa, no pude evitar mirarlo fijamente.

 

"¿Ya terminaste de mirar?"

 

El hombre preguntó mientras me observaba.

 

Su voz era más áspera de lo que esperaba, y me estremecí al escucharla.

 

"…¿Quién eres?"

 

Puede que me haya salvado, pero no podía bajar la guardia, ya que no sabía quién era.

 

Tenía que asegurarme de estar preparado.

 

Mientras hablaba, con el cuerpo tenso, el hombre lentamente abrió la boca para responder.

 

Justo cuando estaba a punto de hablar,

 

Woong…

 

"¿Qué?"

 

Me giré, sintiendo un aura detrás de mí.

 

La sensación venía de la montaña.

 

Mi cuerpo tembló ante la sensación.

 

Gotas de sudor comenzaron a formarse en mi frente.

 

"…¿Por qué?"

 

Sin darme cuenta, cargué mi Qi y me alejé del hombre y del monstruo.

 

Fue abrupto, pero el hombre de cabello blanco no hizo ningún movimiento para detenerme.

 

Aumenté mi velocidad.

 

Solo había una razón para que estuviera tan apurado.

 

Desde la montaña, sentí una sensación que tanto detestaba como al igual que lo reconocía, un sentimiento que había esperado no volver a experimentar jamás.

 

No… no puede ser.

 

Quería negarlo, pero mi cuerpo ya conocía la respuesta.

 

No había duda.

 

Desde la montaña, sentí el inconfundible Qi Demoníaco del Demonio Celestial.

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