Buen Trabajo (1)
Una
presencia abrumadora.
El
hombre ahora comprendía claramente lo que eso significaba.
Debido
al calor que emanaba del cuerpo de Gu Cheolun, respirar se volvió difícil, los
grillos que cantaban en la hierba enmudecieron y los animales salvajes cercanos
huyeron del área.
Rustle.
A
pesar de ser aún una primavera fría, toda la zona estaba envuelta en calor.
Moyong
Tae habló bajo el aire sofocante mientras observaba a su oponente.
"…Guerrero
Tigre."
Gu
Cheolun miró a Moyong Tae, y sus ojos y cabello negros comenzaron a tornarse
rojos.
No
solo eso, su presencia también creció.
Moyong
Tae ocultó su sorpresa al ver el estado actual de Gu Cheolun.
¿El
Guerrero Tigre siempre fue tan fuerte?
Los
rumores decían que él, el Guerrero Tigre que alguna vez gobernó las Llanuras
Centrales, ya había pasado su mejor momento, y sin embargo, su presencia era
absolutamente abrumadora.
¿Significa
eso que estaba ocultando su fuerza?
Moyong
Tae no entendía por qué Gu Cheolun ocultaría su fuerza, pero al menos pudo
percibir su verdadero poder.
Como
artista marcial que estuvo activo en la misma época que Gu Cheolun, era
imposible no conocer los logros pasados del Guerrero Tigre.
En
aquel tiempo, Gu Cheolun era conocido como el Dragón Celestial más fuerte
cuando aún era un Joven Prodigio.
Fue
la persona más joven en convertirse en Capitán del Ejército del Dragón
Celestial, la unidad número uno de la Alianza.
El
Emperador de la Espada, quien era el Líder de la Alianza en ese entonces,
incluso declaró que el Guerrero Tigre se convertiría en el Zenith en el futuro.
Todos
los artistas marciales en las Llanuras Centrales habían soñado alguna vez con
alcanzar el Zenith.
El
Emperador de la Espada, quien estaba más cerca de esa posición, afirmó que el
Guerrero Tigre llegaría a ser el Zenith, por lo que la gente depositó grandes
esperanzas en él.
Sus
esperanzas se mantuvieron hasta que el Ejército del Dragón Celestial fue casi
completamente aniquilado. Además, el Emperador de la Espada renunció como Líder
de la Alianza, y el Guerrero Tigre se convirtió en el Señor del Clan Gu,
estableciéndose en Shanxi.
Con
el paso del tiempo, la gente dejó de hablar del Guerrero Tigre, y el hombre que
alguna vez fue temido por la Facción No Ortodoxa comenzó a ser llamado
simplemente el Señor del Clan Gu.
Cuando
su hija, la Fénix de la Espada, empezó a hacerse un nombre, la gente comenzó a
creer que el Guerrero Tigre ya había pasado su mejor momento, que no había
podido recuperarse de las heridas acumuladas dentro del Abismo.
Estos
rumores continuaron extendiéndose, ya que Gu Cheolun casi nunca mostraba su
fuerza después de asumir su posición como Señor del Clan Gu, salvo en algunas
excepciones, como cuando la Verdadera Puerta de Demonios se abrió en Shanxi.
Sin
embargo…
…Todos
estaban equivocados.
Moyong
Tae se convenció de ello tras ver al actual Gu Cheolun.
Todos
esos rumores que circulaban en las Llanuras Centrales… eran falsos.
El
Gu Cheolun que estaba frente a él no era un simple artista marcial que podía
ser considerado como uno de los Cien Maestros de las Llanuras Centrales.
La
Espada Celestial Blanca, Moyong Tae, era un artista marcial del Reino Fusión y
estaba clasificado entre los Cien Maestros del Mundo.
A
pesar de esto, Moyong Tae estaba seguro de que perdería si luchaba contra Gu
Cheolun.
Solo
por la abrumadora presencia y el calor de Gu Cheolun, Moyong Tae estaba
convencido de su derrota.
¿Este
hombre, que posee una presencia tan increíble, es considerado del mismo rango
que yo?
Eso
es un absurdo.
¡Cggck–!
"…!"
Moyong
Tae colocó su mano sobre su pecho al sentir cómo la presión en el aire se
intensificaba.
"Espada
Celestial Blanca."
"…Huff…
Ugh…"
Gu
Cheolun comenzó a caminar hacia Moyong Tae, quien empezaba a sudar.
"Te
pregunté qué estabas haciendo."
La
voz de Gu Cheolun contenía una densa ira.
