Buen Trabajo (2)
Frase del capítulo:
"Nunca
imaginé que la última palabra que escucharía de él sería una disculpa, cuando
lo único que necesitaba de él era estar allí."
Y.
Tachibana.
"Sí,
lo sé."
Tuve
que ocultar mi sorpresa al escuchar la respuesta de mi padre.
Sin
embargo, esperaba esa respuesta.
Creía
que solo mi padre sabía el paradero de mi madre. Lo miré a los ojos y le hice
otra pregunta.
"…Entonces,
¿Dónde está? ¿Dónde está mi madre?"
Necesitaba
saber dónde estaba.
No
era simplemente porque quería verla, sino porque todos mis problemas actuales
estaban relacionados con ella.
Descubrí
que había una bestia dentro de mi cuerpo y que mi madre era llamada la Segunda Calamidad
del Mundo.
También
era conocida como la Gobernante de los Diez Mil Mundos.
Lo
más importante que necesitaba averiguar era…
La
Espada Celestial.
Antes
de que la Espada Celestial abandonara el mundo para siempre, fue mi madre quien
me abrazó y me habló con calidez.
No
había forma de que pudiera olvidarlo.
Incluso
si quisiera, no podría olvidar esa voz.
Mi
madre me dijo que aceptara y absorbiera a la Espada Celestial, y le hice caso.
Era
posible que ella supiera cómo podría volver a encontrarme con la Espada
Celestial.
"Si
sabes algo, por favor, dímelo."
"…"
En
lugar de responderme, mi padre solo siguió mirándome.
Me
pregunté cómo podía mantenerse sin expresión, pero al fijarme en sus ojos, pude
ver una pequeña reacción.
Está
reaccionando.
Las
pupilas de mi padre temblaban ligeramente.
Esperé
pacientemente su respuesta.
Después
de un breve silencio, mi padre habló.
"…¿Por
qué quieres saberlo?"
Fruncí
el ceño ante su respuesta.
¿Por
qué quiero saberlo?
No
pude evitar sentir que su pregunta era absurda.
"¿Realmente
es tan extraño que un hijo quiera saber el paradero de su madre?"
"…"
"…No
lo pregunto solo por curiosidad, sino porque tengo derecho a saberlo tarde o
temprano."
¿Cuánto
tiempo había pasado desde la última vez que levanté la voz contra mi padre? Era
la primera vez desde mi regresión, y apenas lo había hecho en mi vida pasada.
Sin
embargo, era justificable en esta situación.
Era
algo que nunca supe hasta el día en que morí en mi vida anterior.
Si
mi madre realmente estaba viva, y si estaba o no involucrada en mis problemas
actuales, tenía que saberlo.
"Seguramente
podrías decírmelo si lo sabes."
A
pesar de mi impaciencia, mi padre permaneció en silencio. Ese silencio solo me
frustró más.
"Mi
Señor…"
"¿Qué
harás después de conocer el paradero de tu madre?"
Me
detuve ante la repentina pregunta de mi padre, pero respondí de inmediato.
"Iré."
"¿A
donde está tu madre?"
"Sí."
No
le mentí.
Le
respondí con honestidad, dándole la respuesta que quería.
"…Ese
lugar no es uno al que puedas ir a voluntad."
"¿Por
qué? ¿Es porque está en el Abismo?"
"…"
"Y
si no es eso, ¿Es porque debo priorizar convertirme en el Joven Señor? Y si
tampoco es eso…"
Los
ojos de mi padre, a quien rara vez podía ver de cerca, parecían más claros de
lo habitual hoy.
"¿Es
quizá porque madre es una calamidad?"
"…!"
Tan
pronto como pronuncié esas palabras…
¡Cgggk–!
El
calor explotó desde el cuerpo de mi padre.
Casi
di un paso atrás debido a la intensa ola de Qi que liberó, pero logré
soportarlo.
Hoy,
no iba a dejarme intimidar.
La
mirada de mi padre se volvió extremadamente afilada mientras continuaba
emitiendo calor.
¿Estaba
frunciendo el ceño o estaba mostrando su ira?
No
podía leerlo, ya que no estaba acostumbrado a las expresiones de mi padre.
"…¿Cómo
lo sabes?"
¿Se
refería a que llamé calamidad a mi madre?
Si
era así, significaba que él también sabía de su identidad.
"Lo
escuché de–"
¡Swoosh–!
Justo
cuando estaba a punto de responder, mi padre liberó una presencia densa y
abrumadora. Sentí como si mi corazón se hubiera hundido al instante.
"¿Quién?
¿Quién se atrevió a decirte esa información?"
…Mierda.
Parecía
que mi padre se había enfurecido con mi declaración, a juzgar por lo ardiente
que se volvía su calor.
Era
el mismo calor que sentí antes, cuando se enfrentó a la Espada Celestial
Blanca.
