Capítulo 426: Ha Pasado un Tiempo (1)

Ha Pasado un Tiempo (1)

 

Afortunadamente, el Rey del Veneno aceptó mi petición.

 

Realmente no tenía una razón para rechazarla, ya que solo le pedí ver el lago.

 

Claro que puso una expresión confundida, preguntándose por qué le había hecho una petición tan extraña, pero al final me dio el visto bueno.

 

Sin embargo, como todo el lago era considerado un tesoro del Clan Tang, dijo que enviaría un guía también, especialmente porque podía ser muy peligroso.

 

Peligroso, mi trasero. Claramente es para vigilarme.

 

No esperaba tanto.

 

Se volvió un fastidio, pero era lo que anticipaba.

 

¡Creak–!

 

Al notar mi presencia, Tang Duk, que estaba sentado junto a una pared, empezó a levantarse.

 

Fue porque le ordené que se quedara sentado sin hacer nada.

 

"Siéntate."

 

"…"

 

Tang Duk se sentó de nuevo tras oír mi orden.

 

"¿No ocurrió nada extraño, cierto?"

 

–No.

 

"¿Viste algún Demonio?"

 

–No.

 

Solté una leve risa al oír la respuesta de Tang Duk.

 

Durante el día había un montón de Demonios, pero no aparecía ninguno por la noche.

 

Así que fue un caso especial aquella vez.

 

¿Por qué ocurrió una situación así?

 

Aún no podía obtener una respuesta.

 

Si tuviera que decir algo…

 

Probablemente fue por el Demonio Rojo.

 

La Serpiente de Agua Roja. Seguro fue ese bastardo el que lo causó todo.

 

"Hmm…"

 

Como siempre, nada salía según mis planes.

 

Qué broma.

 

Reprimí mi ira y observé a Tang Duk.

 

Todavía parecía lleno de molestia.

 

A pesar de haberse convertido en un Humano Demoníaco y en mi esclavo, esa desagradable personalidad suya no desaparecía.

 

Claro que también era posible que no estuviera completamente afectado por mi Qi Demoníaco, ya que era un artista marcial del Reino Fusión.

 

Después de todo, recordaba que no pudo hacer ni decir nada contra el Demonio Celestial cuando era el Rey Verde en mi vida pasada.

 

Sonreí de lado tras mirarlo un rato.

 

"Pareces bastante frustrado."

 

"…"

 

"Deberías haber llevado una buena vida."

 

Crack.

 

Tang Duk apretó los dientes y me lanzó una mirada afilada, pero fue suprimido de inmediato por mi control sobre su cuerpo.

 

"Ugh…"

 

El dolor en su pecho debía ser tremendo, pues comenzó a babear.

 

Pensé para mí mismo al verlo.

 

Así que no elige la muerte, ¿Eh?

 

A pesar de ser humillado así, Tang Duk aún no optaba por la muerte.

 

¿Era por su deseo de venganza?

 

¿O porque temía morir?

 

Fuera cual fuera la razón, no era algo malo para mí. Sin embargo, lo habría dejado ir si eso era lo que quería.

 

Oh claro, cuando digo 'dejarlo ir', me refiero a dejarlo matarse.

 

Era cierto que la fuerza de Tang Duk me sería útil en el futuro, pero no tenía planes de impedir que se quitara la vida.

 

Además, ese bastardo no parecía tener intención de morir ahora mismo.

 

Probablemente estaba buscando una oportunidad para escapar de mi control.

 

Juzgando por eso, era un tipo bastante determinado.

 

Este bastardo es una cosa… pero tengo otro asunto que atender antes de llegar al Clan Tang.

 

El espía que Tang Duk envió al grupo del Clan Tang.

 

Me preguntaba cuándo debería deshacerme del bastardo…

 

Al pensar en él, una idea útil pasó por mi mente.

 

De repente, se me ocurrió un buen plan.

 

******************

 

Han pasado cuatro días desde que empezamos a navegar por este río.

 

Originalmente habría tomado dos días cruzarlo, pero tuvimos que tomar una ruta más segura debido al incidente con el Demonio, y por eso está tardando más de lo esperado.

