Capítulo 412: El Último Bandido (3)

El Último Bandido (3)

 

El humo seguía llenando el oscuro bosque.

 

También impregnaba el aire con un fuerte olor a quemado.

 

"¡Hah…! ¡Ahhh…! ¡Aghhhh!"

 

El hombre desconocido gritaba una y otra vez. Era porque el fuego lo estaba quemando lentamente vivo.

 

"¡Por favor… Pooor favooor!"

 

Suplicaba desesperadamente por su vida a la persona que lo sujetaba del cuello, pero su oponente lo seguía mirando igual que antes.

 

A diferencia de su rostro inexpresivo, sus pupilas eran de un rojo brillante, como si estuvieran llenas de llamas furiosas.

 

Cuando la luz de la luna comenzó a iluminar el área a su alrededor, el suelo de la tierra quedó al descubierto.

 

El color del suelo era extrañamente oscuro.

 

Era porque estaba empapado de sangre.

 

"…Urgh… Ufh… gh."

 

El hombre envuelto en llamas fue quedando en silencio poco a poco tras gritar repetidamente.

 

Ya no estaba vivo.

 

"…"

 

Thud.

 

Después de confirmar su muerte, el joven soltó el cuerpo del hombre.

 

El cuerpo sin vida cayó al suelo y las llamas que lo envolvían desaparecieron al instante.

 

"Huff…"

 

Otro hombre que observaba se cubrió la boca tras ver la escena. Era el líder de su grupo quien acababa de morir.

 

Su líder podía tener más de cuarenta años, pero seguía siendo un artista marcial impresionante que había alcanzado el Reino Pico.

 

Incluso el jefe aprobaba su fuerza, sin embargo, fue asesinado sin esfuerzo por un joven que apenas parecía tener veinte años…

 

¿Qué es esto… qué demonios?

 

El hombre que se cubría la boca no podía comprender lo que acababa de suceder ante sus ojos.

 

Lo mismo les había pasado a los demás miembros del grupo.

 

El primero en ser capturado se convirtió en un montón de cenizas y los demás perdieron la vida con el cuello torcido.

 

No fue diferente para el líder del grupo.

 

Monstruo… esa cosa es un monstruo.

 

El hombre retrocedía lentamente mientras su cuerpo temblaba de miedo, pero fue detenido por el árbol justo detrás de él.

 

"Huff… huff…"

 

Su mente ya estaba llena con el temor a la muerte.

 

¿Es este mi fin? ¿Voy a morir aquí?

 

Las lágrimas comenzaron a recorrer por su rostro debido al miedo que lo invadía.

 

Tampoco podía escapar.

 

Sus piernas ya estaban destrozadas por las manos de ese monstruo.

 

Creak.

 

El monstruo que estaba agachado empezó a moverse.

 

¡Blaze–!

 

Las mismas llamas de antes aún envolvían el cuerpo del monstruo.

 

El hombre solo tuvo un pensamiento al ver esas llamas.

 

Es despiadado.

 

Era diferente del calor y la calidez usual que uno podía sentir con las Artes de la Llama.

 

De esa no se podía sentir nada.

 

Y eso solo aumentaba más su miedo.

 

¿Por qué esta llama no transmite nada?

 

No, sí había algo.

 

…Intención asesina.

 

Esas llamas eran como una gran masa de intención asesina.

 

¿Acaso no se podía sentir nada del joven porque toda su voluntad estaba contenida en sus llamas?

 

¿Cuánta intención asesina debía tener para que eso fuera posible?

 

¿Llama…? Espera, ahora que lo pienso…

 

Entonces, un pensamiento surgió en la mente del hombre.

 

La persona que actualmente era más famosa por usar Artes de la Llama.

 

Un artista marcial conocido como un joven héroe, y quien lideraría la generación actual.

 

Se decía que detuvo una emboscada en la Academia del Dragón Celestial y eliminó sin piedad a los enemigos de la Facción No Ortodoxa. El joven recibió un nuevo título después de eso, y se decía que usaba Artes de la Llama.

