Capítulo 421: Río Del Dragón Azul (2)

Río Del Dragón Azul (2)

 

Ya habían pasado dos meses desde que comenzó mi viaje a Sichuan.

 

Partimos desde Henan, atravesamos montañas, y aún nos faltaba más de la mitad del camino hasta llegar a Sichuan.

 

Actualmente teníamos un gran río frente a nosotros.

 

Era el río más grande que había visto desde mi regresión.

 

Se llamaba el Río del Dragón Azul.

 

Este río solía ser un campo amplio de llanuras hace unas generaciones, pero se decía que fue transformado artificialmente en un río por el alboroto de un Demonio Blanco durante la Guerra del Demonio Sangre.

 

Solo de escucharlo me preguntaba cómo un Demonio pudo crear todo un río, pero si pensaba en el hecho de que el Palacio Negro estaba ubicado dentro de un bosque lleno de niebla, podía entender que los Demonios Blancos eran capaces de cambiar el terreno y afectar las áreas a su alrededor.

 

¿Cómo fue posible que lograran derrotar a algo así?

 

Se me helaban los dientes al pensar en las personas que mataron a semejantes Demonios por su cuenta.

 

Fue el Anciano Shin quien mató al Dragón de la Niebla, un Demonio responsable de cubrir toda una región con niebla.

 

El Río del Dragón Azul, que transformó una gran llanura en un río, fue derrotado por el Veneno Celestial.

 

Fue uno de los cinco héroes que detuvieron al Demonio de Sangre, y fue respetado por muchos al devolver al Clan Tang a la Facción Ortodoxa.

 

Unos locos.

 

Actualmente solo aparecen Demonios Azules después de la desaparición del Demonio de Sangre.

 

Sin embargo, pronto aparecerán los Demonios Rojos una vez que la Demonio Celestial haga su aparición.

 

Entonces, el mundo se convertirá en un caos.

 

Ni siquiera los artistas marciales del Reino Pico son lo suficientemente fuertes para derrotar a un Demonio Rojo por sí solos.

 

Así de poderosos eran los Demonios Rojos, entonces ¿Cómo demonios los héroes del pasado fueron capaces de derrotar a los Demonios Blancos por su cuenta?

 

No importa cuánto lo piense, suenan al menos que eran poderosos como los Tres Venerables, no si no más.

 

Yo pensaba que el Anciano Shin era solo un viejo con una personalidad desagradable, pero en realidad era un gran héroe del pasado.

 

Incluso la Flor de Ciruelo Celestial del Monte Hua era la segunda persona más respetada después del Anciano Shin, lo que muestra lo respetado que es.

 

Así que, ¿Puedes salir ya de una vez…? ¿Cuánto más piensa dormir?

 

Desde que el Anciano Shin me ayudó en la Academia del Dragón Celestial, guardó silencio como si se hubiera quedado dormido otra vez.

 

La bestia dentro de mi cuerpo también parecía haberse calmado, ya que permanecía en silencio.

 

…Tsk.

 

En su momento deseaba con ansias la soledad, pero ahora me molestaba estar solo.

 

Mientras organizaba mis pensamientos observando el río, alguien se acercó y empezó a hablarme.

 

"Joven Maestro Gu."

 

Era Moyong Hi-ah.

 

"Deberías empezar a moverte pronto–"

 

"Ah, sí, ya voy."

 

Moyong Hi-ah se detuvo a la mitad de lo que iba a decir cuando vio a Tang Duk detrás de mí.

 

Parecía que le costaba acostumbrarse a ese gigante.

 

O tal vez estaba asustada por su cara aterradora.

 

Despues de todo, Tang Duk tenía una cara intimidante que rivalizaba con la mía.

 

"Oh, por cierto."

 

"¿Sí?"

 

"¿Dónde está tu tía?"

 

"Ah… Me dijo que se subiría al barco primero."

 

"…"

 

Me llevé la mano a la frente tras escuchar a Moyong Hi-ah.

 

Se suponía que era mi escolta, y aun así se subió al barco antes que yo.

 

Qué absurdo.

 

Moyong Hi-ah también parecía haberse dado cuenta del problema, ya que no tenía buena expresión.