 

Ya habríamos llegado al Clan Tang si eso no hubiera pasado…

 

Después de finalmente tocar tierra, abordamos los carruajes preparados por el grupo del Clan Tang.

 

Estos carruajes no venían directamente del Clan Tang, sino que fueron preparados tanto por el Clan Tang como por el Clan Pe.

 

¿Será porque llegamos a Sichuan, más exactamente a las tierras del Clan Tang?

 

Se sentía como si los carruajes fueran mucho más grandes que antes.

 

Probablemente significaba que estábamos en una zona segura ahora. Era algo bueno.

 

"¿Crees que tardaremos unos cinco días?"

 

Moyong Hi-ah, que estaba en el mismo carruaje que yo, movía lentamente su abanico mientras hablaba.

 

"Debería ser algo así. Quizás cuatro días si acortamos."

 

"…Estás bastante familiarizado, ¿No?"

 

"Solo es una corazonada."

 

Me recosté en el asiento y cerré los ojos.

 

Sabía brevemente cuánto tardaría porque ya había viajado a esta tierra muchas veces en mi vida pasada. Sabía que solo nos quedaban unos días más para llegar al Clan Tang.

 

Podríamos llegar antes si nos apurábamos, pero probablemente no ocurriría. Incluso si el Rey del Veneno estaba impaciente, quería asegurarse de que todo saliera bien.

 

De todos modos, no tenía nada que hacer, así que me venía bien.

 

…Bueno, honestamente no es que me sobrara tiempo, pero ¿Qué podía hacer?

 

Al menos tenía que fingir que estaba en paz.

 

Cuando cerré los ojos para descansar, Moyong Hi-ah volvió a hablar.

 

"Joven Maestro Gu."

 

"¿Hmm?"

 

"¿Qué crees que pasará de ahora en adelante?"

 

"Hmm…"

 

Miré a Moyong Hi-ah abriendo levemente los ojos.

 

Moyong Hi-ah solía hacerme esa pregunta de vez en cuando.

 

La razón era simple, si se la hacía a otras personas…

 

…No sé.

 

¿No lo sé?

 

¡No estoy seguro!

 

Todos le daban la misma respuesta y solo Cheol Jiseon habría sido un candidato para mantener una conversación con Moyong Hi-ah.

 

Sin embargo, parecía que Moyong Hi-ah se estaba distanciando de Cheol Jiseon.

 

Cuando le pregunté por qué lo trataba tan fríamente, respondió con una expresión bastante fría.

 

–No me gustan los perdedores.

 

"…"

 

Por alguna razón, me sentí ofendido al oír esa fría respuesta.

 

Cheol Jiseon no estaba presente cuando lo dijo, pero aun así me sentí mal por él, así que le di un dulce después.

 

Sin embargo, hizo una expresión de asco cuando de repente le di algo de comer.

 

–¿Por qué…? ¿¡Vas a lanzarme a algún lado otra vez!?

 

Después de decir eso, salió corriendo.

 

Lo hice con buena intención, pero ese bastardo…

 

Le diré a Pe Woocheol que lo entrene más.

 

Parecía que Cheol Jiseon estaba llevando una vida demasiado cómoda últimamente porque yo lo molestaba menos.

 

Era necesario recordarle su lugar.

 

¿Hmm? ¿Que si somos amigos?

 

Los amigos deben pelearse.

 

Aunque claro, siempre soy yo quien lo molesta unilateralmente.

 

Dejemos los pequeños detalles de lado.

 

En fin, Moyong Hi-ah solo podía hablar conmigo sobre este tema, por eso me lo preguntaba de vez en cuando.

 

Aunque…

 

…No es como si esta conversación fuera más fácil que otras.

 

Moyong Hi-ah era una chica inteligente.

 

Incluso si no era tan lista como el Cerebro del Culto Demoníaco, el Hombre del Cielo, su talento era reconocido por muchos.

 

Por eso me costaba mantener una conversación con ella.

 

Probablemente no habría tenido nada que decirle si no tuviera experiencia con ella en mi vida pasada.