A
pesar de que su tono no cambió en absoluto, su enojo era evidente.
"¿No
vas a responder?"
"…Ugh…"
Más
que elegir no responder, Moyong Tae no podía hacerlo.
Sin
importarle la situación de Moyong Tae, Gu Cheolun lentamente extendió su mano
hacia él.
Moyong
Tae sintió la muerte acercarse cuando la gran mano de Gu Cheolun comenzó a
cubrir su visión.
Justo
cuando la mano de Gu Cheolun envolvió su rostro,
"…Padre."
Detenerse.
Gu
Cheolun se congeló al escuchar a Gu Yangcheon. Luego, giró la cabeza hacia él.
Había
pasado casi una década desde la última vez que Gu Yangcheon lo llamó 'Padre'.
Cuando
Gu Cheolun se detuvo, Gu Yangcheon se acercó y habló.
"Estoy
bien."
Por
su voz, parecía que Gu Yangcheon también tenía dificultades para respirar, pero
aun así continuó hablando.
"El
Señor de Moyong solo quería darme una simple lección. Es un malentendido."
"…"
Gu
Cheolun observó a Gu Yangcheon por un momento.
Sus
ojos rojos hicieron que Gu Yangcheon se sintiera incómodo, pero este no apartó
la mirada.
Después
de unos segundos, Gu Cheolun retiró su mano de Moyong Tae y se puso de pie.
Cough.
Moyong
Tae finalmente pudo volver a respirar.
Solo
porque Gu Cheolun retiró su abrumador calor y presencia.
Mientras
observaba a Moyong Tae, quien respiraba con dificultad, Gu Cheolun habló.
"Espada
Celestial Blanca."
Al
escuchar su nombre, Moyong Tae se secó el sudor frío y levantó la mirada.
"¿Es
eso cierto?"
"…"
Moyong
Tae pensó en su respuesta por un momento. Se preguntó si era aceptable recibir
la ayuda de Gu Yangcheon en esta situación, pero temía lo que Gu Cheolun haría
si actuaba con orgullo.
Se
preguntó si Gu Cheolun realmente acabaría con su vida, pero la acción que Gu
Cheolun hizo antes le hizo pensar que hablaba en serio.
Con
ese pensamiento, Moyong Tae respondió, apretando los dientes.
"…Lo
es."
"…"
Al
escuchar la respuesta de Moyong Tae, Gu Cheolun dio un paso atrás con una
extraña expresión.
Parecía
estar creando algo de distancia para que Moyong Tae pudiera ponerse de pie.
Entonces…
"Me
disculpo. Malinterpreté la situación."
Gu
Cheolun se disculpó con un tono calmado.
Lo
importante de su disculpa era que no sonaba sincera en absoluto.
Probablemente
sabía que Gu Yangcheon estaba cubriendo a Moyong Tae.
A
pesar de esto, Gu Cheolun dejó pasar la situación con una disculpa, y Moyong
Tae, quien también era consciente de ello, se puso de pie mientras mordía su
labio.
"…Yo
también tengo la culpa por hacer que la situación pareciera tan engañosa. No te
culpes a ti mismo."
"Gracias
por tu comprensión."
Después
de un intercambio de disculpas y agradecimientos falsos, Moyong Tae miró a Gu
Yangcheon, quien estaba detrás de Gu Cheolun.
Gu
Yangcheon lo miró con una expresión extraña.
Justo
cuando Moyong Tae empezaba a preguntarse el porqué…
–…Lo
siento. Si esto no te satisface, me aseguraré de visitarte adecuadamente en el
futuro.
…
Gu
Yangcheon se disculpó telepáticamente con Moyong Tae.
No
sabía ni siquiera qué haría Moyong Tae si volvían a encontrarse, ¿Cómo podía
decir algo así con tanta confianza?
Moyong
Tae aún despreciaba a Gu Yangcheon, pero no estaba en condiciones de
cuestionarlo.
–No
es necesario.
–…!
Gu
Yangcheon abrió los ojos con sorpresa tras escuchar la respuesta de Moyong Tae.
Hablando
de manera más informal esta vez, Moyong Tae respondió;
–No
es necesario que vengas a visitarme.
–Pero…
–Yo
te visitaré en el futuro.
–…
¿Significaba
eso que lo mataría de verdad la próxima vez que se encontraran?
Justo
cuando los labios de Gu Yangcheon estaban a punto de empezar a temblar…
–Vendré
con mi hija la próxima vez, así que prepárate.
–…
–Te
lo diré ahora para que no lo malinterpretes, aún no te he dado mi aprobación.
