Capítulo 374: Reunión de la Facción Ortodoxa (15)

Reunión de la Facción Ortodoxa (15)

 

Sus ojos brillaban en rojo.

 

Pero no eran nada parecidos a los ojos rojos que yo tenía al usar llamas o a los que mi padre tenía en ese momento.

 

Mientras que nuestros ojos ardían con la intensidad del fuego, los de Jang Seonyeon resplandecían como si estuvieran llenos de sangre.

 

Además, sus pupilas parecían distorsionadas, estiradas de forma antinatural.

 

¿Qué es eso…?

 

El simple hecho de que Jang Seonyeon estuviera vivo ya era impactante, pero el extraño aura que emanaba de él me hizo sudar frío.

 

El dolor en mi brazo derecho ya era insoportable, pero ahora todo mi cuerpo se sentía inexplicablemente incómodo.

 

¿Qué está pasando? ¿Por qué se siente tan extraño?

 

Tshh…

 

En ese momento, el dolor abrasador en mi brazo derecho se intensificó.

 

Esto es…

 

Pensé que me había acostumbrado al dolor en los últimos meses con el entrenamiento del Venerable Deshonrado, pero esto era completamente diferente.

 

Se siente como si…

 

Se sentía como si estuviera expandiéndose lentamente por todo mi cuerpo. Casi como si la escama en mi brazo derecho se estuviera extendiendo por sí misma.

 

La verdadera pregunta era por qué esto estaba ocurriendo tan repentinamente.

 

Además…

 

Nadie parece preocuparse a pesar de su apariencia.

 

Dejando de lado el hecho de que Jang Seonyeon había aparecido, sus inquietantes ojos por sí solos deberían haber llamado la atención, pero nadie parecía notarlo.

 

¿Podría ser que soy el único que puede ver esto?

 

¿Tal vez solo yo podía ver los extraños ojos de Jang Seonyeon?

 

¿Por qué, entonces…?

 

Mientras mi mente se llenaba de pensamientos complicados, una voz familiar de repente resonó en mis oídos.

 

–No pareces estar pasándola muy bien.

 

Mis ojos se abrieron de golpe por la sorpresa mientras me giraba hacia la fuente de la voz.

 

Era Jang Seonyeon quien había hablado.

 

–…Bastardo…

 

–No quería asustarte, pero me satisface tu reacción.

 

La inquietante sonrisa de Jang Seonyeon mientras hablaba lo hacía parecer completamente distinto a sí mismo.

 

¿Por qué era así?

 

Su rostro y su voz eran inconfundiblemente los de Jang Seonyeon, pero había algo inquietantemente pegajoso en su tono.

 

Se sentía como si llevara consigo un hedor repulsivo, cuando en realidad no había ningún olor.

 

Y aun así, se sentía inconfundiblemente como el hedor de la sangre.

 

¿Sangre…? ¿Ese asqueroso olor a sangre?

 

Mientras ese pensamiento cruzaba por mi mente, comencé a entender el aura siniestra que emanaba de Jang Seonyeon.

 

–¿Demonio de Sangre…?

 

La sonrisa de Jang Seonyeon se ensanchó ante mi realización.

 

Su reacción lo confirmó. Finalmente entendí por qué su aura se sentía tan perturbadoramente desconocida.

 

Eso explicaba por qué ya no se sentía como el Jang Seonyeon que conocía.

 

–Tú…

 

–Eres bastante perspicaz, ¿No?

 

Ese bastardo no era Jang Seonyeon, sino el Demonio de Sangre.

 

–¿Cómo… cómo estás dentro de él?

 

–¿Te sorprende eso?

 

–¡Acaso no es obvio…!

 

–Simplemente quería estirar las piernas y tomar un poco de aire fresco. Dime, ¿Te impresiona?

 

–…¿Qué hiciste con Jang- …el dueño del cuerpo?

 

Era posible que el Demonio de Sangre estuviera tomando prestado el cuerpo de Jang Seonyeon, igual que el Anciano Shin lo hizo con el mío.

 

Si el Anciano Shin podía hacerlo, entonces el Demonio de Sangre seguramente también.

 

El Demonio de Sangre respondió con un tono que fingía confusión.

 

–Niño. Tú mismo lo mataste y lo redujiste a cenizas. ¿Por qué me preguntas algo así?

 

–No juegues conmigo. No estoy aquí para bromear contigo ahora mismo.

 

–Hehe.

 

El Demonio de Sangre soltó una risa tras escuchar mi tono gruñón.

 

Mientras tanto, el dolor abrasador en mi brazo derecho seguía empeorando.

 

Esto no era bueno.

 

¿Por qué está pasando esto ahora, de todos los momentos posibles?

 

Antes estaba perfectamente bien, entonces ¿Por qué el dolor era tan insoportable ahora?