¿Por
qué se enojó?
¿Era
un problema que alguien me hubiera contado la historia de mi madre?
"…Eso
no es lo importante aquí."
"No,
sí lo es. Así que dime."
"…"
No
iba a dejarlo pasar hasta que le diera una respuesta. No tenía opción, así que
comencé a explicar.
"…Lo
escuché del Árbol del Mundo, que supuestamente era el Gobernante de un
mundo."
"…"
Las
pupilas de mi padre temblaron al escuchar mi respuesta.
El
Árbol del Mundo me dijo que mis padres lo habían visitado en el pasado. Eso
significaba que mi padre estaba al tanto de su existencia.
A
juzgar por su reacción, parecía ser cierto.
"Pero…
¿Cómo lo sabes? ¿Acaso…?"
Las
grandes manos de mi padre me sujetaron los hombros.
"¿Fuiste
a ese lugar?"
"Si
te refieres al lugar donde está el Árbol del Mundo, entonces sí, es
correcto."
Se refería al mundo falso donde el Árbol del Mundo estaba encarcelado.
La
expresión de Padre solo empeoraba a medida que nuestra conversación continuaba.
¿Por
qué? ¿Por qué estaba haciendo esas expresiones?
Mientras
mi confusión crecía, Padre habló.
"¿El
que superaras tu muro… también fue por ese lugar?"
Estaba
preguntando si fue por el Abismo que logré alcanzar el Reino Fusión a una edad
tan temprana.
"Tuvo
que ver."
Definitivamente
fue un factor en mi crecimiento.
Gracias
al tiempo que me fue dado en ese mundo, pude alcanzar el Reino Fusión antes de
lo que originalmente esperaba.
Sin
embargo, la expresión de Padre se tensó aún más tras escuchar mi respuesta.
"Nadie
puede entrar voluntariamente a ese mundo. ¿Cómo lograste poner un pie
allí?"
"…Por
coincidencia."
"¿Cuánto…
Cuánto tiempo estuviste ahí?"
También
parecía saber que el tiempo fluía de manera diferente en ese mundo.
Pensé
para mí mismo.
¿Cuánto
tiempo estuve exactamente allí?
No
pude dar una respuesta precisa, ya que dejé de contar los días después de que
pasaron tres o cuatro años aproximadamente.
Después
de eso, sentí que ya no tenía sentido seguir contando.
"No
estuve ahí por mucho tiempo."
Le
di una respuesta, pero no pareció convencido.
¿Qué
lo hacía poner una expresión tan seria?
El
tiempo no importaba, todo era lo mismo una vez que regresaba al mundo normal.
Puede
que haya sentido hambre y sed, aunque fuese un mundo falso, pero podía llenar
mi estómago cazando demonios, y su sangre me ayudaba a calmar la sed.
Si
la sangre de un demonio era venenosa y no podía purificar mi cuerpo con mi Qi,
simplemente tenía que soportar el dolor.
Mientras
no muriera, no había problema alguno.
Gracias
a eso, pude alcanzar el Reino Fusión al final.
Además,
pude regresar al mundo real con toda la iluminación que obtuve en el mundo
falso.
¿Cuál
era el problema entonces?
No
podía entender por qué Padre mostraba una reacción tan negativa.
Me
incomodaba, pero tenía otras preguntas que hacer.
"Escuché
que tú y madre también visitaron ese lugar antes."
"¿Ella
te dijo eso?"
¿Ella?
Me molestó extrañamente la forma en que Padre llamó al Árbol del Mundo.
"Sí."
"…Se
atrevió a contarte una historia innecesaria."
Me
detuve al escuchar la ira contenida en la voz de Padre.
El
Árbol del Mundo fue una vez el Gobernante de las Llanuras Centrales, y aun así
Padre hablaba con un tono furioso, con total desprecio.
"¿Te
reúsas a contarme porque madre en realidad es una calamidad enviada al
mundo?"
"Si
ese fuera el caso, ¿Qué harías al respecto?"
"Aunque
eso fuera cierto, nada cambiaría, necesito saberlo."
"…"
Padre
me miró en silencio por un momento.
Justo
cuando pensé que iba a darme una respuesta…
"Me
niego."
"…!"
Apreté
los dientes al escuchar la respuesta de Padre.
¿Así
que se niega a responder a pesar de que hemos llegado tan lejos?
"¿Por
qué…? Creo que merezco algunas respuestas después de todo lo que he
pasado."
Me
pregunté si Padre tenía algún tipo de atadura que le impedía hablar, pero lo
dudaba.
Era
solo una corazonada, pero nunca me había equivocado en situaciones como esta.
Cuando
mi expresión estaba a punto de desmoronarse…
"¿Cuántos
arrepentimientos has tenido en tu vida?"
