¡No Toques!
Ya
habían pasado diez días desde que caí en este mundo.
Con
cada día que despertaba, perdía la esperanza de que todo fuera un sueño, y para
este punto, mi objetivo era escapar de este mundo haciendo lo que este mundo
quería que hiciera.
¡Craack–!
Le
rompí los huesos a alguien.
"Urgh."
Murió
tras un breve quejido. La palabra justicia estaba escrita en su atuendo blanco.
Era
un artista marcial de la Alianza Murim.
"…"
Su
cuello se inclinó hacia abajo y sus ojos se pusieron completamente en blanco.
Tras confirmar su muerte, me sacudí las manos.
Esto
aún se sentía como la vida real.
…Qué
repulsivo…
Había
muchos cadáveres a mi alrededor.
La
mayoría eran artistas marciales de la Alianza que vestían atuendos blancos,
pero también había algunos Humanos Demoníacos aquí y allá.
No
eran del Ejército de la Llama Negra, sino del Ejército de la Espada Fantasmal.
Mientras
observaba esos cuerpos,
Dribble–
Empecé
a sentir algo correr por mi mejilla.
Lo
limpié con el pulgar, y vi sangre.
"…"
Fruncí
el ceño al ver la escena.
Sabía
dónde me había herido.
Fue
una herida que recibí porque no estaba preparado cuando los artistas marciales
de la Alianza me emboscaron.
No
fue una emboscada bien planeada, ni tampoco fue porque bajé la guardia.
Ya
los había detectado de antemano con mis sentidos, y como mucho estaban apenas
por encima del Reino Pico.
No
había manera de que esos bastardos me derrotaran.
Sin
embargo…
Dudé.
Fue
porque dudé en matarlos.
Cuando
se lanzaron hacia mí, vi desesperación, miedo y su deseo de sobrevivir en sus
ojos.
Por
eso, mi mano se detuvo en el aire por un momento debido a mi vacilación.
Ese
corto instante fue suficiente para que una de sus espadas rozara mi mejilla, y
por eso estaba sangrando ahora.
…Qué
molesto.
Estaba
furioso.
Por
haber sido traído a este maldito mundo, y por estar luchando en esta maldita
guerra.
Incluso
los ojos de esos bastardos me molestaban.
Tengo
que escapar ya.
Por
eso me sentía más desesperado.
Quería
salir de este infierno lo antes posible.
Step.
Mientras
me sentía más exhausto, empecé a sentir la presencia de alguien acercándose por
detrás.
"Recién
llegado."
"…!"
Era
una voz somnolienta. Dentro de esa voz, había algo misterioso y ominoso.
Solo
había una persona con una voz así.
"…Sí,
Vicecapitana."
Me
incliné cuando la Espada Demoníaca se acercó a mí.
Después
de detenerse a unos pocos pasos de distancia, habló con su tono característico.
"…¿Qué…
estás haciendo…?"
"…"
"…Podrías…
morir así."
"Lo
siento."
Otros
Humanos Demoníacos a nuestro alrededor observaron la situación con una mirada
desconcertada por su repentina reprimenda, pero yo sabía a qué se refería.
Uno
de los cadáveres a nuestro alrededor estaba especialmente más cortado que los
otros cuerpos. Ese era el cuerpo del artista marcial que me había herido en la
mejilla.
Cuando
la espada del bastardo rozó mi mejilla, la Espada Demoníaca liberó su flujo de espada
contra él.
Golpeó
instantáneamente el cuello del bastardo, y tras ser cortado decenas de veces
por su ataque, murió en el acto.
Me
horrorizó ver su cuerpo cortado en muchos pedazos.
Ver
cosas así me hizo darme cuenta verdaderamente de lo que era este mundo.
Namgung
Bi-ah no habría elegido un método tan violento para matar a alguien.
Ella
habría elegido matar a una persona con un solo corte limpio, si tenía que
hacerlo, claro.
…Hah.
Solté
una risa incrédula ante el pensamiento.