 

Me habló.

 

"Lo siento… Mi tía es…"

 

"No es algo por lo que tú debas disculparte, así que no te preocupes."

 

"…Está bien."

 

A pesar de que le dije que estaba bien, su expresión no mejoró.

 

Era comprensible. Si un familiar mío hiciera algo así, tampoco podría levantar la cabeza por la vergüenza.

 

Le di unas palmaditas suaves en la cabeza a Moyong Hi-ah y le hablé.

 

"Ve tú primero. Yo iré de inmediato."

 

"…Entendido."

 

Moyong Hi-ah sonrió levemente y comenzó a dirigirse hacia el barco tras escuchar mi respuesta.

 

Sí, un barco.

 

Tenía que montar un barco para cruzar el Río del Dragón Azul.

 

Hmm.

 

No viajamos en barco cuando fuimos de Shanxi a Sichuan, pero ahora sí tenía que subir a uno…

 

Supongo que no me queda de otra.

 

Fue una decisión tomada por el Rey del Veneno, y sabía que era el método más rápido de viaje, pero aun así me molestaba tener que montar un barco.

 

Giré ligeramente hacia atrás y le hice una pregunta a Tang Duk.

 

"Oye."

 

"…"

 

Tang Duk me miró.

 

No dio respuesta.

 

Era porque no podía usar su voz sin mi permiso.

 

"¿Dónde están tus malditos subordinados escondidos? Es una orden, respóndeme."

 

Cuando le di la orden, Tang Duk empezó a hablar mientras le temblaban los labios.

 

"…Después del primer punto…"

 

"Así que es como dos horas después de que partamos. ¿Aún están escondidos allí?"

 

"…Sí…"

 

"¿Ya los habías ocultado ahí? Estabas bien preparado, eh."

 

Sonreí después de oír la respuesta de Tang Duk.

 

Los hombros de Tang Duk temblaron al escuchar el tono satisfecho en mi voz.

 

Me preguntaba cómo demonios pensaba emboscar a un grupo que incluía al Rey del Veneno y al Señor del Clan Pe, y parecía que ya sabía que íbamos a cruzar el Río del Dragón Azul.

 

Por eso escondió a sus subordinados de antemano, para poder emboscarnos desde todas las direcciones.

 

A juzgar por eso, parecía que confiaba en pelear sobre el agua.

 

Aunque en el río había Demonios, él igual los había preparado allí. ¿Tenía alguna solución para eso?

 

El Río del Dragón Azul estaba lleno de Demonios. Especialmente estaba plagado de Demonios con forma de pez, por lo que la gente común no podía viajar por ahí.

 

Era la razón por la cual el Rey del Veneno tomó esa decisión.

 

Era muy poco probable que fuéramos emboscados por otras personas, y era la forma más rápida de llegar a Sichuan desde donde estábamos.

 

Un artista marcial como el Rey del Veneno era más que capaz de lidiar con Demonios, y también teníamos otras formas de enfrentarlos como armas o tesoros, así que probablemente lo consideró un método de viaje seguro.

 

Sin embargo, Tang Duk planeaba aprovechar esto y emboscar al grupo.

 

Considerando que el Rey del Veneno tenía muchas cosas que proteger, incluida su hija, pelear sobre el río era peligroso para él.

 

Comencé a preguntarme algo.

 

¿Cómo diablos supo este bastardo?

 

Yo ya sabía desde hace unos días que el Rey del Veneno iba a tomar esa decisión, pero me preguntaba cómo lo supo él también, para prepararse tan temprano.

 

Además,

 

Era extraño que tuviera un tesoro.

 

El tesoro que tenían sus subordinados. Yo mismo lo recuperé y actualmente lo tenía en mi bolsillo.

 

Le pregunté a Tang Duk qué era, y dijo que era un tesoro activado por Qi que ocultaba la presencia del portador y de otras personas alrededor.

 

Era un tesoro que requería activación.

 

Era un objeto bastante costoso de poseer, pero era extraño que un bandido como Tang Duk tuviera algo así.

 

Ya fuera por la información o los recursos que tenía, algo no cuadraba.

 

"Oye."