Padre
de repente me hizo una pregunta inesperada.
"…¿Arrepentimientos?"
Me
detuve tras escuchar su repentina pregunta.
¿Arrepentimientos?
¿Cuántos
he tenido en mi vida?
"Muchos."
Respondí
con una sonrisa vacía.
No
tenía sentido pensarlo demasiado. Mi vida estaba llena de arrepentimientos. He
lamentado tantas cosas que me cansé de ello, y aun así, tuve que seguir
adelante.
¿Por
qué Padre me preguntaba eso?
"Como
Señor del Clan Gu– …No, en mi vida, solo he tenido unos pocos
arrepentimientos."
Era
muy extraño que mencionara esto de repente. ¿No haber tenido muchos
arrepentimientos, eh?
No
podía sentirme más celoso.
Sin
conocer mis pensamientos internos, Padre continuó hablando.
"He
vivido mi vida mayormente sin arrepentimientos. No creía que tuviera sentido
pensar en el pasado. Así es como viví, pero ¿Sabes cuáles son mis pocos
arrepentimientos?"
¿Los
arrepentimientos de Padre?
"…No
lo sé."
No
había manera de que lo supiera.
Cuando
respondí con cautela, Padre contestó como si hubiera estado esperando mi
respuesta.
"Mis
arrepentimientos son sobre ti y tu madre."
"…!"
Sus
palabras atravesaron mi pecho como una daga.
No
esperaba esa respuesta.
¿Sus
arrepentimientos eran sobre Madre y yo? ¿Cómo podía decirme eso en la cara?
"¿¡Cómo
puedes–!?"
Justo
cuando estaba a punto de gritar de ira…
"No
debí haberte llevado con tu madre ese día."
Perdí
las palabras ante la declaración de Padre.
No
esperaba esto.
Ese
día se refería al día en que Madre desapareció tras ser devorada por el Abismo.
"Eso
es–"
"No
debí haber enviado a tu madre de esa manera, y no debí haberte dejado quedarte
allí solo porque ella me lo pidió. Ese es mi único arrepentimiento."
Me
envolvió un sentimiento extraño al escuchar a Padre.
"…¿La
petición de Madre?"
No
solo eso, también dijo que no debió haberla enviado.
Eso
sonaba como si Madre se hubiera ido por voluntad propia.
"…"
"¿Me
llevaste allí ese día porque Madre te lo pidió?"
Padre
no respondió, pero sabía que su silencio era una afirmación.
¿Qué
clase de tontería era esta?
Aún
recuerdo ese día vívidamente. Ese recuerdo aparece en mi mente de vez en
cuando.
Era
una noche de invierno y mis manos y oídos estaban rojos por el frío.
La
mano de Madre estaba sobre mi mejilla mientras mi conciencia se desvanecía, y
Padre estaba de pie delante de mí, mirándome desde arriba.
Aún
recuerdo vívidamente la extraña puerta hacia el Abismo que se abrió detrás de
Madre, así como las lágrimas que corrían por su rostro.
Quiero
decir, ¿Cómo podría olvidarlo? Ese fue el día en que mi vida se convirtió en un
infierno.
Hasta
ahora, no tenía dudas de que Padre había sido quien me llevó allí.
¿Pero
todo fue porque Madre lo pidió?
Nunca
supe de esto.
"No
debí dejarte verla en sus últimos momentos solo porque ella me lo pidió."
La
luz de la luna proyectaba una sombra sobre el rostro de Padre, impidiéndome ver
claramente su expresión.
Si
lo que Padre decía era cierto…
"¿Por
qué me lo dices hasta ahora?"
El
incidente ocurrió hace mucho tiempo, ya había pasado el momento adecuado para
decírmelo.
Viví
toda mi vida creyendo que Madre terminó en ese estado por la maldita carga que
mi clan acumuló y por las decisiones de Padre.
Desde
ese día, le tuve miedo a Padre, creyendo que me había mostrado esa escena a
propósito.
Porque
parecía como si me estuviera diciendo que yo terminaría igual si me negaba a
aceptar el papel que el clan me había impuesto.
Pero
si todo eso era falso…
"…¿No
deberías habérmelo dicho mucho más antes?"
Era
demasiado tarde.
Fuera
cierto o no, ese evento cambió mi vida y ahora era un asunto irreversible.
"¿Por
qué nunca me lo dijiste hasta ahora? No sé sobre otras cosas, pero si al menos
me hubieras contado esto, entonces yo–"
"¿Crees
que las cosas habrían cambiado?"
"…"
No
pude responder.
Sabía
que no podía garantizar que las cosas habrían cambiado.
Aun
así…
"…¿Querías
que te odiara?"
Así
fue mi vida pasada.
Mi
vida se derrumbó y caí hasta el fondo.
¿Padre
no sabía que terminaría en ese estado?