–Lo
entiendo.
–Y
mi postura no cambiará.
–Lo
comprendo.
Moyong
Tae dijo que vendría con Moyong Hi-ah la próxima vez. ¿Eso significaba que no
desenvainaría su espada?
Mientras
Gu Yangcheon estaba sumido en sus pensamientos, Moyong Tae juntó sus puños en
señal de respeto hacia él.
"…Se
está haciendo tarde, así que me retiraré primero, siempre que no haya problema
con ello."
"Puedes
hacerlo."
"Aunque
era de esperarse, me disculpo por lo que le hice a tu hijo, y volveré a
disculparme en persona la próxima vez que lo vea."
Gu
Cheolun asintió ante las palabras de Moyong Tae, quien luego dejó escapar un
suspiro agotado y desapareció.
Una
vez que la presencia de Moyong Tae dejó de percibirse…
Woong–
Gu
Yangcheon sintió que se establecía una barrera a su alrededor.
Por
supuesto, fue obra de Gu Cheolun.
Gu
Yangcheon hizo una expresión vaga mientras miraba a Gu Cheolun y la barrera.
Luego
de rascarse la cabeza…
"Mi
señor."
Finalmente,
comenzó a hablar.
"Sí."
"¿Por
qué hiciste eso?"
Gu
Yangcheon preguntó.
Antes
de que Gu Cheolun pudiera preguntar a qué se refería, Gu Yangcheon continuó…
"Nos
has estado observando todo este tiempo."
Los
ojos de Gu Cheolun se abrieron ligeramente ante la afirmación de Gu Yangcheon.
******************
Padre
me había estado observando todo este tiempo.
Estaba
seguro de ello.
"¿Por
qué te molestaste en oprimir al Señor del Clan Moyong?"
Desde
el inicio de mi conversación con el Señor del Clan Moyong hasta el momento en
que lo desafié a un duelo, Padre nos estuvo observando desde el principio.
Cuando
escuchó mi pregunta, respondió con una expresión de sorpresa.
"¿Cómo
lo supiste?"
Confirmó
mis sospechas.
A
pesar de no haber detectado realmente su presencia, estaba seguro por una
razón.
"Simplemente
sentí que lo harías."
"…"
"No
eres del tipo de persona que llega tarde, ni olvidarías una promesa."
Yo
fui quien le pidió a Padre hablar sobre mi madre, y acordamos encontrarnos aquí
después de la comida.
No
creía que Padre llegaría tarde, e incluso pensé que llegaría temprano.
Francamente,
mi suposición fue acertada.
"Así
que tengo curiosidad. ¿Por qué dejaste que esto pasara?"
¿Por
qué Padre decidió posponer su intervención?
Pudo
haber evitado que todo esto ocurriera.
La
fuerza que Padre mostró hace un momento era más que suficiente para detener a
Moyong Tae.
¿Qué
tan fuerte es en realidad?
Aunque
yo era un artista marcial del Reino Fusión, ni siquiera podía imaginar la
verdadera fuerza de mi padre.
Al
menos, estaba seguro de que Padre era abrumadoramente más poderoso que la
Espada Celestial Blanca.
Esta
era la segunda vez en esta línea temporal que presenciaba su fuerza.
La
mostró por primera vez en el Palacio Negro, y la mostró nuevamente aquí.
Solo
había visto su fuerza marcial dos veces, pero ahora estaba seguro.
Padre
era poderoso.
Ni
siquiera me atrevía a imaginar su verdadero alcance.
"…Tengo
curiosidad sobre por qué decidiste detener a la Espada Celestial Blanca en ese
momento en particular."
Mientras
hacía mi pregunta, el color del cabello de Padre comenzó a volver a la normalidad
y también disipó el calor residual en el aire.
Cuando
el aire se volvió más fácil de respirar, Padre respondió.
"Solo
hice lo que era necesario."
"¿Necesario?"
"Sí."
¿Qué
quería decir con eso?
"Originalmente,
no tenía intención de intervenir."
"Entonces,
¿Por qué…?"
"Fue
porque él estaba pensando en pelear contigo en serio."
"…!"
"¿Necesito
decir algo más?"
Moyong
Tae estaba empezando a ponerse serio…
Padre
estaba dispuesto a dejarlo pasar si solo se trataba de una lección breve, pero
intervino cuando Moyong Tae estaba cruzando la línea.
"…¿Eso
significa que estabas pensando en matarlo en serio?"
Recordé
el calor que contenía la mano de mi padre.