Antes
comparaba a Namgung Bi-ah con la Espada Demoníaca, y ahora estaba tratando de
buscar a Namgung Bi-ah en la Espada Demoníaca.
Era
un sentimiento repugnante. Qué egoísta estaba siendo.
¿Estaba
tratando de fingir que nada de esto había pasado?
A
pesar de haberle dicho a Tang Jaemoon que los arrepentimientos eran una carga
que una persona debía llevar el resto de su vida, tal vez era yo quien quería
olvidarlos todos.
¿Era
por eso que ella me estaba mostrando este mundo?
¿Para
asegurarse de que nunca olvidara estos recuerdos?
Si
ese es el caso, entonces es aterrador.
Este
maldito mundo ahora se sentía extrañamente aterrador.
"…"
Después
de que la Espada Demoníaca hizo una expresión extraña,
Clack–
Guardó
su espada y se dio la vuelta.
"…Ten
cuidado."
"Sí,
no cometeré ese error la próxima vez."
Tras
hablar brevemente, desapareció.
Una
vez que la Espada Demoníaca se fue, los otros Humanos Demoníacos a mi alrededor
empezaron a hablar como si lo hubieran estado conteniendo todo el tiempo.
Se
volvió bastante ruidoso para mis oídos.
Entonces,
alguien se me acercó y me hizo una pregunta.
"Eh,
hermano menor."
Aún
no me acostumbraba a la forma en que me llamaban.
"¿Sí?"
"…¿Por
casualidad tuviste algún tipo de relación con la Vicecapitana en el
pasado?"
"…¿Perdón?"
¿Qué
estaba preguntando de repente?
"¿A
qué te refieres con eso?"
Cuando
le pregunté con el ceño ligeramente fruncido, el Humano Demoníaco empezó a
explicar.
"La
Vicecapitana… A ella nunca la he visto tratar a alguien con tanta
amabilidad."
El
Humano Demoníaco no dijo 'Aparte del Capitán'- porque no era necesario.
"¿Relación?"
No
sabía qué le hizo pensar eso.
"No
hay nada de eso."
Pero
hablé con una sonrisa.
¿Una
relación pasada con la Espada Demoníaca?
No
había manera de que eso fuera posible.
Al
menos, ella y yo en este mundo…
No
nos conocemos.
Con
eso me bastaba.
******************
La
base principal del Ejército de la Llama Negra estaba cerca de Sichuan.
Tal
vez habría sido diferente si la Guerra del Demonio Celestial hubiera comenzado
realmente, pero desde que lograron tomar Sichuan, no se les había encomendado
nada demasiado importante.
Como
mucho, mataban a las tropas restantes de la Alianza Murim que se escondían en
Sichuan, como hoy, o buscaban cualquier problema en la zona.
Sin
embargo, debido a que el Venerable Celestial estaba cerca de Sichuan, se
colocaron más guardias alrededor de los límites.
El
hecho de que el Ejército de la Llama Negra estuviera patrullando ya lo decía
todo.
Cada
persona en el Ejército de la Llama Negra era un artista marcial fuerte que
rivalizaba con los vicecapitanes de la Alianza Murim, y setenta y siete
personas bajo el mando del Capitán eran tan poderosos como Ancianos y Señores
de otros clanes.
El
hecho de que personas como ellos estuvieran patrullando mostraba cuánta
influencia tenía la aparición del Venerable Celestial.
Observé
a la Espada Demoníaca desde lejos mientras se dirigía al cuartel general.
El
Venerable Celestial peleará contra la Espada Demoníaca.
Me
acordé de aquel entonces.
Fue
nada más y nada menos que la Espada Demoníaca quien se enfrentó al Venerable
Celestial mientras todos dirigían su atención a él.
La
espada del Clan Namgung se usó para pelear contra el Clan Namgung.
Además,
el objetivo de la Espada Demoníaca era borrar por completo la sangre del Clan
Namgung del mundo.
Sin
embargo, hubo un problema.
No
tuvo éxito.
No
era una tarea fácil vencer al Venerable Celestial.