Padre
respiró hondo tras escuchar mis palabras cargadas de emoción.
Sus
respiraciones se sintieron pesadas por alguna razón.
"Ya
sean humanos o cualquier otro ser vivo, si se ven forzados a situaciones que no
pueden soportar…"
Sus
palabras salieron junto con su respiración audible.
"Están
destinados a buscar a alguien a quien culpar."
Sus
palabras fueron suficientes para hacerme dar vueltas la cabeza.
"Si
realmente necesitan a alguien, ¿No sería mejor que odiaran a su padre
incompetente en lugar de odiar un mundo que ni siquiera pueden enfrentar
adecuadamente?"
"…"
Duele.
No sé dónde ni por qué duele, pero lo hace.
Esto
no es lo que quería escuchar de él.
Solo
quería saber sobre el paradero de Madre.
No
esperaba esta confesión repentina.
"…Es
contradictorio."
"Lo
es."
"Pero
incluso si me mostraste generosidad, no es justo que solo me hayas observado
sufrir después."
Fue
mi culpa que me desmoronara sin poder superar mi dolor, pero también fue culpa
de Padre por dejarme en ese estado, sin darme ningún apoyo.
"¿Estás
diciendo que querías que te odiara por eso también?"
Mis
palabras se dispersaron con la brisa.
Sentí
como si todas mis emociones reprimidas se liberaran de golpe, creando una
tormenta.
¿Dónde
estaban escondidas estas emociones, revelándose solo ahora?
Pensé
que había logrado borrar tales sentimientos inútiles, pero claramente no era
así.
Entonces
empecé a preguntarme…
Si
Padre me hubiera ayudado cuando mi vida iba en picada, ¿Realmente habría
cambiado?
Como
nunca sucedió, no sabía la respuesta a esa pregunta.
Incluso
si significaba que habría cambiado, deseaba que hubiera pasado.
Si
mi deseo se hubiera cumplido, sentiría lástima por mi yo actual, ya que nunca
experimenté algo así.
Así
que, por favor…
"Sí."
No
quería que Padre me mirara con esos ojos.
"Ese
también es uno de mis arrepentimientos."
Quería
que me mirara con su fría y afilada mirada habitual.
"Sabía
que no debía haber hecho tal cosa. Es mi culpa que nunca extendiera mi mano
hacia ti."
Deja
de mirarme con esos ojos amargos.
"Lo
siento."
"…"
"Por
eso, no pude enviarte con tu madre. Ese es mi mayor arrepentimiento."
Después
de escuchar una disculpa inesperada de mi padre, las emociones que apenas había
logrado contener todo este tiempo finalmente se desbordaron.
Habría
sido mejor si simplemente hubiera dicho que no tenía otra opción o que no tuvo
tiempo para prestarme atención, pero no dijo ninguna de esas cosas.
Eso
solo me hizo sentir peor.
Escondí
mi rostro con mi mano temblorosa.
No
era porque mis ojos se llenaran de lágrimas, sino porque no podía mirarlo a los
ojos.
Me
habría sentido mejor si no se hubiera disculpado, incluso si eso significaba
que lo resentiría por el resto de mi vida.
¿Cómo
terminó esta situación así?
…Ah.
No
merecía la disculpa que recibí de mi padre.
¿Fue
por todos los problemas que causé hasta ahora? ¿O fue simplemente porque era mi
padre?
No.
No
era por eso.
Había
una razón mucho más simple.
Al
menos.
Realmente,
al menos.
No
debió disculparse con el hijo que lo mató.
Recordé
un recuerdo que había mantenido sellado en lo más profundo de mi corazón.
–Buen
trabajo. Lo hiciste bien.
Recordé
las últimas palabras de mi padre y su elogio de antes.
Esas
fueron, las últimas palabras de mi padre.
Mi
padre, quien fue la única persona que logró herir al Demonio Celestial aparte
de Wi Seol-Ah en mi vida pasada, encontró su fin poco después.
Las
Llanuras Centrales, por supuesto, creyeron que el Demonio Celestial fue el
responsable de matarlo, pero esa no era la verdad.
No
fue el Demonio Celestial quien lo mató.
Mi
padre no murió a manos del Demonio Celestial.
En realidad, fui yo quien puso fin a la vida de mi padre.
¡Sí te gusto el capítulo por favor comparte esta página para que más personas puedan ver nuestros proyectos! ¡Te lo agradecería un montón!
hermano, vaya capitulazo!!!!!!!!!
ResponderEliminarme he sentido bastante identificado con el prota en este cap, al igual que su padre mi padre tambien es bastante frio y molesto conmigo pero siempre intenta hacer lo mejor para mi aunque acabe odiandolo un poco, pero al leer este capitulo ahora lo valoro mucho mas. gracias por traducir.