Si
hubiera envuelto su mano alrededor del rostro de la Espada Celestial Blanca, el
resultado habría sido aterrador. Afortunadamente, Padre sacudió la cabeza.
"Solo
hice lo que era natural. Incluso si no me hubieras detenido, habría elegido un
método similar y lo habría dejado ir."
"…"
Hizo
todo esto a propósito, incluyendo expresar su enojo, para poner a Moyong Tae en
una posición desfavorable.
¿Todo
esto estaba calculado?
Este
pensamiento solo hacía que Padre pareciera aún más aterrador.
"…Eso
lo entiendo. Pero, ¿Esto realmente está bien?"
"¿A
qué te refieres?"
"Has
estado ocultando tu verdadera fuerza. Me pregunto si era correcto mostrarla al
Señor del Clan Moyong de esta manera."
Debe
haber tenido una razón para ocultarla, y aun así, Padre se la mostró a Moyong
Tae como si nada.
Al
escuchar mi pregunta, Padre respondió con un tono de confusión.
"Tercer
hijo."
"Sí,
mi Señor."
"Parece
que estás equivocado."
"¿Eh?"
Padre
me miró con su habitual mirada afilada y luego habló mientras se acomodaba el
cabello con sus grandes manos.
"Nunca
he ocultado mi fuerza."
"…!"
Me
quedé boquiabierto ante su respuesta.
¿Nunca
la ocultó?
"Simplemente
nunca tuve la necesidad de mostrarla."
"Pero
los rumores decían…"
"¿Son
realmente tan importantes las palabras de los demás?"
"En
absoluto."
"Estoy
de acuerdo. Solo he usado la cantidad de fuerza que ha sido necesaria. No hay
ningún significado especial detrás de eso."
Esto
no era lo que esperaba.
Padre
nunca ocultó su fuerza en primer lugar.
No
reaccionó a ninguno de los rumores que se esparcieron por las Llanuras
Centrales.
Además,
afirmó que nunca tuvo la necesidad de usar su verdadera fuerza, lo cual me
sorprendió enormemente.
…Esto
era algo que jamás imaginé.
Realmente
no tenía idea de sus verdaderas capacidades.
Aunque,
pensándolo bien, tenía sentido, considerando la personalidad de Padre.
Pero
aun así, pensé que al menos le importaban un poco los rumores.
Mientras
todavía procesaba la impactante revelación, Padre me habló.
"Tercer
hijo."
"Sí,
mi Señor."
"Parece
que has superado tu muro."
"…"
Oculté
mi reacción tras escuchar sus palabras inesperadas.
Se
refería a cómo había superado mi muro y alcanzado el Reino Fusión.
"…Sí."
"¿Cuándo
lo superaste?"
"Hace
poco más de dos meses."
"Ya
veo."
Gu
Cheolun asintió con mi respuesta y no mostró ninguna reacción adicional.
Su
hijo alcanzó el Reino Fusión antes de los veinte años, y aun así su reacción no
pudo ser más indiferente.
Qué
gran padre es–
"Buen
trabajo. Debió haber sido difícil."
"Lo
fue. Grac-… ¿Eh?"
Sorprendido,
abrí los ojos de par en par y miré a Padre.
Sin
embargo, ya no estaba mirándome.
En
cambio, miraba fijamente hacia otro lado.
"¿Mi
Señor…?"
"Dijiste
que tenías algunas preguntas para hacerme."
"Ah,
sí."
Quería
preguntarle qué estaba mirando, pero Padre fue directo al tema principal.
Casi
parecía estar señalándome que no preguntara.
Tragué
saliva con nerviosismo.
Recordé
por qué había venido aquí a reunirme con Padre a solas.
Eso
fue, porque vine a hacer preguntas.
Fijando
mi mirada en él, comencé a hablar.
"Mi
Señor."
Padre
me miró tras escuchar mi llamado.
Enfrentando
sus ojos rojos, le hablé.
"Escuché
que mi madre sigue viva."
"…"
Los
hombros de Padre se movieron levemente cuando le hice esa pregunta.
Tras
notar su reacción, continué hablando.
"…Quería
preguntar… ¿Si sabes dónde está mi madre?"
"…"
Padre
guardó silencio por un largo tiempo ante mi cuidadosa pregunta.
¿Estaba
pensando en cómo descubrí esto o en por qué estaba preguntando?
Mientras
pensaba en las posibles respuestas a sus preguntas inevitables, Padre habló.
"Sí."
"…!"
"Lo
sé."
Mi corazón comenzó a latir rápidamente con su respuesta.
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