 

No pensaba que fuera tonto, pero definitivamente me faltaba cerebro para hablar con personas inteligentes como ella.

 

Siempre tenía la opción de rechazar su conversación, pero no lo hacía por una razón.

 

¿Cómo podría, si a ella le gustaba mucho?

 

Era problemático cómo Moyong Hi-ah parecía tan alegre cada vez que teníamos una conversación como esta, algo poco común en ella.

 

"¿De ahora en adelante?"

 

"Sí."

 

"…¿De qué estábamos hablando?"

 

"Apareció un Demonio Rojo. ¿Qué crees que pasará de ahora en adelante?"

 

Moyong Hi-ah me habló con los ojos brillando.

 

La aparición de un Demonio Rojo.

 

Incluso el Rey del Veneno envió una carta a la Alianza Murim reportando este incidente.

 

"Hmm…"

 

¿Qué creo que pasará ahora?

 

"Será un desastre."

 

Era obvio.

 

Los Demonios Rojos eran mucho más difíciles de cazar que los Azules.

 

Requería al menos artistas marciales de alto nivel en el Reino Pico que fueran fuertes y rápidos.

 

Claro, era posible que un grupo de artistas marciales de primer nivel lo derribara siempre que estuvieran bien entrenados, pero eso solo era posible si sabían cómo cazarlos.

 

Debido a eso, era más común que un grupo de artistas marciales del Reino Pico cazara Demonios Rojos.

 

Ese era el problema.

 

A los artistas marciales se les llamaba comúnmente maestros al alcanzar el Reino Pico.

 

Podía haber muchísimos, pero no eran tan comunes.

 

En realidad, la gente se reunía impactada al ver a un artista marcial del Reino Pico en zonas menos populares.

 

¿Y aún así se necesitaban varios artistas de ese nivel para cazar a un solo Demonio Rojo?

 

Eso implicaría un gran cambio en el método de caza de Demonios, lo que básicamente significaba una reorganización entre los espadachines.

 

Los artistas marciales de alto nivel serían más demandados y su valor aumentaría.

 

Si algo que se había mantenido igual durante cientos de años en las Llanuras Centrales cambiaba,

 

"Entonces sería una ola de desastres."

 

Eso significaba desastre.

 

Al menos, eso lo sabía por mi experiencia en mi vida pasada.

 

Moyong Hi-ah asintió ligeramente después de oír mi respuesta.

 

"…Como esperaba, pensaste lo mismo que yo."

 

"…Eh, sí."

 

No es que lo haya pensado realmente, ya que en realidad lo viví yo mismo.

 

Pero si ella está satisfecha con mi respuesta, entonces…

 

"Debes estar ocupada también, ¿No?"

 

"¿Eh?"

 

"Asumo que este incidente ya fue reportado al Clan Moyong."

 

"…"

 

Moyong Hi-ah abrió los ojos por un momento tras escuchar mis palabras, y luego sonrió.

 

Seguía teniendo esa mirada seductora.

 

"¿Cómo lo supiste?"

 

"¿Por qué no lo sabría?"

 

Esto también era obvio.

 

La gente busca beneficios.

 

No importa si son comerciantes o no.

 

Esto se aplica a todos.

 

Incluso si la aparición del Demonio Rojo significaba peligro para el mundo, era inevitable que hubiera quienes buscaran obtener algo de eso.

 

Especialmente aquellos en una clase más alta.

 

El Rey del Veneno es un ejemplo.

 

El Rey del Veneno envió una carta a la Alianza.

 

¿Llegaría a tiempo?

 

Al menos, no llegaría tarde.

 

Después de todo, el Rey del Veneno no quería que el mundo se desordenara.

 

Sin embargo…

 

Este incidente seguramente fue reportado a su propio clan antes que a nadie.

 

Esto era información.

 

La aparición de un Demonio Rojo era una noticia enorme.

 

Obtener ese dato antes que la Secta de los Mendigos o Hao ya tenía un valor increíble.

 

Significaba que podían actuar antes que nadie para obtener ventaja.

 

¿Pero fue solo el Rey del Veneno quien lo hizo?

 

Moyong Hi-ah definitivamente también lo hizo, y lo mismo va para el Clan Pe.