 

"…"

 

Así que decidí preguntarle.

 

"El espía que tienes en el Clan Tang. ¿Quién es?"

 

"…!"

 

Los ojos de Tang Duk se abrieron de par en par al escuchar mi pregunta.

 

Lo confirmé al ver su reacción.

 

Así que este bastardo realmente tenía un espía.

 

Ya sabía que era demasiado extraño que tuviera tanta información, y parecía que había ocultado a un espía en el Clan Tang, tal como sospechaba.

 

Lo había mantenido en secreto todo este tiempo, ya que nunca le pregunté.

 

"¿Quién es? Dímelo."

 

Pero ahora que lo sabía, no le quedaba más opción que decírmelo.

 

"…Ough…"

 

Parecía que Tang Duk intentaba resistirse contra mi Atadura, pero la clavé profundamente en su corazón.

 

No podía liberarse de ella solo con fuerza de voluntad.

 

Como esperaba, los labios dudosos de Tang Duk comenzaron a abrirse.

 

"¿Oh?"

 

Me sorprendí ligeramente al escuchar a Tang Duk.

 

Un nombre inesperado salió de su boca.

 

Ahora me preguntaba cuán sorprendido debió haberse quedado ese espía cuando Tang Duk apareció conmigo como escolta.

 

Puede que el Rey del Veneno no notara a Tang Duk, pero estoy seguro de que esa persona sí.

 

Contuve la risa y empecé a caminar.

 

Había otro bastardo que debía matar en ese barco.

 

******************

 

La navegación comenzó tras medio día de preparación.

 

La preparación fue larga porque el prisionero debía ser puesto en el sótano y el barco tenía que estar completamente abastecido con comida y suministros suficientes para durar entre cuatro y siete días.

 

Gracias a la preparación que hicimos, pudimos tener un viaje bastante tranquilo en el barco.

 

"Woah…"

 

Wi Seol-Ah observaba el río con una expresión fascinada en la cubierta.

 

No pude evitar preguntarle por su reacción.

 

"¿Qué es lo que te fascina tanto?"

 

"¡Nos estamos moviendo sobre el agua!"

 

"Claro, es un barco después de todo."

 

"Wow…"

 

¿Eh? ¿Es su primera vez en un barco?

 

Ahora que lo pienso, no recordaba haber montado en barco con ella.

 

Tal vez por eso estaba tan fascinada. Debería llevarla a pasear en barco más seguido.

 

Verla disfrutar del paisaje con una sonrisa tan brillante, casi me hizo sonreír a mí también.

 

Sin embargo, Moyong Hi-ah, que estaba junto a Wi Seol-Ah, se quedó ahí, como ausente, y no se veía muy bien.

 

"¿Qué te pasa?"

 

"…No me siento muy bien."

 

"¿Eh? ¿Tienes mareo por el barco?"

 

"…Tal vez un poco."

 

Incliné la cabeza tras escuchar a Moyong Hi-ah.

 

Moyong Hi-ah podía estar en un nivel relativamente más bajo que los demás por su falta de entrenamiento, pero era sorprendente que una artista marcial de Primera Categoría se mareara por el movimiento del barco.

 

Parece que Moyong Hi-ah notó mis pensamientos, porque habló tras toser un par de veces con incomodidad.

 

"Me… enfermé bastante la última vez así. Así que, desde entonces, me siento así."

 

"¿Tan mal la pasaste como para desarrollar mareo cuando antes no lo tenías?"

 

"…No quiero recordar ese día."

 

"Oh… ya veo."

 

Parecía que realmente odiaba ese día, por la expresión en su rostro, así que no le pregunté más.

 

Entonces empecé a mirar a mi alrededor.

 

Cheol Jiseon se había metido adentro porque también se estaba mareando, y el Dragón del Agua se había ido a dormir.

 

Parecía que todos estaban optando por descansar, ya que no podíamos darnos el lujo de entrenar en un barco.

 

En cuanto a mí, aún podía entrenar un poco, ya que utilizar mi Arte Mental y caminar con ello ya era bastante exigente de por sí.

 

Aunque era un poco decepcionante no poder hacer entrenamiento físico.