Incluso
si la Espada Demoníaca era una maestra que había heredado el título de Reina de
la Espada, el Venerable Celestial era un viejo monstruo que había estado en la
cima durante décadas en las Llanuras Centrales.
No
había manera de que la Espada Demoníaca pudiera ganarle fácilmente.
Ella
también lo sabía, por eso trajo todas sus fuerzas para enfrentarlo.
Pero
ocurrió un problema.
El
Venerable Deshonrado atacó por sorpresa el cuartel general.
Mientras
el Venerable Celestial atraía toda la atención, el Venerable Deshonrado atacó
el cuartel principal, y yo lo enfrenté.
Ahí
fue cuando ocurrió el problema.
…Fue
entonces cuando ella vino a mí.
La
mayoría de los Humanos Demoníacos en el área murieron mientras luchaba contra
el Venerable Deshonrado, y justo cuando estaba a punto de ser asesinado por él,
apareció la Espada Demoníaca y me ayudó a escapar.
Pero
como la Espada Demoníaca dejó a su ejército para ayudarme, su ejército que
estaba peleando contra el Venerable Celestial fue diezmado.
El
Puño Silencioso, que apenas logró sobrevivir, terminó perdiendo uno de sus
brazos.
Por
suerte, el Venerable Celestial se retiró tras resultar herido.
El
Venerable Deshonrado, que también resultó herido, terminó siendo perseguido por
los refuerzos del Ejército Negro Celestial, y justo cuando estaba por ser
atacado por el Capitán del ejército, el Demonio Inquebrantable, Peng Woojin
apareció y salvó al Venerable Deshonrado.
Todas
estas cosas pasaron porque la Espada Demoníaca dejó su batalla para salvarme.
Además,
esto llevó a la muerte de la Espada Demoníaca.
Luchó
contra el Venerable Deshonrado con la herida que recibió del Venerable
Celestial.
Afortunadamente,
logramos escapar del Venerable Deshonrado, y no perdimos Sichuan, pero debido a
las heridas que recibió mientras luchaba contra el Venerable Celestial y el
Venerable Deshonrado, terminó muriendo por un ataque inesperado sin poder
reaccionar a tiempo.
No.
Tengo
que decir lo que realmente pasó.
La
Espada Demoníaca era más que capaz de escapar.
Pudo
haber sobrevivido si hubiera querido.
Sin
embargo…
Murió
por mí al final.
Volvió
por mí, y murió por mí.
Qué
recuerdo de lo más mierda fue ese.
¿Ella
lo sabía? No, no creo que lo supiera.
La
verdad es que, yo quería morir en ese momento.
Al
principio, deseaba morir a manos de mi padre, y cuando eso falló, deseé morir a
manos del Venerable Deshonrado.
En
todas estas peleas, solo había deseado morir.
Empecé
a preguntarme mientras observaba la espalda de la Espada Demoníaca.
…¿Tomarás
la misma decisión esta vez también?
Ya
lo sabía.
Este
mundo no era diferente al que viví en mi vida pasada. Era muy probable que la
Espada Demoníaca tomara la misma decisión. Quizás era posible que yo
interviniera y cambiara la historia.
Sin
embargo, no fui capaz de hacer nada a pesar de saberlo.
Si
cambio el curso de los acontecimientos ahora…
…La
Espada Celestial… morirá.
Cerré
los ojos con fuerza y pensé para mí mismo.
La
Espada Celestial moriría.
Sí,
estaba en ese tipo de situación.
Por
eso no fui capaz de hacer nada en este momento.
Crack.
Rechiné
los dientes.
Cerré
el puño mientras miraba a la Espada Demoníaca.
Por
eso llamaba a este mundo un infierno.
No
importa qué decisión tome, alguien morirá.
Aunque
esto solo fuera una ilusión, no era fácil tomar una decisión.
La
muerte de la Espada Demoníaca era una gran parte de mi arrepentimiento, pero si
decidía salvarla, entonces la Espada Celestial moriría.
No
era posible escapar del destino del arrepentimiento en este mundo.