 

No pensaba que fuera algo malo.

 

Así vive la gente, después de todo.

 

Por ese pensamiento, recordé algo que había olvidado.

 

Oh, yo también debí haber enviado una carta.

 

Ya sabía que todos iban a actuar rápido, y aun así no mandé nada.

 

Si la enviaba ahora ya sería tarde… ¿Qué debía hacer?

 

Aunque no creo que Padre se enoje conmigo.

 

"Hmm…"

 

Fruncí el ceño por la preocupación,

 

"No parece que hayas enviado una, ¿Cierto, Joven Maestro Gu?"

 

Moyong Hi-ah, por supuesto, mencionó exactamente lo que estaba pensando.

 

"…¿Cómo lo supiste?"

 

"Simplemente me enteré por casualidad."

 

"…"

 

La miré con sospecha al oírla.

 

¿Casualidad, dices?

 

Al menos hazlo creíble. Como siempre, esta mujer daba miedo.

 

¿Cómo diablos supo que no había enviado una carta?

 

Cuando seguí mirándola sin palabras, me habló con una sonrisa.

 

"Así que la envié por ti."

 

"¿Hm? Espera, ¿Qué?"

 

"La envié a Lady Mi usando mi nombre, ¿Está bien? Pensé que sería la forma más rápida."

 

"¿Eh?"

 

¿De qué estaba hablando?

 

…¿Ella envió una carta en mi lugar?

 

"La suegra la última vez– Digo, Lady Mi, ella…"

 

"Oye, ¿Cómo la llamaste justo ahora?"

 

"Me pidió que la informara si pasaba algo contigo, así que le envié una carta personalmente."

 

"¿Puedes responder mi pregunta anterior?"

 

Seguí preguntándole qué había dicho antes, dudando si lo había escuchado mal, pero Moyong Hi-ah siguió hablando como si no pudiera oírme.

 

Me dolería la boca insistiendo, así que suspiré, me recosté en el asiento y cerré los ojos de nuevo.

 

Fuera como fuera la situación, le agradecía haber hecho eso, así que estaba bien al final.

 

No es como si Moyong Hi-ah hubiera escrito algo raro en la carta.

 

"…"

 

"…"

 

Abrí los ojos de inmediato y le pregunté a Moyong Hi-ah.

 

"…No escribiste nada más en la carta aparte del incidente, ¿Verdad?"

 

Moyong Hi-ah se sobresaltó al oírme.

 

¿Qué fue esa reacción? ¿Por qué actúa así? Me está poniendo nervioso.

 

"Tú…"

 

"Oh, debes de estar cansado, Joven Maestro. Ya deberías dormir."

 

"Espera, eso no es lo importante…"

 

"Este asiento es bastante duro, ¿Quieres usar mis piernas como almohada?"

 

"…"

 

Hohoho.

 

Moyong Hi-ah intentando evadirlo con una sonrisa me dio escalofríos.

 

…No hizo nada raro, ¿Cierto?

 

Tenía que rezar para que no lo haya hecho.

 

******************

 

Flutter.

 

Un ave batió sus alas en el cielo.

 

Luego de descender suavemente, se acercó a un joven que estaba quieto, observando la luz del sol.

 

Cuando el joven extendió el brazo, el ave se posó sobre él.

 

El joven, acostumbrado a esto, desató la carta que estaba atada a la pata del ave.

 

Fwap.

 

Al abrir la carta, empezó a leer su contenido.

 

No había más de seis o siete líneas escritas.

 

Sin embargo, tenía información que dejó al joven impactado.

 

Tras leerlo lentamente todo,

 

"Haha."

 

El joven empezó a reír sin darse cuenta.

 

Sus ojos se curvaron en forma de medias lunas con su sonrisa, y sus brillantes pupilas rojas se ocultaron poco después.

 

"El flujo ha cambiado."

 

El Demonio de Sangre se rió con felicidad.

 

Un cambio que tanto deseaba por fin había ocurrido, ¿Cómo no iba a estar feliz?

 

¿Qué pasó?

 

El Demonio de Sangre recordó el rostro de un joven.