 

Y en cuanto a Namgung Bi-ah…

 

No importaba dónde buscara, no la encontraba. Seguramente estaba dormida en algún lugar.

 

Y lo más probable era que estuviera dormida en mi habitación.

 

La dejé estar, ya que me rendí en intentar detenerla.

 

Realmente no importaba dónde durmiera, ya que antes apenas dormía por entrenar todo el tiempo.

 

Probablemente era mejor que todos aprovecharan este tiempo para descansar.

 

Faltaba poco.

 

Dentro de poco, íbamos a llegar al lugar que Tang Duk me había mencionado.

 

Estábamos a punto de encontrarnos con los bandidos que estaban esperando para emboscar este barco, y no me molesté en ordenar a Tang Duk que detuviera esta emboscada.

 

De hecho, no era algo malo.

 

Planeaba ayudar a detener la emboscada para luego poder hacerle una petición al Rey del Veneno.

 

Una emboscada sin Tang Duk no iba a representar una amenaza de por sí.

 

Ah, y por supuesto, era posible que los bandidos no iniciaran su ataque sin Tang Duk, así que también tuve eso en cuenta.

 

También podía aprovechar esta oportunidad para matar a esa rata que se escondía en el séquito del Clan Tang.

 

Crack–

 

Estiré ligeramente mi cuerpo.

 

Hmm…

 

Aún sentía algunos problemas en mi cuerpo.

 

Todavía sentía el retroceso de la pelea que tuve contra Tang Duk.

 

Normalmente, no habría usado mi cuerpo en estas condiciones, pero no podía darme ese lujo en un momento tan importante.

 

El Rey del Veneno, el Señor del Clan Pe, la Espada de la Ola Blanca, el Venerable Deshonrado y el Rey Oscuro estaban todos aquí.

 

Solo este grupo bastaba para borrar un clan, así que por lo menos, la seguridad de todos estaba asegurada.

 

Sin embargo, también era un gran momento para fingir que hice algo útil.

 

Mientras seguía organizando mis planes, sentí una presencia acercándose a mí.

 

"¡Joven Maestro Gu!"

 

Escuché una voz alegre y brillante.

 

Cuando me giré, vi a Tang Soyeol de pie con una sonrisa.

 

Tenía un bocadillo en la mano, y fruncí ligeramente el ceño al verla.

 

"¿Qué es eso?"

 

Cuando pregunté con un tono cauteloso, Tang Soyeol puso una expresión triste.

 

"Te lo traje para ti… ¿Qué pasa con esa cara…?"

 

"¿Eso tiene veneno?"

 

"¡Claro que no…! ¿¡Realmente crees que solo como cosas con veneno!?"

 

"¿De verdad?"

 

"¡Sí!"

 

Tang Soyeol gritó en un tono frustrado.

 

¿Realmente estoy tan equivocado? Juraría que solo la he visto comer y beber té venenosos.

 

Ahora me sentía un poco incómodo.

 

"Si no es así, entonces lo siento."

 

"…Hmph…"

 

Acepté el bocadillo de Tang Soyeol, quien se puso a hacer pucheros y desvió la mirada.

 

Sorprendentemente, realmente parecía no tener veneno.

 

Eso sí que fue una sorpresa viniendo de ella.

 

Cuando la miré con asombro, Tang Soyeol hizo una expresión frustrada.

 

Lo gracioso fue que Wi Seol-Ah vino corriendo por el bocadillo justo después de que yo lo comí.

 

Tal vez…

 

¿Confirmó que no tenía veneno?

 

¿Usándome a mí? Wow.

 

¿Cuándo se volvió tan astuta?

 

No me ofendió en realidad, más bien me sorprendió.

 

Luego, Tang Soyeol, que estaba repartiendo bocadillos, esta vez se acercó a Tang Duk y le ofreció uno.

 

"También deberías comer esto."

 

"…"

 

Los hombros de Tang Duk temblaron al escuchar a Tang Soyeol hablar con una sonrisa tan brillante.

 

Para él, ella era una pariente de sangre del enemigo que más quería matar, así que probablemente estaba lleno de ira.

 

Justo cuando estaba a punto de acercarme para separarlos por el posible peligro,

 

¡Woong–!