Pero…
¿Y si dejaba morir a la Espada Demoníaca?
¿Estaría
bien con tomar la misma decisión que en mi vida original?
Sigh…
Después
de pensar tan profundamente, de repente recordé lo que dijo Tang Jaemoon.
Dijo
que no importaba qué decisión tomara, y que nada cambiaría.
"…"
Ahora
que lo pienso, no estaba mintiendo en absoluto. Tal vez me lo dijo porque
esperaba que esta situación sucediera desde el principio.
Si
ese era el caso, entonces tenía un pasatiempo cruel.
¿No
importa qué decisión tome?
Maldita
mierda.
¿Cómo
no va a importar?
No
era posible.
Incluso
si todo esto era una ilusión, no había forma de que pudiera ver todo
desarrollarse sin hacer nada, cuando todo parecía tan real.
"…"
Por
eso estaba tan confundido y agotado.
No
podía tomar una decisión.
Por
supuesto, afortunadamente había una solución.
De
cierta forma, era tanto la ruta más fácil como la más difícil que podía tomar.
Pero
planeaba elegir este método si… tenía que tomar una decisión.
Creak–
Después
de llegar a nuestro territorio, seguí caminando con sangre por todo mi cuerpo.
Ya
no me molestaba el olor a sangre que llenaba el lugar.
Era
fácil acostumbrarme, ya que había vivido este tipo de vida antes.
Con
ese pensamiento, llegué al cuartel general después de caminar por el pasillo,
pero por alguna razón sentía que el hedor era peor de lo normal.
¿Hmm?
Parecía
que no era el único que notaba esta diferencia, ya que comencé a sentir
ligeramente el Qi de Combate de la Espada Demoníaca que caminaba delante.
Parecía
estar incómoda por algo.
Slam.
Cuando
la enorme puerta se abrió y reveló la habitación, vi a otras personas dentro.
Verifiqué
quiénes eran. Comparados con el Ejército de la Llama Negra, tenían un olor a
sangre más agudo, y su intención asesina era tan intensa que se filtraba de sus
cuerpos.
Todos
tenían espadas en la cintura, y al ver eso, supe quiénes eran estos bastardos.
"Hehe."
Levanté
la vista al escuchar una risita.
Alguien
estaba sentado en el asiento que pertenecía al Capitán del Ejército de la Llama
Negra.
Su
cabello largo le llegaba al suelo, y tenía una sonrisa en el rostro.
Un
escalofrío recorrió mi espalda por su Qi ominoso e intención asesina.
…Ese
bastardo.
Fruncí
el ceño al ver el rostro del bastardo.
Las
personas que llenaban esta habitación eran Humanos Demoníacos del Ejército de
la Espada Fantasmal.
Eso
significaba que el hombre sentado en el asiento central era su líder.
El
Demonio de la Espada.
Era
el Demonio de la Espada, conocido por su obsesión con la masacre.
El
Demonio de la Espada sonrió al ver a la Espada Demoníaca.
"Ha
pasado un tiempo, Reina de la Espada Demoníaca."
"…"
La
Espada Demoníaca respondió desenvainando su espada, y susurró en voz baja al
Demonio de la Espada,
"…Bájate…"
"¿Hmm?
¿Qué dijiste?"
"Bájate…
de ahí. Ese asiento… no te pertenece."
Qi
de Combate empezó a emanar del cuerpo de la Espada Demoníaca.
Sentí
mi Dantian estremecerse por la diferencia de fuerza entre nosotros.
A
pesar de sentir tanto Qi de Combate de parte de la Espada Demoníaca, el Demonio
de la Espada seguía riendo.
"Cielos,
el Capitán ni siquiera está aquí. ¿No crees que estás siendo demasiado seria
por algo como esto?"
"…"
Justo
cuando la Espada Demoníaca estaba por cargar su Qi de Rayo tras escuchar su
respuesta,
Creak.
El
Demonio de la Espada se levantó del asiento y comenzó a bajar.
Ese
loco bastardo.