 

Solo había una persona que le venía a la mente.

 

Bueno, ya ni siquiera se le podía llamar persona.

 

Hehe…

 

El Demonio de Sangre se rió al pensarlo.

 

"¿Es gracias a ti, o por mi culpa?"

 

¿Fue obra suya, o responsabilidad del Demonio de Sangre?

 

Fuera cual fuera, el Demonio de Sangre lo veía como algo positivo.

 

"Espero mucho de ti."

 

Rezaba para que Gu Yangcheon siguiera haciendo lo que hacía.

 

Quería que creciera y se volviera tan grande como el cielo.

 

Ese era el deseo del Demonio de Sangre.

 

Solo entonces…

 

"Disculpa por haberte hecho esperar."

 

El Demonio de Sangre dobló la carta y la guardó en su bolsillo tras percibir una presencia.

 

Arregló su ropa y se dio la vuelta.

 

Cuando lo hizo, sus pupilas rojas se transformaron en pupilas negras normales.

 

"Para nada. Es un honor conocerlo."

 

"…"

 

Un anciano mostró una expresión de cautela tras escuchar al Demonio de Sangre.

 

"Quiero saber por qué querías verme, Espada Meteoro."

 

El anciano, no, la Espada de Wudang, el Líder de la Secta Wudang y uno de los espadachines más representativos de las Llanuras Centrales, habló con Jang Seonyeon, que estaba frente a él.

 

En respuesta, Jang Seonyeon habló con una suave sonrisa.

 

"Estoy aquí porque me atreví a hacerle una propuesta."

 

"¿Tú, a mí?"

 

La Espada de Wudang sonrió con sorna al oír a Jang Seonyeon.

 

La Espada Armónica había dejado su puesto como Líder de la Alianza y la reputación de la Espada Meteoro ya no brillaba tanto como antes.

 

¿Y ni siquiera la Espada Armónica, sino su hijo, venía a hacerle una propuesta?

 

La Espada de Wudang no estaba para nada impresionado.

 

Ya tenía bastante dolor de cabeza con el Dragón del Agua.

 

"Lo lamento, pero–"

 

Justo cuando estaba a punto de irse para no perder su tiempo,

 

"Escuché que quería el puesto de Líder de la Alianza."

 

"…"

 

Pero se detuvo tras escuchar lo que Jang Seonyeon dijo.

 

Después de ver su reacción, Jang Seonyeon habló con una sonrisa aún más amplia que antes.

 

"Creo que puedo ayudarle con eso… ¿Le interesa?"

 

Las pupilas de la Espada de Wudang empezaron a temblar tras escuchar a Jang Seonyeon. No importaba cómo se había enterado.

 

Era bien sabido que la Espada de Wudang soñaba con convertirse en Líder de la Alianza.

 

"Espada Meteoro… ¿Estás jugando con los mayores?"

 

La voz de la Espada de Wudang estaba teñida de ira.

 

No era más que un joven de apenas veinte años.

 

Además, era hijo de la Espada Armónica, quien fue el anterior Líder de la Alianza.

 

¿Y ahora Jang Seonyeon venía a proponer algo así?

 

La Espada de Wudang no lo comprendía.

 

Expresó su enojo, pero la Espada Meteoro mantenía la misma sonrisa de antes.

 

"Por favor, escúcheme. Puede castigarme si quiere, después de alcanzar nuestros objetivos."

 

"…"

 

La Espada de Wudang miró a Jang Seonyeon por un momento.

 

Se preguntó qué debía hacer.

 

Sin embargo, no lo pensó por mucho tiempo.

 

Estaba más que dispuesto a escucharlo si eso era todo lo que tenía que hacer.

 

Además, podía castigarlo como dijo si todo resultaba ser una tontería.

 

Con ese pensamiento, la Espada de Wudang cambió de opinión y decidió quedarse.

 

Un destello rojo cruzó brevemente por los ojos de Jang Seonyeon, pero la Espada de Wudang no lo notó.


¡Sí te gusto el capítulo por favor comparte esta página para que más personas puedan ver nuestros proyectos! ¡Te lo agradecería un montón!

Comentarios