 

Ese título era conocido como–

 

"El Rey Menor del Infier–"

 

¡Crack–!

 

"…!"

 

El hombre intentó gritar por el dolor repentino que sintió, pero el joven le cubrió la boca tras aparecer de la nada.

 

Ni siquiera se dio cuenta de cuándo se acercó.

 

Sus cinco dedos estaban torcidos de forma antinatural.

 

"¡Ufgh…! ¡Ufh…!"

 

"Si vuelves a mencionar ese maldito título, incluso por accidente, te arrancaré el brazo la próxima vez. También lo haré si gritas ahora. Te soltaré en tres segundos y deberás quedarte en silencio, ¿Entendido?"

 

El hombre asintió rápidamente tras oír al joven hablar en un tono tranquilo.

 

De todos modos, no tenía otra opción.

 

El joven retiró su mano de la boca del hombre en silencio.

 

El hombre tuvo que permanecer callado a pesar del inmenso dolor que sentía.

 

Unos ojos rojos en llamas lo miraban desde arriba.

 

Luego, el joven se arrodilló, se puso a su nivel y habló.

 

"¿Cuál es tu objetivo aquí?"

 

Lo dijo del mismo modo que cuando torturó a los compañeros del hombre anteriormente.

 

Al oírlo, el hombre respondió con una voz temblorosa llena de miedo.

 

"…T-Tú… ya oíste la respuesta antes."

 

"¿Eso es todo?"

 

"S-Sí…"

 

El joven ya había obtenido todas las respuestas del primer hombre que capturó.

 

El grupo había sido enviado a seguir al séquito del Clan Tang y observar su ruta.

 

A pesar de ya haber escuchado la respuesta, el joven– no,

 

El Rey Menor del Infierno…

 

El hombre rechinaba los dientes mientras pensaba en la identidad del joven.

 

Se decía que se volvió más despiadado que nunca al enfrentarse a los enemigos de la Facción No Ortodoxa, y parecía que el rumor era cierto.

 

¡No lo creí porque seguía siendo un maldito mocoso…!

 

Sin embargo, el rumor no podía ser más que cierto.

 

¿Cómo podía alguien ser tan cruel? Era demasiado aterrador para venir de la Facción Ortodoxa.

 

Sus métodos de tortura eran tan horribles que el hombre casi se orinó del miedo.

 

Parecía que el joven estaba acostumbrado a torturar a sus enemigos con sus llamas.

 

¿Realmente era correcto que él fuera el futuro de la Facción Ortodoxa?

 

Mientras el hombre seguía mirando al Rey Menor del Infierno con pupilas temblorosas, el joven siguió hablando con el rostro inexpresivo.

 

"Siete en total. Uno de Segunda Categoría, cinco de Primera Clase y el último del Reino Pico."

 

"…!"

 

El hombre jadeó, sorprendido de que el joven adivinara el nivel de todos.

 

Tenía razón.

 

El líder del grupo estaba en el Reino Pico y los demás eran todos artistas marciales de Primera Clase. El propio hombre era un artista marcial de Segunda Categoría.

 

"Todos ustedes son bastante talentosos para ser bandidos. ¿Quiénes demonios son?"

 

"…Huff… Huff…"

 

"¿Cuál es su objetivo? ¿Hmm?"

 

"Tengo miedo de no saber la respuesta a e–"

 

¡Sizzle–!

 

"¡Urghh…!"

 

El joven agarró uno de los dedos rotos del hombre y empezó a quemarlo con llamas.

 

El hombre se sacudía violentamente por el dolor.

 

El joven preguntó una vez más luego de un rato.

 

"Lo preguntaré de nuevo."

 

"Y-Yo… no sé. Por favor… Por favor…"

 

"Está bien. Haré otra pregunta. ¿Tang Duk es el nombre de tu jefe?"

 

"¿¡Huff…!?"