Había
pasado tiempo desde la última vez que vi al Demonio de la Espada, pero seguía
siendo el mismo lunático de siempre.
Si
el Puño Silencioso era alguien poco apto para ser un Humano Demoníaco, el
Demonio de la Espada era todo lo contrario.
Step.
El
Demonio de la Espada bajó los escalones y se acercó a la Espada Demoníaca.
"Escuché
que el Capitán se fue a algún lado. ¿Sabes a dónde fue, Reina de la Espada
Demoníaca?"
"…"
Ella
no respondió a su pregunta. En lugar de eso, continuó mirándolo fijamente.
Por
eso, el Demonio de la Espada chasqueó la lengua una vez y habló,
"Esos
ojos fieros tuyos todavía me molestan un poco. Serías increíblemente hermosa si
no fuera por esos ojos."
Qi
comenzó a elevarse entre los miembros del Ejército de la Llama Negra tras
escuchar al Demonio de la Espada.
Y
a la par, la intención asesina del Ejército de la Espada Fantasmal se volvió
más densa.
En
esa situación, solo pude poner una expresión de desconcierto.
Estos
locos bastardos.
Vinieron
de repente, y ahora intentan pelear entre ellos.
Ni
siquiera sabía que algo así había pasado porque usualmente estaba fuera del
territorio.
Mientras
observaba esta relación, que era mucho peor de lo que imaginaba,
"¿Hmm?"
"…!"
El
Demonio de la Espada hizo contacto visual conmigo de repente.
Sus
ojos, llenos de intención asesina, se clavaron en mí.
Entonces,
empecé a ver diversión en sus ojos.
"¿Un
rostro nuevo, eh? ¿Quién es este bastardo?"
El
Demonio de la Espada dio un paso hacia mí con una sonrisa horrenda.
¿Qué
debería hacer? Fruncí ligeramente el ceño por la repentina situación en la que
me encontraba, y la expresión del Demonio de la Espada también cambió.
"¿Qué
es esa expresión tuya? Parece que no sabes quién soy. Por eso te atreves a
poner esa cara frente a mí."
Estoy
jodido.
Caí
mal con este pedazo de mierda.
Debería
haber estado mirando al suelo. Qué fastidio es esto.
Reach–
El
Demonio de la Espada extendió la mano hacia mí, levantó mi barbilla y comenzó a
observarme.
"Ustedes
no educan bien a su gente, por eso existen bastardos como este. ¿Eres nuevo?
Definitivamente luces diferente, pero te sientes extrañamente similar a ese
hombre."
Ni
siquiera tenía que preguntar a quién se refería.
El
Demonio de la Espada continuó hablando mientras fruncía el ceño,
"…Por
eso, no me agradan tus ojos. Si te atreves a mirarme con esos ojos…"
Fue
entonces.
"Te
educaré y te los arrancaré de un–"
¡Slaaam–!
Una
enorme cantidad de Qi de Combate explotó de repente y envió al Demonio de la
Espada volando contra una pared.
¡Slam–!
¡¡Craaack–!!
El
polvo se dispersó por todas partes, y los escombros destrozados por el impacto
cayeron sobre el Demonio de la Espada.
Todo
ocurrió en un instante.
Observé
con ojos atónitos a la persona que hizo eso.
Zap.
Zaaap.
La
Espada Demoníaca siguió emitiendo su Qi de Combate como si no tuviera intención
de ocultarlo tras lanzar al Demonio de la Espada contra la pared.
Se
mezclaba con su Qi de Rayo, y su presencia llenaba completamente la sala.
Se
sentía como si el entorno a nuestro alrededor estuviera colapsando por lo
poderosa que era su presencia.
Los
miembros del Ejército de la Espada Fantasmal ni siquiera pudieron desenvainar
sus espadas en esta repentina situación, y la Espada Demoníaca empezó a hablar
mientras expandía su Qi.
"…¡No
lo toques… con esa mano asquerosa…!"
La Espada Demoníaca le habló al Demonio de la Espada con un tono claramente furiosa, algo raro de ver en ella.
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