 

"…!"

 

Rápidamente giré la cabeza y miré hacia el río.

 

Sentí una extraña sensación. Salté ligeramente y me paré en la cubierta.

 

"¿Joven Maestro Gu…?"

 

Por mi movimiento repentino, Tang Soyeol y todos los que estaban cerca me miraron.

 

Había alguien que no lo hizo, y era Wi Seol-Ah.

 

Ella también miraba fijamente el río con los ojos bien abiertos.

 

No era el único que había sentido esa sensación.

 

¿Qué está pasando?

 

Observé el río con las pupilas temblorosas.

 

El barco seguía avanzando y el río parecía igual que antes, pero claramente se sentía algo diferente.

 

¡Thud!

 

¡Slam!

 

Alguien vino corriendo desde atrás.

 

Woo Hyuk y Namgung Bi-ah aparecieron al mismo tiempo, y Cheol Jiseon llegó después de ellos respirando agitadamente.

 

¿También lo sintieron?

 

Otros artistas marciales nos miraban sin poder entender qué estaba pasando, pero yo solo seguía mirando el río.

 

La presencia se hizo más grande.

 

Solo entonces, pareció que los demás artistas marciales también notaron un cambio, porque todos empezaron a moverse.

 

Al principio, pensé que esta presencia venía de la emboscada que estaba esperando.

 

Nos estábamos acercando a ese punto, y no habría sido raro que nos atacaran en cualquier momento.

 

Sin embargo, esto era algo diferente.

 

Una presencia de esta magnitud no podía provenir de un humano.

 

¿Eh…?

 

Empecé a ver algo cuando me concentré.

 

Una sombra comenzó a aparecer debajo del barco.

 

El tamaño de la sombra era de unos dos o tres metros de ancho. Al verla, un artista marcial gritó en voz alta,

 

"¡Es un Demonio!"

 

Los demás se sorprendieron.

 

Ningún Demonio era capaz de acercarse al barco del Clan Tang. Ellos tenían un tesoro que evitaba la aproximación de cualquier Demonio.

 

Solo gracias a ese tesoro, el Clan Tang podía viajar por el Río del Dragón Azul.

 

Sin embargo, las sombras que se reunían a nuestro alrededor eran todos Demonios Verdes y Azules.

 

Todos en el barco parecían confundidos por el evento inesperado, pero en realidad no era una gran emergencia.

 

Eran solo Demonios Azules, y había muchos artistas marciales de alto nivel en el barco, así que podíamos defendernos fácilmente a pesar de estar combatiendo sobre el agua.

 

Sin embargo.

 

"…Estaba equivocado."

 

No podía evitar que mis ojos temblaran.

 

No era algo tan simple como eso.

 

Apreté los labios.

 

El número de Demonios Azules que se acercaban parecía amenazante, pero en realidad no lo era, como ya había dicho.

 

El problema era otro.

 

Poco a poco lo sentía.

 

El verdadero peligro que se acercaba, oculto entre esos bastardos.

 

Cargué mi Qi al sentir su presencia.

 

Algo andaba mal.

 

Eso no debería estar pasando.

 

¿Por qué…?

 

Empecé a verlo debajo del barco.

 

Debajo de la cantidad respetable de Demonios, vi algo mucho más gigantesco moviéndose.

 

Una vez que los demás también notaron la gran presencia, su ambiente cambió.

 

Parecía que todos lo habían notado para ese momento.

 

Mucha gente comenzó a gritar en voz alta preguntando qué era esa cosa, pero yo sabía exactamente qué era.

 

Y precisamente por eso, me costaba más creerlo.

 

A diferencia de los Demonios actuales que habitaban nuestro mundo, antes existían verdaderos Demonios que vivieron hace unas generaciones.

 

Todos se extinguieron a estas alturas, y solo volverían a aparecer dentro de cuatro o cinco años.

 

Eran monstruos contra los que solo los artistas marciales del Reino Fusión o superiores podían pelear.

 

Demonios Rojos que solo salían de la Puerta Roja de Demonios.

 

Podía sentir la enorme presencia que había desaparecido durante generaciones, bajo las aguas del río.

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