 

El hombre se sobresaltó y tembló cuando el Rey Menor del Infierno pronunció el nombre de su jefe.

 

¿Cómo…?

 

¿Cómo sabía el Rey Menor del Infierno el nombre del jefe?

 

Solo se le conocía por su título en las Llanuras Centrales, y no debería haber nadie que supiera su verdadero nombre.

 

Al ver la reacción del hombre, el Rey Menor del Infierno comenzó a sonreír.

 

Esa sonrisa lo hacía ver aún más aterrador.

 

¿Cómo podía una persona tener una sonrisa tan aterradora?

 

"Así que no estaba equivocado. Es la cola de ese bastardo."

 

"…¿Cómo…?"

 

"¿Pero por qué? ¿Por qué se molesta en hacer algo tan innecesario cuando debería mantenerse oculto?"

 

"¿Acaso tú y mi jefe se conocen?"

 

"¿Nos conocemos?"

 

El Rey Menor del Infierno respondió con una sonrisa tras escuchar la pregunta.

 

"Supongo que sí. Somos tan cercanos que me dan ganas de sacarle los ojos."

 

"…"

 

Era obvio que no tenían una buena relación.

 

El hombre planeaba suplicar por su vida aprovechando su 'amistad', pero ese plan quedó completamente destruido.

 

Seguía forzando su mente mientras soportaba el dolor.

 

Su cabeza estaba llena de preguntas.

 

Ya le habían informado que el Rey Menor del Infierno del Clan Gu era parte del grupo del Clan Tang.

 

Sin embargo, aunque actualmente era el más famoso por su talento, el hombre no pensaba que representara un nivel de amenaza similar al del Rey del Veneno o el Señor del Clan Pe.

 

Entonces… ¿Cómo?

 

El hombre pensó en la piedra que tenía su líder.

 

Era un tesoro que borraba la presencia de quien lo sostenía y de quienes lo rodeaban.

 

Le dijeron que ni siquiera el Rey del Veneno podría detectarlos mientras no estuvieran muy cerca.

 

…Entonces, ¿Cómo nos encontró este bastardo?

 

¿Qué pasaba con el Rey Menor del Infierno que los encontró tras romper el efecto de la piedra?

 

¿Eso significaba que era más fuerte que el Rey del Veneno?

 

No, probablemente no.

 

Eso era imposible, incluso si era un genio generacional.

 

¿Tal vez tenía otra forma de encontrarlos?

 

"Puedo escuchar tu cerebro trabajando desde aquí."

 

"…!"

 

¡Crack–!

 

"¡Urgh!"

 

Otro dedo fue torcido.

 

Ya estaba roto antes, así que dolía mucho más.

 

"¿P-Por qué?"

 

"Ah, lo siento, es una costumbre. Tengo el hábito de romper partes del cuerpo mientras hablo. No es precisamente fácil de corregir."

 

Esa respuesta no debería haber salido con una sonrisa.

 

¿Tiene el hábito de torturar?

 

¿Este bastardo… realmente es de la Facción Ortodoxa?

 

El hombre solo estaba más confundido.

 

"Estos malditos bandidos son anormalmente fuertes. ¿Siempre fue así?"

 

"…"

 

"Oh, no te lo pregunto a ti, así que no necesitas responder."

 

La espalda del hombre empezó a empaparse en sudor mientras el Rey Menor del Infierno seguía hablando.

 

Su voz sonaba como si aún no hubiera pasado la pubertad y su tono era mucho más suave que la primera vez que apareció, pero el hombre lo sabía.

 

Su voz actual tenía intención asesina mezclada.

 

"Para ser honesto, no me interesaban mucho sus objetivos. Era obvio desde el principio, después de todo."

 

Eso significaba que planeaba matar al grupo desde el principio.

 

Entonces, ¿Por qué…? ¿Por qué se molestó en torturar a todos por respuestas?

 

"Solo tenía que elegir a uno. Uno que se asustara fácilmente, uno que pudiera usar su cerebro, y uno que me escuchara."