 

Espera… ¿Podría ser por el Demonio de Sangre?

 

La única diferencia era la aparición del Demonio de Sangre. Esa tenía que ser la explicación.

 

–Pareces estar sufriendo mucho.

 

Aunque hice todo lo posible por ocultar el dolor, el Demonio de Sangre de alguna manera lo notó.

 

A juzgar por eso, parecía que este dolor estaba relacionado con él después de todo.

 

–…¿Hiciste algo a mi cuerpo?

 

–Hehe… Puede que quieras creer eso, pero lamentablemente para ti, niño, no tengo intención de hacerte algo así.

 

–¡Tonterías! ¿Olvidas que inyectaste tu Qi en mí a la fuerza?

 

–Así es, lo hice. Pero, ¿Acaso alguna vez te trajo malos resultados?

 

–¿Qué…?

 

Me pregunté de qué demonios estaba hablando ese bastardo de repente.

 

–¿Acaso no dependiste de mi poder cuando estuviste en peligro?

 

–…!

 

–Yo mismo te concedí esa bendición. ¿De verdad pensaste que no me daría cuenta?

 

Por sus palabras, quedó claro que el Demonio de Sangre sabía cada vez que usaba el Qi de Sangre.

 

Incluso si la escama en mi brazo derecho no era obra del Demonio de Sangre, al menos ahora sabía que él estaba al tanto de ello.

 

–…¿Qué es esto exactamente?

 

Cuando le pregunté al Demonio de Sangre sobre la escama, él me miró con una expresión extraña.

 

Su expresión transmitía un extraño y enigmático deleite.

 

–Tal como lo esperaba. Niño, realmente pareces ser el cambio con el que he soñado.

 

–Deja de decir tonterías y dime qué es esto.

 

–No eres uno de mis peones, y aun así, de alguna manera has comenzado a florecer.

 

–…¿Peones?

 

¿Y florecer?

 

–No estoy completamente seguro, pero si ese es el caso, serás el primer humano en hacerlo. Debo felicitarte.

 

–¿Por qué sigues divagando sobre cosas que no entiendo?

 

–Lo que digo es que deberías estar feliz. ¿No es emocionante? Estás trascendiendo de la débil e impotente raza humana, a algo mucho más grande.

 

El Demonio de Sangre hablaba con júbilo.

 

–Rezo para que rompas tu caparazón lo antes posible.

 

El entusiasmo en la voz del Demonio de Sangre solo hizo que mi cabeza diera más vueltas.

 

Para empeorar las cosas, el dolor en mi brazo derecho seguía intensificándose.

 

A este ritmo, no podría contener un grito por mucho más tiempo.

 

Después de observarme en silencio por un momento, el Demonio de Sangre finalmente habló, con una sonrisa curvándose en sus labios.

 

–Pareces estar en gran dolor. Niño, permíteme mostrarte mi generosidad una vez más.

 

–¿Qué…?

 

–Considera esto una forma de felicitarte, así que no lo olvides.

 

Justo cuando el Demonio de Sangre pronunció esas crípticas palabras, el Qi de Sangre dentro de mi Dantian se precipitó hacia arriba sin previo aviso.

 

Se sentía violento.

 

Se sentía como si estuviera obedeciendo la orden de otra persona, fluyendo con furia por todo mi cuerpo.

 

Mientras que no dolía, lo alarmante era cómo se movía completamente en contra de mi voluntad.

 

Hice mi mejor esfuerzo por suprimirlo, pero el Qi de Sangre salió de mi Dantian y comenzó a apoderarse de mi cuerpo.

 

¡Maldición!

 

En cuestión de segundos, el Qi de Sangre había envuelto por completo mi cuerpo.

 

Sin embargo…

 

¿Eh…?

 

El dolor que había estado sintiendo desapareció en un instante.

 

¿Fue por el Qi de Sangre?

 

¿El Qi de Sangre de alguna manera borró el dolor?

 

Examiné mi brazo derecho, que había estado palpitando de agonía solo unos momentos atrás.

 

No podía subirme la manga para inspeccionarlo aquí, pero estaba seguro de que el dolor había desaparecido.

 

Considerando lo que acababa de ocurrir, era difícil creer que esto no estuviera relacionado con el Demonio de Sangre de alguna manera.

 

–Hehe…

 

El Demonio de Sangre soltó una risa, aparentemente divertido con la situación.

 

–Ese niño parece realmente despreciarme.

 

–…¿Despreciarte?

 

–Niño, el dolor que sentiste nació del odio que ese ser me tiene.

 

Fruncí el ceño ante sus palabras.

 

Eso significaba que la escama en mi brazo derecho también era algún tipo de existencia.

 

¿Y odiaba al Demonio de Sangre?

 

¿Qué demonios era?