 

"…"

 

"¿Quieres vivir?"

 

El hombre cerró la boca tras oír al Rey Menor del Infierno.

 

¿Quiero vivir? Por supuesto que sí.

 

Sin embargo, el hombre no podía evitar sentirse nervioso al recibir la pregunta de parte del Rey Menor del Infierno.

 

"No volveré a preguntártelo. Responde."

 

"Y-Yo quiero… quiero vivir."

 

El hombre no quería morir quemado vivo, así que tuvo que responder.

 

El Rey Menor del Infierno asintió al escuchar su respuesta.

 

"Oh, por cierto, esta es una pregunta personal. ¿A cuántas personas dejaste ir cuando te suplicaron por su vida?"

 

"…!"

 

"Me alegra que me hayas dado la respuesta con tu silencio. Eso basta. Al menos así no me sentiré mal."

 

El hombre creía que iba a morir de todos modos por su pasado, pero el Rey Menor del Infierno no hizo nada especial a pesar de su respuesta.

 

¿Eh? ¿De verdad va a dejarme ir así?

 

El hombre se sintió aliviado, pero notó un problema.

 

¿Esto realmente… es estar vivo?

 

Ya no podía caminar porque sus piernas estaban destruidas, y una de sus manos estaba completamente rota.

 

No sabía si su mano podría sanar, pero sabía que ningún médico sería capaz de curar sus piernas.

 

El hombre se dio cuenta de que ya no podría vivir una vida normal.

 

Cuando el alivio se transformó lentamente en desesperación, el Rey Menor del Infierno le agarró del cuello.

 

¿Eh? ¿No dijo que podía viv–?

 

"Lo diré ahora. Sopórtalo. No sé ser amable ni suave como el Demonio Celestial."

 

"¿Demonio Celestial? ¿Qué quieres decir con eso? ¡T-Tú claramente dijiste que podría vivir…!"

 

"Te dejaré vivir. Claro que sí. ¿Cómo trabajarías si no?"

 

Entonces el hombre pudo verlo.

 

Los ojos rojos del Rey Menor del Infierno comenzaron a volverse violetas por alguna razón.

 

El color era tan hermoso que el hombre no pudo evitar seguir mirándolo, como si estuviera hechizado, a pesar de estar en una situación aterradora.

 

Mientras seguía mirando esos ojos violetas, el Rey Menor del Infierno habló.

 

"¿Cuál es tu nombre?"

 

"Y-Yo soy Jul Bok."

 

"Jul Bok, bien. Solo tienes un trabajo. Regresa con tu jefe e infórmale todo lo que pasó."

 

Justo cuando el hombre se confundía al escuchar esa orden,

 

Flinch.

 

"…!"

 

Sintió que algo estaba entrando en su Dantian.

 

Algo muy pequeño había entrado en su cuerpo.

 

¡Swoosh–!

 

"¡¡Ugh!!"

 

Se expandió instantáneamente dentro de su cuerpo y se asentó en su Dantian.

 

Y eso no fue todo.

 

Después de apoderarse completamente de su Dantian, salió de ahí y se clavó en su corazón.

 

"¡Urghhh… Aghhhh!"

 

El hombre sintió una cantidad inmensa de dolor durante el proceso.

 

Fue mayor que cualquier dolor que Jul Bok hubiese sentido en su vida.

 

¿El Rey Menor del Infierno estaba mintiendo y planeaba torturarlo y matarlo después de todo?

 

Jul Bok creyó que ese era el caso.

 

No había otra explicación para ese dolor.

 

Yo… No quiero morir…

 

Se aferró aún más a la vida.

 

Jul Bok quería vivir.

 

Eso era exactamente lo que Gu Yangcheon también sentía.

 

Eso era lo que significaba convertirse en un Humano Demoníaco.

 

Uno debía tener algo que deseara desesperadamente, ya fuera vivir o vengarse.

 

Sin eso, no se podría sobrevivir al proceso de Demonificación.

 

Claro que, si fuera el Demonio Celestial de la vida pasada de Gu Yangcheon, ella habría usado un método mejor, pero Gu Yangcheon no tenía intención de hacer lo mismo.

 

Ni siquiera era capaz, para empezar.

 

Esta era la segunda vez después de Namgung Cheonjun.

 

Gu Yangcheon se dio cuenta en solo dos intentos.

 

El Demonio Celestial tenía un control increíble para poder convertir a alguien en un Humano Demoníaco sin que sintiera dolor.

 

Gu Yangcheon no sabía por qué ella se molestaba en hacer eso, pero no pensaba hacer lo mismo.

 

No era necesario con bastardos como estos.

 

No tenía planes de mostrar piedad a quienes se interpusieran en su camino.

 

El Rey Verde fue uno de los Humanos Demoníacos más crueles en su vida pasada.

 

Sus subordinados no eran diferentes.

 

No solo jugaban con la vida de los civiles, sino que también cometieron incontables atrocidades como Humanos Demoníacos.

 

Gu Yangcheon pudo ver que el bastardo frente a él no era diferente de esos Humanos Demoníacos de su vida pasada, al ver cómo reaccionó antes.

 

Sin embargo, no planeaba juzgarlo.

 

Él también fue un Humano Demoníaco en su vida pasada, y también había quitado muchas vidas.

 

Esto simplemente era desquitarse con el hombre. No tenía excusa por sus pecados del pasado.

 

Después de un rato, empezó a ocurrir un cambio en el hombre llamado Jul Bok.

 

No era un gran cambio, pero Gu Yangcheon lo notó de inmediato.

 

Qi Demoníaco se había asentado correctamente en el Dantian y el corazón del bastardo.

 

Jul Bok se había convertido en un Humano Demoníaco gracias a Gu Yangcheon. Gu Yangcheon frunció el ceño al ver la escena.

 

Apenas logró resistir porque era de Segunda Categoría.

 

Cualquier persona que no tuviera un nivel lo suficientemente alto habría explotado y muerto al no poder soportar el Qi Demoníaco.

 

Gu Yangcheon notó la voluntad de sobrevivir de Jul Bok y su nivel apenas suficiente cuando lo vio por primera vez.

 

Por eso lo eligió como su objetivo desde el principio.

 

Había un límite para cuánto control podía tener Gu Yangcheon si convertía a alguien de Primera Clase o del Reino Pico en un Humano Demoníaco.

 

Como mucho, podría haberles puesto una Atadura o hacer que no pudieran traicionarlo.

 

Un artista marcial del Reino Fusión habría sido imposible de domar para Gu Yangcheon.

 

Con todo eso dicho, Jul Bok era el objetivo perfecto para Gu Yangcheon.

 

Al notar el cambio en su cuerpo, Jul Bok miró a Gu Yangcheon con una expresión de asombro.

 

Se dio cuenta de que su cuerpo estaba cambiando tras convertirse en Humano Demoníaco.

 

Sus piernas rotas empezaron a moverse.

 

Aunque no estaban completamente curadas.

 

El Qi Demoníaco apenas mantenía los huesos destrozados de sus piernas.

 

Gu Yangcheon se puso de pie al ver la escena. Puede que tuviera una expresión calmada, pero por dentro estaba sorprendido.

 

¿Eso también era posible?

 

Sabía que era posible hacer algo así usando el Qi del Demonio Celestial, pero no sabía que su propio Qi Demoníaco también podía hacerlo.

 

¿Era posible porque Jul Bok estaba en un nivel más bajo? ¿No debería ser al revés?

 

Supongo que tendré que investigar esto más adelante.

 

Esto ya era suficiente por ahora.

 

El objetivo actual de Gu Yangcheon no era curar el cuerpo de alguien usando Qi Demoníaco.

 

Después de levantarse, miró al hombre y habló.