 

–Es instinto. Es comprensible. Ninguna criatura arrogante querría otra existencia que esté a su mismo nivel viviendo en el mismo mundo.

 

¿Qué encontraba tan divertido y por qué sonaba tan complacido?

 

Ya fuera su expresión divertida o su emoción excitada, no podía comprender ninguna de las dos.

 

Y aun así,

 

–¿Por qué me estás diciendo esto?

 

Necesitaba entender por qué el Demonio de Sangre estaba compartiendo todo esto conmigo.

 

Podía notar que fingía ser generoso, pero no podía discernir si era genuino o parte de algún plan calculado.

 

Fuera cual fuera el caso, el Demonio de Sangre no tenía ninguna razón para decirme nada.

 

–¿Qué es lo que quieres de mí?

 

–Nada. No quiero nada de ti.

 

–¿De verdad esperas que te crea cuando te has aparecido ante mí así?

 

Me quedé sin palabras. ¿Decía que no quería nada de mí?

 

Entonces, ¿Por qué parecía que sí deseaba algo?

 

–Si tuviera que darte una respuesta, entonces rezo para que te vuelvas más capaz que tu yo actual.

 

–Sigues haciendo que sea imposible entenderte. Qué molesto.

 

–Niño, no pasará mucho antes de que comprendas mi significado. Cuando llegue ese día, me buscarás. Espero con ansias ese momento.

 

–¿Esperas que vaya hacia ti, la calamidad? ¿Acaso esperas que vaya a matarte?

 

Ante la mención de 'Calamidad', la sonrisa del Demonio de Sangre se ensanchó.

 

–Parece que has aprendido más de lo que anticipé. Nada mal.

 

–…Dame una respuesta directa. ¿Cuál es tu objetivo? ¿Qué es lo que realmente quieres de mí?

 

–¿Objetivo, dices?

 

El Demonio de Sangre hizo una pausa, como si estuviera perdido en sus pensamientos, antes de hablar nuevamente unos momentos después.

 

–Escapar del camino del destino. Sí, supongo que ese podría ser mi objetivo.

 

–¿Qué quieres decir con…?

 

–Originalmente, habría comenzado a reunir mis piezas antes. Pero verte empezar a florecer me ha permitido alterar mis planes.

 

Florecer.

 

Fruncí el ceño, sin poder comprender lo que el Demonio de Sangre quería decir con eso.

 

Pero si había cambiado sus planes después de verme, estaba claro que el Demonio de Sangre estaba tramando algo.

 

No sabía cómo era posible, pero el Demonio de Sangre había tomado control del cuerpo de Jang Seonyeon de manera innegable.

 

¿Significaba eso que el Demonio de Sangre planeaba usar la apariencia de Jang Seonyeon para sus planes?

 

…Entonces, la razón por la que no pude encontrar ningún rastro de Jang Seonyeon después de regresar al mundo normal…

 

¿Significaba que el Demonio de Sangre estaba detrás de esto?

 

¿Pero cómo?

 

Todavía no tenía idea de cuál era el objetivo del Demonio de Sangre, o incluso de su verdadera naturaleza.

 

Lo único que podía asegurar era que el Demonio de Sangre no era humano, no por la forma en que hablaba.

 

Lo había sospechado antes, pero ahora estaba seguro.

 

–Te daré más tiempo. Te darás cuenta poco a poco.

 

–¡No te dejaré hacer lo que-…!

 

¡Ring–!

 

Justo cuando estaba a punto de responder al Demonio de Sangre, sentí que mi conciencia se oscurecía por un instante.

 

Me sentí mareado.

 

–No te preocupes. Eso es solo el efecto secundario de que haya suprimido el odio.

 

–…¿Qué acabas de…?

 

–Como dije antes, no hice nada dañino para ti. Solo míralo ahora. Incluso el gobernante del Abismo dentro de tu cuerpo no está haciendo nada.

 

Tal como dijo el Demonio de Sangre, la bestia dentro de mi cuerpo que solía gruñir ante las cosas más insignificantes no mostró reacción alguna esta vez.

 

Desde que absorbí a la Espada Celestial, tanto el Anciano Shin como la bestia habían permanecido en silencio, y había asumido que era por ella. Pero ahora no era momento de pensar en eso.

 

–Hoy solo vine a saludarte.

 

–Sin embargo, he ganado más cosas de las que esperaba. He podido ver un camino claro.

 

–Rezo para que algún día vengas a visitarme.

 

Con cada palabra de la voz telepática del Demonio de Sangre, mi conciencia se volvía más borrosa.

 

Luché desesperadamente por aferrarme a ella, pero al final, se desvaneció.

 

Entonces.

 

Cuando finalmente desperté, la reunión de la Facción Ortodoxa ya había terminado.

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