 

"Tienes un solo trabajo."

 

Jul Bok lo miró con ojos temblorosos.

 

Sus pupilas estaban llenas de miedo y asombro.

 

Gu Yangcheon no lo entendía.

 

¿Por qué todos los que se convertían en Humanos Demoníacos tenían esa mirada en los ojos?

 

Al menos él mismo nunca miró al Demonio Celestial de esa forma.

 

No sabía la respuesta, ni le importaba.

 

No se molestaba en pensar en cosas así.

 

En cambio, solo miró a su alrededor, asegurándose de que no hubiera nadie más cerca.

 

Gu Yangcheon continuó hablando mientras miraba a Jul Bok desde arriba.

 

"Entrégale este mensaje a Tang Duk."

 

Ese era el objetivo de Gu Yangcheon.

 

Jul Bok agudizó el oído.

 

Entonces,

 

"…Deja de hacer estupideces y muéstrate… ¿Fracaso?"

 

Entregó el mensaje exacto a Tang Duk.

 

¡Crack–!

 

Cuando Tang Duk apretó el puño, su silla de piedra se hizo pedazos de inmediato.

 

Entonces, los que estaban cerca empezaron a temblar por la intensa energía que emanaba de Tang Duk.

 

El enorme hombre de cabello verde oscuro, el que gobernaba a los bandidos en la Montaña Fantasma, el mismo jefe, Tang Duk, preguntó nuevamente tras escuchar al subordinado frente a él.

 

"¿Ese mocoso dijo que me dieras ese mensaje?"

 

"…S-Sí… Jefe."

 

Tang Duk miró al bastardo que le entregó el mensaje.

 

¿Es Jul Bok?

 

Era el subordinado del bastardo llamado Godong, quien alcanzó el Reino Pico el año pasado.

 

Tang Duk frunció el ceño al pensar en Godong.

 

Lo había enviado para observar el camino que tomaría el Señor del Clan Tang,

 

Y sin embargo, solo este bastardo regresó con vida mientras los demás murieron.

 

Hah–

 

Además, también perdieron el tesoro.

 

Tang Duk solo pudo soltar una risa hueca por lo absurdo de la situación.

 

Crack.

 

Después de reírse un poco, Tang Duk se levantó, agarrando una lanza más grande que él.

 

"…No solo conoce mi nombre, sino que incluso se burla de mí, ¿Eh?"

 

El Rey Menor del Infierno.

 

Qué bastardo tan interesante.

 

Tang Duk sonrió al mirar a Jul Bok.

 

Los demás bandidos temblaban de miedo al ver su sonrisa.

 

"Jul Bok."

 

"Sí… Jefe."

 

"Todo está bien y eso, pero–"

 

Aún había un misterio.

 

"¿Cómo es que lograste escapar?"

 

"…¿Jefe…?"

 

Las pupilas de Jul Bok empezaron a temblar tras escuchar a Tang Duk.

 

"Si tus hermanos no pudieron cumplir la misión y murieron, debiste haber muerto con ellos. Hijo de puta."

 

"¡Jefe…! ¡Espera…!"

 

"¿Y aun así regresas tan descaradamente? Qué valiente eres."

 

Tang Duk habló entre gruñidos y levantó a Jul Bok por el cuello.

 

Jul Bok no era un hombre pequeño, pero se veía diminuto comparado con el gigante llamado Tang Duk.

 

"Maldito bastardo … No tengo uso para un inútil."

 

"¡P-Por favor, Jefe! ¡Por favor… por favor!"

 

Jul Bok suplicaba por su vida como si hubiera perdido la razón, pero Tang Duk apretó más fuerte sin vacilar pese a sus ruegos.

 

"Ve a saludar a tus hermanos en el más allá, bastardo inútil."

 

¡Crack–!

 

Con un sonido brutal, Jul Bok murió con el cuello torcido.

 

Entonces ocurrió.

 

¡Woong–!

 

"…¿Hmm?"

 

Comenzó un cambio en el cuerpo de Jul Bok que Tang Duk sostenía.

 

Era una vibración.

 

Debería estar muerto, a juzgar por sus pupilas sin vida.

 

¿Qué estaba pasando?

 

"¿Qué demonios…?"

 

Justo cuando Tang Duk comenzaba a confundirse,

 

¡Pow–!

 

Un sonido explosivo salió del cuerpo de Jul Bok, y una increíble cantidad de sangre brotó de su boca, empapando a Tang Duk.

 

"…"

 

Los demás corrieron rápidamente y le ofrecieron algo para limpiarse, pero Tang Duk simplemente usó su enorme mano para limpiarse la cara.

 

Entonces pensó.

 

No entendía por qué Jul Bok repentinamente escupió sangre tras morir, pero sentía que sabía una cosa.

 

Era una provocación del bastardo que lo envió.

 

Hehehe…

 

Tang Duk comenzó a reírse a carcajadas mientras se limpiaba la sangre.

 

¡Hahahahaha–!

 

Después de reír por un rato, Tang Duk habló con una sonrisa tan grande que parecía que su boca iba a romperse.

 

"¿El Rey Menor del Infierno, era, cierto?"

 

Ese bastardo que envió a Jul Bok. Ese mocoso se atrevió a darme una orden.

 

Tang Duk empezó a moverse con ese pensamiento.

 

No parecía tener intención de limpiarse más de la sangre manchada en su ropa.

 

Normalmente habría sido más cauteloso.

 

Pero supongo que no tengo otra opción si me provocan así.

 

Tang Duk susurró tranquilamente con una sonrisa.

 

"Preparen sus armas."

 

En cuanto habló, los demás liberaron de inmediato su Qi de Combate.

 

El Qi de Combate y la intención asesina más claros y densos de todos ellos, provenían, como era de esperarse, de nada menos que de Tang Duk.

 

******************

 

Giré la cabeza tras notar un cambio en medio de la comida.

 

"Ah."

 

"¿Pasa algo?"

 

Wi Seol-Ah ladeó la cabeza, confundida, mientras me ponía comida en la cuchara.

 

Al verla, negué ligeramente con la cabeza y me llevé otra cucharada a la boca.

 

"No es nada."

 

Namgung Bi-ah y Moyong Hi-ah también me miraron raro al ver mi reacción, pero no tenía intención de decirles nada.

 

En cambio, chasqueé la lengua por dentro repetidamente.

 

Tsk, tsk.

 

Le prometí que le dejaría vivir.

 

Solo había una razón para reaccionar así.

 

De inmediato me di cuenta de que el bastardo llamado Jul Bok había muerto.

 

Fue porque se activó la Atadura que le puse.

 

La Atadura no era solo para asegurar que entregaría mi mensaje a Tang Duk.

 

La hice de forma que se activaría si Jul Bok moría a manos de Tang Duk.

 

Haría que su corazón explotara y que vomitara sangre.

 

A juzgar por esto, parecía que Jul Bok fue asesinado por Tang Duk.

 

Yo no lo maté personalmente.

 

Sin embargo, esto me hizo aprender que Tang Duk está más que dispuesto a matar a su propio subordinado.

 

Debe de estar muy enojado.

 

A juzgar por su personalidad explosiva, creía que se enfurecería bastante.

 

Ya lo tenía todo preparado.

 

Incluso si Tang Duk no viniera en persona como había planeado, pude poner en marcha mi plan rápidamente.

 

Por ahora, solo tenía que esperar.

 

"¿Quieres… beber agua?"

 

"Claro."

 

Miré alrededor mientras bebía el agua que Namgung Bi-ah me sirvió.

 

Seguíamos en el mismo bosque, pero había un cambio.

 

Ahora estábamos en territorio de Sichuan.

 

Justo cuando comenzaba el verano, después de haber iniciado nuestro viaje a Sichuan, finalmente habíamos entrado a su territorio.

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